Los hijos, una herencia de Dios

Por: pastor Daniel Brito

9 de mayo de 2009 (Noche)
TITULO: Los hijos, una herencia de Dios
TEXTO:   Salmo 127:3
 «Los hijos son una herencia del Señor, 
      los frutos del vientre son una recompensa.»

INTRODUCCIÓN: Primeramente, un ¡Feliz día a todas las mamás! La Biblia nos habla mucho sobre la maternidad y, sobre la educación de los hijos. Estamos viviendo en tiempos que las diferentes sociedades rechazan la procreación de los hijos(as), creyendo que el mundo está demasiado poblado, o por la crisis económica. Pero el Texto Sagrado nos dice lo opuesto, porque nos enseña que los hijos(as) son una recompensa. Estaremos hablando de algunos ejemplos de madres en el Texto Sagrado, que hicieron buenas y malas decisiones. Es así como comenzamos en esta noche nuestra lección.
1. Dios, como el Fundamento del hogar. — (Salmo 127:1-5) «Si el Señor no edifica la casa, en vano se esfuerzan los albañiles. Si el Señor no cuida la ciudad, en vano hacen guardia los vigilantes. 2 En vano madrugan ustedes, y se acuestan muy tarde, para comer un pan de fatigas, porque Dios concede el sueño a sus amados. 3 Los hijos son una herencia del Señor,  los frutos del vientre son una recompensa. 4 Como flechas en las manos del guerrero  son los hijos de la juventud. 5 Dichosos los que llenan su aljaba con esta clase de flechas. No serán avergonzados por sus enemigos cuando litiguen con ellos en los tribunales.»
a. Este hermoso Salmo, pertenece al grupo de los Salmos graduales, que los Israelitas cantaban cuando subían a Jerusalén a adorar. Sin duda alguna, este Salmo 127 y el 128, son salmos de la vida piadosa en el hogar. Salmos que revelan que sin Dios el hogar no tiene BUEN FUNDAMENTO, y por eso necesita la ayuda de Dios todos los días. 
b. Pero hay algo muy significante en este Salmo y, es que nos muestra que no somos nosotros los que les damos a Dios nuestros hijos(as), sino que los hijos(as), son la HERENCIA DEL SEÑOR. 
i. En estos días donde muchos no quieren tener hijos(as), e incluso, es penado en algunas sociedades como China, que exigen que las familias tengan solamente un hijo(a), el Texto Sagrado nos recuerda que los hijos(as) son HERENCIA DEL SEÑOR, y son una bendición para toda madre y todo padre.  
2. El favoritismo de Rebeca. — El primer ejemplo de una madre que tenemos, es Rebeca, la esposa de Isaac. Esta mujer era estéril, y después de 20 años de casados, su esposo Isaac oró por ella y, ella salio en estado y dio a luz a dos hijos varones. 
a. Veamos lo que nos dice el Texto Sagrado en Génesis 25:20-26:
i. «Isaac tenía cuarenta años cuando se casó con Rebeca, que era hija de Betuel y hermana de Labán. Betuel y Labán eran arameos de Padán Aram.21 Isaac oró al Señor en favor de su esposa, porque era estéril. El Señor oyó su oración, y ella quedó embarazada.22 Pero como los niños luchaban dentro de su seno, ella se preguntó: «Si esto va a seguir así, ¿para qué sigo viviendo?» Entonces fue a consultar al Señor,23 y él le contestó:  «Dos naciones hay en tu seno;  dos pueblos se dividen desde tus entrañas. Uno será más fuerte que el otro,  y el mayor servirá al menor.» 24 Cuando le llegó el momento de dar a luz, resultó que en su seno había mellizos.25 El primero en nacer era pelirrojo, y tenía todo el cuerpo cubierto de vello. A éste lo llamaron Esaú. 26 Luego nació su hermano, agarrado con una mano del talón de Esaú. A éste lo llamaron Jacob. Cuando nacieron los mellizos, Isaac tenía sesenta años»
b. Debemos notar que esta era una pareja piadosa, e Isaac era el Patriarca que heredaba la promesa dada a Abraham por parte de Dios que le iba a dar una descendencia como la arena del mar, y por medio de él, esa descendencia seguía. Pero aun así, esta pareja cometió grandes errores en la crianza de sus hijos. Es aquí donde tenemos una gran lección que nos muestra el error que una madre o un padre pueden cometer, cuando prefieren a un hijo(a) por otro. 
i. (Versos 27-28) «Los niños crecieron. Esaú era un hombre de campo y se convirtió en un excelente cazador, mientras que Jacob era un hombre tranquilo que prefería quedarse en el campamento.28 Isaac quería más a Esaú, porque le gustaba comer de lo que él cazaba; pero Rebeca quería más a Jacob.»
c. En esta historia Rebeca que prefiere a su hijo menor (aunque eran mellizos), había ido a consultar a Dios cuando estaba embarazada y, los dos bebés peleaban en su vientre. Dios le dijo a ella que dos naciones estaban en su vientre, y que el menor serviría al mayor. Ella sabía que el menor era Jacob, el que había nacido agarrado del talón de su hermano Esaú. Rebeca en su preferencia hacia su hijo menor, hizo lo que las madres y padres no deben hacer y, es querer ayudar a Dios. Es muy claro que, Dios no necesita ayuda. 
i. Rebeca supo cuando Isaac que ya estaba ciego, le dijo a su hijo mayor Esaú que cazara un animal del campo y lo guisara, para así darle la bendición. De ahí que ella le dijo a Jacob que, suplantara a su hermano, poniéndoles pieles en los brazos, y haciendo un guisado, para que su padre lo bendijera a él, en vez de a Esaú el mayor. 
ii. Rebeca no solamente estaba engañando a su esposo, sino a Esaú, al hijo que le pertenecía la bendición.  Aquellos que conocen la historia, sabrán que Esaú le había vendido la primogenitura a su hermano Jacob mucho antes, cuando llegando cansado del campo, se encontró conque Jacob estaba haciendo lentejas, y veamos lo que el relato dice en Génesis 25:29-34:
(1) «Un día, cuando Jacob estaba preparando un guiso, Esaú llegó agotado del campo y le dijo: 30 —Dame de comer de ese guiso rojizo, porque estoy muy cansado. (Por eso a Esaú se le llamó Edom.) 31 —Véndeme primero tus derechos de hijo mayor —le respondió Jacob. 32 —Me estoy muriendo de hambre —contestó Esaú—, así que ¿de qué me sirven los derechos de primogénito? 33 —Véndeme entonces los derechos bajo juramento —insistió Jacob.  Esaú se lo juró, y fue así como le vendió a Jacob sus derechos de primogénito.34 Jacob, por su parte, le dio a Esaú pan y guiso de lentejas. Luego de comer y beber, Esaú se levantó y se fue. De esta manera menospreció sus derechos de hijo mayor.»
iii. Esto muestra que Esaú era un hombre profano, como nos dice el Texto Sagrado en Hebreos 12:16:
(1) «y de que nadie sea inmoral ni profano como Esaú, quien por un solo plato de comida vendió sus derechos de hijo mayor.»
iv. Pero eso no excusa lo que Rebeca hizo, y ella tuvo que pagar las consecuencias, así como también  nosotros tenemos que pagar las consecuencias por nuestras malas decisiones. Cuando Esaú se enteró de lo que su hermano hizo, se puso a planear quitarle la vida a Jacob su hermano.. Isaac y Rebeca tuvieron que enviar a su hijo a la tierra de los familiares de Rebeca, con su tío Labán, a unas 500 millas de distancia. 
v. Rebeca nunca más vio a su hijo Jacob mientras vivía, ni tampoco conoció a sus nietos. Por parte de su hijo Esaú, él se dio cuenta que sus padres no querían que ellos se casaran con mujeres del área, por ser impías, y por eso se casó con DOS mujeres cananeas, lo que hizo que Rebeca sufriera por eso grandemente.
d. Para concluir este punto, hay varias lecciones en este punto, y el primero es que NUNCA se debe preferir a un hijo(a) por otro. 
i. El segundo es que tarde o temprano, las CONSECUENCIAS por los errores vienen a tocarle a uno a la puerta. 
3. El ejemplo de una abuela y una madre  —Nuestro segundo ejemplo, lo encontramos en el Nuevo Testamento, en la historia de un joven llamado Timoteo, y podemos aprender mucho de la forma en que este joven fue criado. (2 Tim. 1:5) «Traigo a la memoria tu fe sincera, la cual animó primero a tu abuela Loida y a tu madre Eunice, y ahora te anima a ti. De eso estoy convencido.»
a. Timoteo había recibido una enseñanza Judía piadosa en su casa, aunque era hijo de un gentil.
b. Más adelante en esta hermosa Epístola podemos leer más sobre la crianza de este joven (2 Timoteo 3:14-15).
i. «Pero tú, permanece firme en lo que has aprendido y de lo cual estás convencido, pues sabes de quiénes lo aprendiste.15 Desde tu niñez conoces las Sagradas Escrituras, que pueden darte la sabiduría necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús.»
ii. Noten que desde que era un niño, había recibido la instrucción Bíblica en su hogar. 
iii. Esto seguramente que por parte de su madre, pero también de su abuela Loida. 
c. Eso aunque Timoteo era hijo de un griego pagano, pero criado como un Judío piadoso. Por ser hijo de una mujer Judía, Timoteo era Judío según las creencias de ellos. Pero aunque fue criado por una Judía piadosa, parece ser que el padre gentil seguramente que no dejó que circuncidaran a Timoteo, porque en Hechos 16:3 encontramos que el apóstol Pablo tuvo que circuncidarlo por causa de los Judíos.
i. Quiere decir que esa madre piadoso, tuvo que enfrentar dificultades con un esposo pagano. Pero eso muestra que luchó en la crianza de su hizo, instruyéndole en las Sagradas Escrituras. 
ii. Cuando el Evangelio llegó a donde él estaba, Timoteo conocía las Escrituras, y pudo hacer una buena decisión. 
d. Estas mujeres criaron a un gran hombre y aun gran predicador. No quiere decir que Timoteo era un hombre con una personalidad imponente como hay muchos. Parece ser que Timoteo era tímido. Timoteo como todo el que es una gran persona, lo era porque vivió una vida obediente a la Palabra de Dios, que había aprendido desde la niñez.
4. El hijo de muchas lágrimas (la historia de Agustín de Hipona. —Siempre me gusta incluir esta historia en el día de las madres, porque creo que hay tantas madres que tienen un hijo(a) o tal vez varios, que están descarriados, o tal vez nunca han conocido a JESUCRISTO como Salvador.  
a. Hay muchas historias en la Biblia que nos deben impactar sobre el ejemplo de una madre, pero también lo hay en la historia de la Iglesia. Tal vez menos conocida. 
b. ¿Es usted una madre que tiene hijos descarriados o que nunca ha aceptado al Salvador?
c. El nombre de esta mujer era MÓNICA.
i. Mónica estaba casada con un hombre muy importante pero que no era Cristiano.
ii. Ella nunca se hubiera imaginado que la vida de su hijo iba a impactar a tantas personas por siglos.
d. Su hijo se llamaba AGUSTÍN, uno de los grandes teólogos de la historia de la Iglesia.
i. Agustín era dado a los vicios.
(1) Se juntaba con una mujer, la dejaba y se juntaba con otra.
e. Mónica iba todos los días a la Iglesia a orar por su hijo.
f. Agustín un día encontró al Salvador JESUCRISTO a la edad de 35 años de edad, y llegó a ser un gran teólogo que todavía impacta en estos días al estudiar uno el tema de la teología.
5. Una enseñanza a los hijos. (Efe. 6:1-3). — «Hijos, obedezcan en el Señor a sus padres, porque esto es justo.2 «Honra a tu padre y a tu madre —que es el primer mandamiento con promesa—3 para que te vaya bien y disfrutes de una larga vida en la tierra.»4 Y ustedes, padres, no hagan enojar a sus hijos, sino críenlos según la disciplina e instrucción del Señor.» 
a. Para concluir esta lección, debemos recordar que comenzamos hablando que los HIJOS SON LA HERENCIA DEL SEÑOR, ahora vamos a tratar el tema de la BENDICIÓN para los hijos en HONRAR A SUS PADRES. 
b. Este es el  Mandamiento con promesa, eso es alargarle la vida a los hijos(as) que honran a sus padres. 
c. Con esto debemos recordar que no se trata de que se honren a los padres en la niñez, o en la adolescencia, tiempo que se hace por obligación. 
d. Debemos recordar que de adulto es cuando más tenemos que honrar a nuestros padres. En tiempos donde en este país la gente quiere depender más y más del gobierno, muchos abandonan a sus padres sin preocuparse por ellos. Nosotros debemos recordar que el honrar a nuestros padres es necesario para el bienestar de la familia, y para el bienestar de la sociedad.
e. Las PROMESAS de Dios son real, y es evidente que el tener hijos(as) es la HERENCIA DEL SEÑOR, pero para los hijos(as), es una bendición con larga vida, el honrar a sus padres. 
CONCLUSIÓN.a

TITULO: Los hijos, una herencia de Dios

TEXTO:   Salmo 127:3

 «Los hijos son una herencia del Señor, 

      los frutos del vientre son una recompensa.»

INTRODUCCIÓN: La Biblia nos habla mucho sobre la maternidad y, sobre la educación de los hijos. Estamos viviendo en tiempos que las diferentes sociedades rechazan la procreación de los hijos(as), creyendo que el mundo está demasiado poblado, o por la crisis económica. Pero el Texto Sagrado nos dice lo opuesto, porque nos enseña que los hijos(as) son una recompensa. Estaremos hablando de algunos ejemplos de madres en el Texto Sagrado, que hicieron buenas y malas decisiones. Es así como comenzamos en esta noche nuestra lección.

 

Lección:

1. Dios, como el Fundamento del hogar. — (Salmo 127:1-5) «Si el Señor no edifica la casa, en vano se esfuerzan los albañiles. Si el Señor no cuida la ciudad, en vano hacen guardia los vigilantes. 2 En vano madrugan ustedes, y se acuestan muy tarde, para comer un pan de fatigas, porque Dios concede el sueño a sus amados. 3 Los hijos son una herencia del Señor,  los frutos del vientre son una recompensa. 4 Como flechas en las manos del guerrero  son los hijos de la juventud. 5 Dichosos los que llenan su aljaba con esta clase de flechas. No serán avergonzados por sus enemigos cuando litiguen con ellos en los tribunales.»

a. Este hermoso Salmo, pertenece al grupo de los Salmos graduales, que los Israelitas cantaban cuando subían a Jerusalén a adorar. Sin duda alguna, este Salmo 127 y el 128, son salmos de la vida piadosa en el hogar. Salmos que revelan que sin Dios el hogar no tiene BUEN FUNDAMENTO, y por eso necesita la ayuda de Dios todos los días. 

b. Pero hay algo muy significante en este Salmo y, es que nos muestra que no somos nosotros los que les damos a Dios nuestros hijos(as), sino que los hijos(as), son la HERENCIA DEL SEÑOR. 

i. En estos días donde muchos no quieren tener hijos(as), e incluso, es penado en algunas sociedades como China, que exigen que las familias tengan solamente un hijo(a), el Texto Sagrado nos recuerda que los hijos(as) son HERENCIA DEL SEÑOR, y son una bendición para toda madre y todo padre.  

2. El favoritismo de Rebeca. — El primer ejemplo de una madre que tenemos, es Rebeca, la esposa de Isaac. Esta mujer era estéril, y después de 20 años de casados, su esposo Isaac oró por ella y, ella quedó embarazada y dio a luz a dos hijos varones. 

a. Veamos lo que nos dice el Texto Sagrado en Génesis 25:20-26:

i. «Isaac tenía cuarenta años cuando se casó con Rebeca, que era hija de Betuel y hermana de Labán. Betuel y Labán eran arameos de Padán Aram.21 Isaac oró al Señor en favor de su esposa, porque era estéril. El Señor oyó su oración, y ella quedó embarazada.22 Pero como los niños luchaban dentro de su seno, ella se preguntó: «Si esto va a seguir así, ¿para qué sigo viviendo?» Entonces fue a consultar al Señor,23 y él le contestó:  «Dos naciones hay en tu seno;  dos pueblos se dividen desde tus entrañas. Uno será más fuerte que el otro,  y el mayor servirá al menor.» 24 Cuando le llegó el momento de dar a luz, resultó que en su seno había mellizos.25 El primero en nacer era pelirrojo, y tenía todo el cuerpo cubierto de vello. A éste lo llamaron Esaú. 26 Luego nació su hermano, agarrado con una mano del talón de Esaú. A éste lo llamaron Jacob. Cuando nacieron los mellizos, Isaac tenía sesenta años»

b. Debemos notar que esta era una pareja piadosa, e Isaac era el Patriarca que heredaba la promesa dada a Abraham por parte de Dios que le iba a dar una descendencia como la arena del mar, y por medio de él, esa descendencia seguía. Pero aun así, esta pareja cometió grandes errores en la crianza de sus hijos. Es aquí donde tenemos una gran lección que nos muestra el error que una madre o un padre pueden cometer, cuando prefieren a un hijo(a) por otro. 

i. (Versos 27-28) «Los niños crecieron. Esaú era un hombre de campo y se convirtió en un excelente cazador, mientras que Jacob era un hombre tranquilo que prefería quedarse en el campamento.28 Isaac quería más a Esaú, porque le gustaba comer de lo que él cazaba; pero Rebeca quería más a Jacob.»

c. En esta historia Rebeca que prefiere a su hijo menor (aunque eran mellizos), había ido a consultar a Dios cuando estaba embarazada y, los dos bebés peleaban en su vientre. Dios le dijo a ella que dos naciones estaban en su vientre, y que el menor serviría al mayor. Ella sabía que el menor era Jacob, el que había nacido agarrado del talón de su hermano Esaú. Rebeca en su preferencia hacia su hijo menor, hizo lo que las madres y padres no deben hacer y, es querer ayudar a Dios. Es muy claro que, Dios no necesita ayuda. 

i. Rebeca supo cuando Isaac que ya estaba ciego, le dijo a su hijo mayor Esaú que cazara un animal del campo y lo guisara, para así darle la bendición. De ahí que ella le dijo a Jacob que, suplantara a su hermano, poniéndoles pieles en los brazos, y haciendo un guisado, para que su padre lo bendijera a él, en vez de a Esaú el mayor. 

ii. Rebeca no solamente estaba engañando a su esposo, sino a Esaú, al hijo que le pertenecía la bendición.  Aquellos que conocen la historia, sabrán que Esaú le había vendido la primogenitura a su hermano Jacob mucho antes, cuando llegando cansado del campo, se encontró conque Jacob estaba haciendo lentejas, y veamos lo que el relato dice en Génesis 25:29-34:

(1) «Un día, cuando Jacob estaba preparando un guiso, Esaú llegó agotado del campo y le dijo: 30 —Dame de comer de ese guiso rojizo, porque estoy muy cansado. (Por eso a Esaú se le llamó Edom.) 31 —Véndeme primero tus derechos de hijo mayor —le respondió Jacob. 32 —Me estoy muriendo de hambre —contestó Esaú—, así que ¿de qué me sirven los derechos de primogénito? 33 —Véndeme entonces los derechos bajo juramento —insistió Jacob.  Esaú se lo juró, y fue así como le vendió a Jacob sus derechos de primogénito.34 Jacob, por su parte, le dio a Esaú pan y guiso de lentejas. Luego de comer y beber, Esaú se levantó y se fue. De esta manera menospreció sus derechos de hijo mayor.»

iii. Esto muestra que Esaú era un hombre profano, como nos dice el Texto Sagrado en Hebreos 12:16:

(1) «y de que nadie sea inmoral ni profano como Esaú, quien por un solo plato de comida vendió sus derechos de hijo mayor.»

iv. Pero eso no excusa lo que Rebeca hizo, y ella tuvo que pagar las consecuencias, así como también  nosotros tenemos que pagar las consecuencias por nuestras malas decisiones. Cuando Esaú se enteró de lo que su hermano hizo, se puso a planear quitarle la vida a Jacob su hermano.. Isaac y Rebeca tuvieron que enviar a su hijo a la tierra de los familiares de Rebeca, con su tío Labán, a unas 500 millas de distancia. 

v. Rebeca nunca más vio a su hijo Jacob mientras vivía, ni tampoco conoció a sus nietos. Por parte de su hijo Esaú, él se dio cuenta que sus padres no querían que ellos se casaran con mujeres del área, por ser impías, y por eso se casó con DOS mujeres cananeas, lo que hizo que Rebeca sufriera por eso grandemente.

d. Para concluir este punto, hay varias lecciones en este punto, y el primero es que NUNCA se debe preferir a un hijo(a) por otro. 

i. El segundo es que tarde o temprano, las CONSECUENCIAS por los errores vienen a tocarle a uno a la puerta. 

3. El ejemplo de una abuela y una madre  —Nuestro segundo ejemplo, lo encontramos en el Nuevo Testamento, en la historia de un joven llamado Timoteo, y podemos aprender mucho de la forma en que este joven fue criado. (2 Tim. 1:5) «Traigo a la memoria tu fe sincera, la cual animó primero a tu abuela Loida y a tu madre Eunice, y ahora te anima a ti. De eso estoy convencido.»

a. Timoteo había recibido una enseñanza Judía piadosa en su casa, aunque era hijo de un gentil.

b. Más adelante en esta hermosa Epístola podemos leer más sobre la crianza de este joven (2 Timoteo 3:14-15).

i. «Pero tú, permanece firme en lo que has aprendido y de lo cual estás convencido, pues sabes de quiénes lo aprendiste.15 Desde tu niñez conoces las Sagradas Escrituras, que pueden darte la sabiduría necesaria para la salvación mediante la fe en Cristo Jesús.»

ii. Noten que desde que era un niño, había recibido la instrucción Bíblica en su hogar. 

iii. Esto seguramente que por parte de su madre, pero también de su abuela Loida. 

c. Eso aunque Timoteo era hijo de un griego pagano, pero criado como un Judío piadoso. Por ser hijo de una mujer Judía, Timoteo era Judío según las creencias de ellos. Pero aunque fue criado por una Judía piadosa, parece ser que el padre gentil seguramente que no dejó que circuncidaran a Timoteo, porque en Hechos 16:3 encontramos que el apóstol Pablo tuvo que circuncidarlo por causa de los Judíos.

i. Quiere decir que esa madre piadosa, tuvo que enfrentar dificultades con un esposo pagano. Pero eso muestra que luchó en la crianza de su hizo, instruyéndole en las Sagradas Escrituras. 

ii. Cuando el Evangelio llegó a donde él estaba, Timoteo conocía las Escrituras, y pudo hacer una buena decisión. 

d. Estas mujeres criaron a un gran hombre y aun gran predicador. No quiere decir que Timoteo era un hombre con una personalidad imponente como hay muchos. Parece ser que Timoteo era tímido. Timoteo como todo el que es una gran persona, lo era porque vivió una vida obediente a la Palabra de Dios, que había aprendido desde la niñez.

4. El hijo de muchas lágrimas (la historia de Agustín de Hipona). —Siempre me gusta incluir esta historia en el día de las madres, porque creo que hay tantas madres que tienen un hijo(a) o tal vez varios, que están descarriados, o tal vez nunca han conocido a JESUCRISTO como Salvador.  

a. Hay muchas historias en la Biblia que nos deben impactar sobre el ejemplo de una madre, pero también lo hay en la historia de la Iglesia. Tal vez menos conocida. 

b. ¿Es usted una madre que tiene hijos descarriados o que nunca ha aceptado al Salvador?

c. El nombre de esta mujer era MÓNICA.

i. Mónica estaba casada con un hombre muy importante pero que no era Cristiano.

ii. Ella nunca se hubiera imaginado que la vida de su hijo iba a impactar a tantas personas por siglos.

d. Su hijo se llamaba AGUSTÍN, uno de los grandes teólogos de la historia de la Iglesia.

i. Agustín era dado a los vicios.

(1) Se juntaba con una mujer, la dejaba y se juntaba con otra.

e. Mónica iba todos los días a la Iglesia a orar por su hijo.

f. Agustín un día encontró al Salvador JESUCRISTO a la edad de 35 años de edad, y llegó a ser un gran teólogo que todavía impacta en estos días al estudiar uno el tema de la teología.

5. Una enseñanza a los hijos. (Efe. 6:1-3). — «Hijos, obedezcan en el Señor a sus padres, porque esto es justo.2 «Honra a tu padre y a tu madre —que es el primer mandamiento con promesa—3 para que te vaya bien y disfrutes de una larga vida en la tierra.»4 Y ustedes, padres, no hagan enojar a sus hijos, sino críenlos según la disciplina e instrucción del Señor.» 

a. Para concluir esta lección, debemos recordar que comenzamos hablando que los HIJOS SON LA HERENCIA DEL SEÑOR, ahora vamos a tratar el tema de la BENDICIÓN para los hijos en HONRAR A SUS PADRES. 

b. Este es el  Mandamiento con promesa, eso es alargarle la vida a los hijos(as) que honran a sus padres. 

c. Con esto debemos recordar que no se trata de que se honren a los padres en la niñez, o en la adolescencia, tiempo que se hace por obligación. 

d. Debemos recordar que de adulto es cuando más tenemos que honrar a nuestros padres. En tiempos donde en este país la gente quiere depender más y más del gobierno, muchos abandonan a sus padres sin preocuparse por ellos. Nosotros debemos recordar que el honrar a nuestros padres es necesario para el bienestar de la familia, y para el bienestar de la sociedad.

e. Las PROMESAS de Dios son real, y es evidente que el tener hijos(as) es la HERENCIA DEL SEÑOR, pero para los hijos(as), es una bendición con larga vida, el honrar a sus padres. 

CONCLUSIÓN.

Oremos.

*Toda referencia Bíblica es tomada de la Biblia, Nueva Versión Internacional.

**Este sermón fue predicado el 10 de Mayo, 2009.