La medida de todas las cosas

Entonces me fue dada una caña semejante a una vara de medir, y se me dijo: Levántate, y mide el templo de Dios, y el altar, y a los que adoran en él.  (Apocalipsis 11:1)    

  Introducción

Según Pitágoras con su visión humanista del mundo dice que el hombre es la medida de todas las cosas,  porque es el único animal que hace juicios a cerca de lo bueno lo malo, lo bonito, lo feo, lo justo e injusto etc. No comparto esta visión. El Creador del universo diseño y puso medidas a todas las cosas aún antes de que el hombre apareciera en el Edén. (Jeremías 10:23) Conozco, oh Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos.

Medir es establecer las dimensiones, magnitud tamaño o intensidad de algo o alguien con respecto a una unidad pre-establecida.

La necesidad de las medidas.  El hombre reconoce la necesidad de la métrica en todos los ámbitos de la vida, sin embargo, cuando se trata del ámbito espiritual fracasa diametralmente en reconocer esta necesidad. Las refacciones automotrices deben tener una precisión milimétrica, más aún micrométrica. Sin esta exactitud en las medidas los esfuerzos del mecánico para reparar nuestro auto serían por  lo general inútiles. Hace unos días compre un tapón para el fregadero de mi cocina y al probarlo grande fue mi frustración al ver que el tapón no retenía el agua del fregadero porque el diámetro del tapón era solamente un milímetro mas grande, lo cual le impedía tener el ajuste necesario para llegar hasta el fondo del orificio. Si yo le pregunto a usted,” hermano, ¿Cuánto mide de alto y largo la puerta del su recamara? Usted tal ves diga: 1.90 por .60 metros.” Pero otro tal ves diga:”1.85 m. por .65 m.”

La medición precisa acaba con toda ambigüedad. La forma mas sencilla de acabar con imprecisiones y dudas es midiendo la puerta con una cinta métrica. La Palabra de Nuestro Señor es el canon o regla que debe medir todas nuestras acciones y pensamientos. Cuando hablamos de medidas podemos referirnos a diversas clases de medición, a saber: Peso, Volumen, Longitud, Área y Tiempo..

En cuestiones espirituales es también indispensable establecer una medición exacta para de este modo acabar con las interpretaciones humanas. La ignorancia de contar con una medida espiritual (el canon de las Sagradas Escrituras) ha provocado la confusión y proliferación babilónica de diversos grupos religiosos.

El Creador es un Dios de medidas

Por toda la Palabra de Dios vemos que el Creador habla de las medidas del, arca de Noé, el tabernáculo, el templo, etc.

Hazte un arca de madera de gofer; harás aposentos en el arca, y la calafatearás con brea por dentro y por fuera. Y de esta manera la harás: de trescientos codos la longitud del arca, de cincuenta codos su anchura, y de treinta codos su altura. Una ventana harás al arca, y la acabarás a un codo de elevación por la parte de arriba; y pondrás la puerta del arca a su lado; y le harás piso bajo, segundo y tercero.(Génesis 6:14-16)

¿Por qué trescientos codos y no doscientos? El Creador sabía perfectamente la longitud necesaria para albergar a los animales y también sabía cuentos pisos se requerirían. Cuatrocientos codos serían demasiado peso para que el arca tuviera la estabilidad apropiada. Entonces vemos que Yahweh es un ser de medidas y pesos. Él fue quien precisó el tipo de madera del arca, esto nos muestra que él sabía perfectamente la densidad necesaria de los materiales para que el arca fuera perfecta para el propósito que se le daría.

Las medidas del Creador revelan la honestidad y veracidad de los individuos

Cuando era un niño me gustaba ir a comprar las tortillas porque era la oportunidad para probar un par de tortillas con una deliciosa salsa que se ponía al alcance de los clientes de forma gratuita. Sin embargo no deje de notar lo que algunos han dado en llamar los “kilos de novecientos gramos”. Ahora me explico:, cuando la bascula donde se pesaban las tortillas al llegar a los 900 gramos el que las pesaba golpeaba levemente las tortillas poniendo la ultima tortilla de este modo la bascula se elevaba artificialmente hasta alcanzar el kilo de tortillas, en este momento el vendedor toma con rapidez los 900 gramos tortillas y cobraba el kilo completo.

Veamos otro ejemplo de la vida real: En las gasolineras de mi localidad algunas ofrecen la prueba de la probeta que consiste en vaciar en una probeta de un litro la cantidad de un litro de gasolina a la vista del cliente puede está seguro de que se le dan litros de 1000 mililitros y no de menos.

Los ejemplos ante expuestos ponen de manifiesto la deshonestidad y falta de honradez de algunas personas. Por esta razón nuestro Hacedor dice:

El peso falso es abominación a Jehová; Mas la pesa cabal le agrada. (Proverbios 11:1)

Todos los caminos del hombre son limpios en su propia opinión; Pero Jehová pesa los espíritus. (Proverbios 16:2)

Las medidas también proveen de  conocimientos

Por la falta de conocimiento escritural muchos neófitos en la Biblia dicen que los patriarcas no vivían tanto como la Biblia dice. Según ellos los años registrados en el génesis eran mucho más pequeños. Pero nada podía estar más lejos de la verdad. El Génesis se nos dice que en el tiempo de Noé los meses eran meses lunares y que eran doce y por tanto equivalentes a los años actuales. Gracias a que nuestro Hacedor sabemos esto, porque Él lo registro en el Génesis.  

Algunos por su ignorancia escritural dicen que los gigantes tales como Goliat y algunos filisteos no eran realmente gigantes sino hombres muy altos tal como un jugador profesional de basquetbol. La Escritura es clara.

Salió entonces del campamento de los filisteos un paladín, el cual se llamaba Goliat, de Gat, y tenía de altura seis codos y un palmo. (1 Samuel 17:4)

Las medidas también nos ayudan a distribuir y equilibrar desavenencias.

El Altísimo mandó a su pueblo que tomara del pan  del cielo por medida un gomer por persona cada día. Esto nos revela que diariamente debemos de alimentarnos materialmente, semejantemente debemos alimentarnos diariamente. En el siguiente texto encontramos dos medidas: una de volúmenes, el gomer y otra de tiempo: cada día.

Esto es lo que Jehová ha mandado: Recoged de él cada uno según lo que pudiere comer; un gomer por cabeza, conforme al número de vuestras personas, tomaréis cada uno para los que están en su tienda. Y los hijos de Israel lo hicieron así; y recogieron unos más, otros menos; y lo medían por gomer, y no sobró al que había recogido mucho, ni faltó al que había recogido poco; cada uno recogió conforme a lo que había de comer. (Éxodo 16:16-18)

Las medidas también nos hablan de las limitaciones.

La palabra del Señor, es la medida que pone límites lo que hacemos o creemos. El Apóstol Pablo exhortó a los corintios a no ir más allá de la medida escritural.

Pero esto, hermanos, lo he presentado como ejemplo en mí y en Apolos por amor de vosotros, para que en nosotros aprendáis a no pensar más de lo que está escrito, no sea que por causa de uno, os envanezcáis unos contra otros.  (1 Corintios 4:6)

El área del terreno en que está asentada nuestra casa tiene linderos o limites esto nos ayuda a nuestra convivencia sana con nuestros vecinos, ellos no invaden nuestra propiedad ni nosotros traspasamos la de ellos. De manera semejante el Creador prefijó y delimitó la habitación de los diversos pueblos para que viviesen en armonía.

El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas, ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. Y de una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros. (Hechos 17:24-27)

El Creador también puso medidas y limites al mar.

y dije: “Hasta aquí llegarás, pero no más allá; aquí se detendrá el orgullo de tus olas”? Job 38:11

Las medidas del Creador nos ayudan en el ámbito doctrinal

Cuando el Señor desea que se observe una festividad Él proporciona la medida temporal. Por ejemplo el nos menciona el mes y el día. En un tiempo en que el mundo religioso inventa de su propio corazón celebraciones no escriturales es importante considerar que si el Señor quiere una festividad el mismo proveerá el tiempo y las sazones.

Y habló Moisés a los hijos de Israel para que celebrasen la pascua. Celebraron la pascua en el mes primero, a los catorce días del mes, entre las dos tardes, en el desierto de Sinaí; conforme a todas las cosas que mandó Jehová a Moisés, así hicieron los hijos de Israel. Números 9:4-5

Si el Altísimo es quién determina los tiempos y sazones de las celebraciones, ¿Cómo justificaremos calendarios religiosos que no aparecen en las Escrituras? Siendo nuestro Señor un Dios de precisiones porque no especifica celebraciones como semana santa, miércoles de ceniza etc. ¿????? ¿Será que en realidad muchas fechas del calendario religioso son de manufactura humana?

Cuando el Creador establece el calendario religioso de alguna festividad no hay lugar para los calendarios de invención humana.(miércoles de ceniza, Pascua florida, Navidad , etc.)

Entonces instituyó Jeroboam fiesta solemne en el mes octavo, a los quince días del mes, conforme a la fiesta solemne que se celebraba en Judá; y sacrificó sobre un altar. Así hizo en Bet-el, ofreciendo sacrificios a los becerros que había hecho. Ordenó también en Bet-el sacerdotes para los lugares altos que él había fabricado.

Sacrificó, pues, sobre el altar que él había hecho en Bet-el, a los quince días del mes octavo, el mes que él había inventado de su propio corazón;e hizo fiesta a los hijos de Israel, y subió al altar para quemar incienso. 1 Reyes 12:32-33

Las medidas del Creador revelan la justicia de los individuos

Fuiste hallado falto

Y tú, su hijo Belsasar, no has humillado tu corazón, sabiendo todo esto; sino que contra el Señor del cielo te has ensoberbecido, e hiciste traer delante de ti los vasos de su casa, y tú y tus grandes, tus mujeres y tus concubinas, bebisteis vino en ellos; además de esto, diste alabanza a dioses de plata y oro, de bronce, de hierro, de madera y de piedra, que ni ven, ni oyen, ni saben; y al Dios en cuya mano está tu vida, y cuyos son todos tus caminos, nunca honraste. Entonces de su presencia fue enviada la mano que trazó esta escritura. Y la escritura que trazó es: MENE, MENE, TEKEL, UPARSIN. Esta es la interpretación del asunto: MENE: Contó Dios tu reino, y le ha puesto fin. TEKEL: Pesado has sido en balanza, y fuiste hallado falto. PERES: Tu reino ha sido roto, y dado a los medos y a los persas. Entonces mandó Belsasar vestir a Daniel de púrpura, y poner en su cuello un collar de oro, y proclamar que él era el tercer señor del reino. La misma noche fue muerto Belsasar rey de los caldeos.  (Daniel 5:22-30)

¿Qué sería de nosotros si nuestro Hacedor no fuera un Dios de medidas exactas precisas y oportunas?

Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. Hebreos 4:16

Jehová es un Dios exacto el no actúa ni antes ni después sino en el momento preciso , en el momento exacto.

Dijo luego Jehová a Noé: Entra tú y toda tu casa en el arca; porque a ti he visto justo delante de mí en esta generación. De todo animal limpio tomarás siete parejas, macho y su hembra; mas de los animales que no son limpios, una pareja, el macho y su hembra.  También de las aves de los cielos, siete parejas, macho y hembra, para conservar viva la especie sobre la faz de la tierra. Porque pasados aún siete días, yo haré llover sobre la tierra cuarenta días y cuarenta noches; y raeré de sobre la faz de la tierra a todo ser viviente que hice. Génesis 7:1-4

Si el Omnipotente fuera tan inexacto e impuntual como somos los humanos los 600 carros de faraón hubieran dado alcance a los israelitas, pero el no actuó ni un minuto antes ni un minuto después. Fue lo suficientemente exacto al abrió el mar Rojo para que pasara el pueblo de Israel cuando parecía que todo estaba perdido.

Conclusión

Hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo.  (Efesios 4:13)

El hombre acostumbra medir a los demás tomando medidas humanas que son inexactas y ambiguas.

Porque no nos atrevemos a contarnos ni a compararnos con algunos que se alaban a sí mismos; pero ellos, midiéndose a sí mismos por sí mismos, y comparándose consigo mismos, no son juiciosos. Pero nosotros no nos gloriaremos desmedidamente, sino conforme a la regla que Dios nos ha dado por medida, para llegar también hasta vosotros.  (2 Corintios 10:12-13)

Sin embargo, la medida que es precisa para todo lo que hagamos es la medida de Yahweh. Tener la medida del Señor nos ayudara a comprender las dimensiones más importantes que el hombre tendrá que tomar en la vida  

Para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor, seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, Efesios 3:17-18

a)  Cómo se supone que debemos orar, qué se supone debemos hacer, cómo podemos resolver el problema, y, lo más importante, cómo nos ayuda este problema a crecer.

2.  El tipo de sabiduría del que estamos hablando no es solamente conocer la Biblia. Conocer la Biblia hará que una persona esté informada, más no necesariamente sabia.

a)  Sin embargo, si una persona sabe cómo usar la Biblia para entender la vida y para guiar su conducta y la conducta de otros en el laberinto de los problemas de la vida, entonces, el conocimiento se ha convertido en sabiduría.

3.   ¿Por qué desea Dios que pidamos esta clase de sabiduría? Porque en nuestra comprensión cristiana de la oración, esta implica confesar nuestras insuficiencias morales y nuestra aspiración a ser más semejantes a Cristo.

a)  Cuando el cristiano se enfrenta a la presión de grupos para hacer lo malo (tomar bebidas alcohólicas, usar drogas, tener relaciones sexuales ilícitas, etc.), o se enfrenta con problemas familiares o la muerte de un ser querido, en lugar de confiar en su propia fuerza le pide ayuda a Dios.

b)  Su oración puede decir: «¡Dios, no puedo con esto! Pero con tu ayuda lo podré superar y así ser una mejor persona». Tal oración concuerda con el carácter de la vida cristiana que confía en la fuerza de Dios y no en la nuestra.

La ansiedad frente a la oración

Una madre agobiada estaba orando con su hija al final del día.

Cuando hubieron terminado, la madre se levantó y reanudó de inmediato una actitud de ansiedad y preocupación. La niña miró su rostro preocupado.

«Por qué, mamá», dijo, «¡acabas de orar!».

«Sí, lo sé», respondió la madre. Su pequeña hija simplemente respondió:

«Creo que cualquiera podría preocuparse u orar, pero no hacer las dos cosas».

Conclusión:

Hasta que aprendamos a orar, nos privaremos de muchas bendiciones que podríamos tener y usar para la gloria de Dios y para nuestro propio crecimiento espiritual.                   

Fuente: www.centraldesermones.com