Por: pastor Daniel Brito
Título: El Buen Pastor
Texto: Salmo 23:1-6
«El Señor es mi pastor, nada me falta; 2 en verdes pastos me hace descansar. Junto a tranquilas aguas me conduce; 3 me infunde nuevas fuerzas. Me guía por sendas de justicia por amor a su nombre.
4 Aun si voy por valles tenebrosos, no temo peligro alguno porque tú estás a mi lado; tu vara de pastor me reconforta. 5 Dispones ante mí un banquete en presencia de mis enemigos. Has ungido con perfume mi cabeza; has llenado mi copa a rebosar.
6 La bondad y el amor me seguirán todos los días de mi vida; y en la casa del Señor habitaré para siempre.»*
Introducción:
En esta noche estaremos hablando de uno de los Salmos más hermosos de las Sagradas Escrituras, y el que tal vez es más leído por los Cristianos. Lo leemos cuando visitamos a los enfermos en el hospital, o cuando alguien pierde un familiar.
Este año comienza con mucha inseguridad para esta nación, y para todo el mundo, porque la economía mundial se está tambaleando. Se oye de tantas personas que están perdiendo sus empleos, y eso produce inseguridad en todos. Pero nosotros tenemos Promesa de Provisión por parte de nuestro SEÑOR, quien nos llama a CONFIAR nuestras vidas a Él.Trataremos los siguientes puntos:
(1) Una Confesión Necesaria.
(2) Una Confesión de Confianza.
(3) Una Confesión de Cuidado.
(4) Una Confesión de Protección.
(5) Más que suficiente.
(6) Una Promesa de Vida Eterna.
Lección:
1. Una Confesión Necesaria. – Debemos notar algo importante sobre el autor de este Salmo, y es que él había experimentado a nuestro SEÑOR como su Pastor. Nadie puede llamar a Dios su PASTOR, sin antes creerlo de TODO corazón. Veamos algunas cosas sobre esto.
a. JESUCRISTO no es solamente el Pastor del Rebaño, Él es la Puerta. Juan 10:7 dice:
i. «Por eso volvió a decirles: «Ciertamente les aseguro que yo soy la puerta de las ovejas.»
ii. Eso quiere decir que la entrada al Rebaño, es solamente por medio de JESUCRISTO. Efesios 2:18 refiriéndose a JESUCRISTO dice:
(1) «Pues por medio de él tenemos acceso al Padre por un mismo Espíritu.»
iii. Aunque otras religiones y sectas dicen diferente, el mismo JESUCRISTO enfatiza que no hay otra forma, u otra persona, o nombre, por el cual se pueda entrar en el Rebaño de nuestro SEÑOR.
b. Como el Buen Pastor, JESUCRISTO ha dado Su Vida por los pecadores. Juan 10:11 dice:
i. «Yo soy el buen pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas.»
c. Eso quiere decir que así como el Salmista tenía confianza en nuestro SEÑOR como su Pastor, así también nosotros debemos de poner TODA nuestra confianza en el que Pastorea nuestras almas.
2. Una Confesión de Confianza. – Pasando a este segundo punto, notemos la confianza que el Salmista tiene del cuidado diario de la vida por Parte del Buen Pastor «en verdes pastos me hace descansar. Junto a tranquilas aguas me conduce». Un pastor de ovejas tenía que cerciorarse que sus ovejas tuvieran de comer. Antiguamente el pastor iba adelante, y las ovejas lo seguían. Muchos pastores de ovejas usaban (o usan) un perro que los ayuda a mantenerlas en el camino siguiendo a su pastor. Notemos algunas cosas sobre esto.
a. Es una confesión de confianza, habiendo experimentado el sustento mismo del SEÑOR como una oveja del Rebaño de nuestro SEÑOR.
b. Algunos quieren recibir bendiciones por parte de Dios, pero nunca quieren entregarle sus vidas al Buen Pastor JESUCRISTO.
c. El Salmista dice: «El Señor es mi pastor, nada me falta.» Noten que no dice: nada de lo que yo deseo me falta, o las riquezas no me faltan. Más bien dice: “Nada me falta”. Eso es las cosas necesarias, o lo esencial para esta vida.
i. El Buen Pastor alimenta y sustenta a sus ovejas con las cosas necesarias, no con las que son innecesarias.
d. ¿Puede alguien confiar en Dios mientras confíe en sí mismo? La respuesta es un NO. Para una persona poder poner TODA su confianza en Dios, necesita dejar de confiar en sí mismo. El confiar en uno mismo, lo hace a uno desconfiar en el Verdadero Proveedor y Pastor de nuestras vidas.
3. Una Confesión de Cuidado. – (Verso 3) «me infunde nuevas fuerzas. Me guía por sendas de justicia por amor a su nombre.»
a. En esta primera parte de este verso, nos dice como el SEÑOR infunde nuevas fuerzas al creyente que es agobiado por las pruebas, y las tentaciones, pero recibe la ayuda Divina necesaria para seguir adelante. La Biblia de las Américas dice: “El restaura mi alma”. La Reina Valera 1960 dice: “Confortará mi alma”.
i. «Cuando el alma está afligida, Él la restaura; cuando peca, la santifica; cuando es débil, la corrobora. El lo hace.»[1]
b. Esto nos recuerda las Palabras de nuestro SEÑOR JESUCRISTO en Juan 16:13:
i. «Pero cuando venga el Espíritu de la verdad, él los guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propia cuenta sino que dirá sólo lo que oiga y les anunciará las cosas por venir.»
ii. El camino correcto puede que no sea el más fácil, pero es el nos lleva por esa senda de la Verdad, y que conduce a la Vida Eterna.
c. Para uno poder ser guiado por El Espíritu Santo, hay que entregarle TODO a nuestro SEÑOR.
i. Por eso hay muchos que no andan por el camino correcto, por querer hacer su propia voluntad.
ii. Por eso debemos recordar la oración modelo que nuestro SEÑOR nos enseñó y dice: «venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.» (Mateo 6:10).
iii. Debemos desear que El Espíritu Santo en Su Soberanía, nos guíe a TODA Verdad.
4. Una Confesión de Protección. – (Verso 4) «Aun si voy por valles tenebrosos, no temo peligro alguno porque tú estás a mi lado; tu vara de pastor me reconforta.» Un pastor de ovejas usaba una vara para guiar y proteger a sus ovejas. Algunas personas se refieren a ciertos animales como inteligentes, pero los animales se guían por instinto, y no pueden razonar, así que lo de “inteligentes”, es algo subjetivo. Pero estamos de acuerdo que hay animales que parecen demostrar cierta inteligencia, aunque claramente que no pueden razonar. En el caso de las ovejas, son tontas, y necesitan la ayuda y protección de su pastor. Veamos algunas cosas.
a. Eso se puede comparar a nosotros como Iglesia de JESUCRISTO, que somos OVEJAS de Su Rebaño.
i. Pero el ser humano tantas veces quiere hacer lo que quiere, escogiendo irse por otro lado que no debe. De ahí que necesitamos que nuestro PASTOR JESUCRISTO use Su Vara para corregirnos y guiarnos a TODA verdad.
b. Es en medio del peligro que uno puede ver, o que tal vez uno no se ha dado cuenta todavía, donde encontramos la PROTECCIÓN de Dios hacia nuestras vidas.
c. En el libro de Isaías encontramos promesa del Buen Pastor hacia Israel de Protección en medio de los peligros.
i. «Cuando cruces las aguas, yo estaré contigo; cuando cruces los ríos, no te cubrirán sus aguas; cuando camines por el fuego, no te quemarás ni te abrasarán las llamas.» (Isaías 43:2).
5. Más que suficiente. – (Verso 5) «Dispones ante mí un banquete en presencia de mis enemigos. Has ungido con perfume mi cabeza; has llenado mi copa a rebosar.»
a. Aquí una vez más El SEÑOR nos asegura de Su provisión para nuestra alma, y para nuestra vida cotidiana. El SEÑOR nos da suficiente para poder compartir con otros.
b. Pero también recordamos la bendición de esa llenura que tanto necesitamos, y es el Ser llenos del Espíritu Santo.
i. «En el último día, el más solemne de la fiesta, Jesús se puso de pie y exclamó: -¡Si alguno tiene sed, que venga a mí y beba!38 De aquel que cree en mí, como dice la Escritura, brotarán ríos de agua viva.» (Juan 7:37-38).
6. Una Promesa de Vida Eterna. – (Verso 6) «La bondad y el amor me seguirán todos los días de mi vida; y en la casa del Señor habitaré para siempre» Este hermoso Salmo concluye con lo mejor, y es con lo que nos espera a todos, y es enfrentar algún día la eternidad. He ahí la diferencia entre el que no tiene esperanza, o tal vez no está seguro(a) de lo que le espera.
a. El Buen Pastor lo es para nuestras vidas aquí en la tierra, pero lo es aun más en las Moradas Celestiales que nuestro Salvador nos prometió.
i. «No se angustien. Confíen en Dios, y confíen también en mí. 2 En el hogar de mi Padre hay muchas viviendas; si no fuera así, ya se lo habría dicho a ustedes. Voy a prepararles un lugar.3 Y si me voy y se lo preparo, vendré para llevármelos conmigo. Así ustedes estarán donde yo esté.» (Juan 14:1-3).
ii. «De hecho, sabemos que si esta tienda de campaña en que vivimos se deshace, tenemos de Dios un edificio, una casa eterna en el cielo, no construida por manos humanas.2 Mientras tanto suspiramos, anhelando ser revestidos de nuestra morada celestial,3 porque cuando seamos revestidos, no se nos hallará desnudos.4 Realmente, vivimos en esta tienda de campaña, suspirando y agobiados, pues no deseamos ser desvestidos sino revestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida.5 Es Dios quien nos ha hecho para este fin y nos ha dado su Espíritu como garantía de sus promesas.» (2 Corintios 5:1-5).
b. Noten con que seguridad el apóstol Pablo habla sobre el cuerpo espiritual que todos tendremos cuando entremos en las Moradas Celestiales. Es la misma confianza que nos dice nuestro Texto del Salmo 23:6: «y en la casa del Señor habitaré para siempre»
i. ¿Cómo un creyente puede estar seguro de la vida eterna?
ii. A eso regresamos al principio de esta lección, y es que nadie puede decir el SEÑOR ES MI PASTOR, sin antes haberle entregado su vida a JESUCRISTO. Es en el momento de la entrega, que con toda seguridad, podemos decir: el SEÑOR ES MI PASTOR Y NADA ME FALTA.
Conclusión:
Oremos.
*Toda referencia Bíblica es tomada de la Biblia, Nueva Versión Internacional.
Notas:
1. Charles Spurgeon, El Tesoro de David, Salmo 23.
**Este sermón fue predicado en Enero, 2009.