Cita Biblica:
“…Porque ¿Qué aprovechará el hombre si ganare todo el mundo y perdiera su alma? ¿O qué recompensa dará el hombre por su alma?.. Marcos 8:36
Mensaje Cristiano:
De nada sirve convencer a todo el mundo y ganarte su simpatía. De nada sirve tu vanagloria tanto moral como económica, porque estos tiempos son perecederos como el mundo, más nuestro espíritu vivirá una eternidad, solo tú eliges en qué camino andar. Si andar en el camino del Señor con vida eterna o andar en valle de muerte… ¡¡¡Pero que hermoso es andar confiado en el camino del Señor!!!
No podemos ganarnos la salvación por obras porque por más que nos esforcemos por ser grandes personas, muy buenos en verdad no ganamos la salvación de nuestra alma porque lo que hacemos es solo alimentar nuestra moral (moral armada por el hombre = imperfecta; por la cultura y por la crianza en una familia fuera de la voluntad de Dios).
Uno puede decirse a sí mismo gloriándose (o pero si yo soy muy buena persona, estudio, honro a mis padres, hago obras caridad, ayudó mi prójimo etc. etc. entre otras grandes cosas). Pero la verdad es que fuera de Dios nada podemos hacer, y el primer pecado que cometemos en este caso para perder el reino de Dios es creer que podemos ser buena gente sin tener a Cristo en nuestro corazón.
La palabra del Señor dice que Jesús dejó su espíritu que nos convencerá de toda verdad y justicia… Eso quiere decir que fuera de Él vivimos en la mentira del príncipe de este mundo porque él es padre de mentira y nos convence de que lo malo es bueno y que lo bueno es malo o innecesario, mostrándonos el placer solo momentáneo del mal. (Leer Juan 8:44). Pero deteniéndonos en el punto de que la mayoría de la gente cree que por que (es buena persona en el mundo y para el mundo) va a ir al cielo. Si una de esas personas eres tú, te are unas preguntas para que solo lo reflexiones contigo mismo.
1. ¿Nunca has mentido? Pues quien no ¿verdad?
2. ¿Nunca has robado aunque sea una vez? ¿Ni siquiera algo tan tonto como una fruta del supermercado? ¿Eso como se llama? Robar.
3. ¿Nunca cometisteis adulterio? Si es que no genial gloria a Dios que nunca engañaste a tu esposa pero… ¿Nunca miraste con ojos deseosos parte del cuerpo de una mujer hermosa que allá pasado por la calle alguna vez? Porque eso es cometer adulterio en el corazón.
Al leer esto ustedes solo por calmar su conciencia dirán: ¡bueno, no soy perfecto!!!
Tu bien has dicho… pero supongamos que ponemos un chip en tu cerebro, gravamos todos tus pensamientos y lo hacemos película para que lo vean las personas a las que tu le quieres hacer creer que eres buena persona. ¡¡¡Valla que te avergonzarías!!! Porque no importa lo mucho que te esfuerces porque si es esfuerzo de hombre seria solo para aparentar y en vano seria… pero Dios conoce tus pensamientos, lo que hay en tu corazón porque él es el que tiene el chip y te mira cada día, a cada hora y a cada minuto… y sabiendo que Dios tiene el chip donde guarda todos tus pensamientos, sabiendo que no eres perfectos y eres pecador ¿todavía crees que te irás al cielo? pues eso solo tú lo sabes, a mí solo me resta decirte que Jesús murió por ti y por mí en la cruz del calvario para que podamos por la gracia recibir el perdón de nuestros pecados y así concebir la salvación y solo así tener la vida eterna en el cielo.
Solo debemos arrepentirnos de todo corazón de nuestros pecados, renunciar a la vieja vida y comenzar a caminar por sus caminos. El Señor solo busca que le amemos como él nos ama, observa este gran acto de amor “Dios amó de tal manera al mundo que dio a su hijo primogénito para que todo aquel que en él crea, no se pierdan mas tengan vida eterna” Juan 3:16 ¿Tu estarías dispuesto a dar a tu hijo por amor a tu prójimo? y luego Jesucristo estuvo dispuesto a dar su vida por nosotros, para que recibamos la salvación, el Señor vino a buscar lo que se había perdido, por amor por misericordia Él te busca a todo momento… No te dejes engañar por lo que te puede ofrecer este mundo, porque todo lo que te puede ofrecer el mundo es perecedero mas lo que nos que nos ofrece el Señor es para siempre y se regocija de poder dártelo ¿sabes que en el cielo hacen fiesta cada vez que un pecador se arrepiente!!!
Si no recibiste a Cristo en tu corazón y quieres volverte de tus caminos repite esta pequeña oración; “Señor Jesus, te recibo en mi corazón como mi Señor y mi salvador, reconozco que soy pecador/a y te pido perdón por cada uno de ellos, me arrepiento todo corazón Señor, escribe mi nombre en el libro de la vida. Gracias Señor, en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amen.”
Otros Dos Diagnósticos Bíblicos Para El Problema Ahora, antes de avanzar hacia el remedio y ver cómo encontrar la renovación de mente que Dios demanda, consideremos otros dos diagnósticos bíblicos para el problema. Vea la forma en que Pedro describe el problema de nuestras mentes en 1ra de Pedro 1:13-14: “Por tanto, ceñid vuestro entendimiento para la acción […] no os conforméis a los deseos que antes teníais en vuestra ignorancia”. Hay una ignorancia acerca de Dios —una supresión voluntaria de la verdad de Dios (Romanos 1:18) — que nos hace esclavos de muchas pasiones y deseos, las que perderían su poder si conociéramos a Dios como debemos (cf. 1ra a los Tesalonicenses 4:5): “los deseos que antes teníais en vuestra ignorancia”. Pablo llama a estos deseos, “los deseos engañosos” (Efesios 4:22). Estos son deseos que arruinan la vida, destruyen la adoración, y obtienen su poder y vitalidad del engaño de nuestras mentes. Hay una clase de conocimiento de Dios —una renovación demente— que nos transforma por que nos libera del engaño y del poder de los deseos extraños.
El otro diagnostico bíblico está en Efesios 4:17-18: “ya no andéis así como andan también los gentiles, en la vanidad de su mente, 18 entenebrecidos en su entendimiento, excluidos de la vida de Dios por causa de la ignorancia que hay en ellos, por la dureza de su corazón”. Aquí Pablo nos lleva más profundo que Pedro. Él penetra por debajo de la “vanidad de la mente”, del “entenebre cimiento del entendimiento”, de la “ignorancia” voluntaria, y dice que todo tiene sus raíces en el “endurecimiento de sus corazones”. Aquí está la enfermedad más profunda, que infecta todo lo demás. Cuando suprimimos mentalmente la verdad libertadora, lo hacemos por la dureza de nuestro corazón. Nuestros duros corazones no se subyugarán a la supremacía de Cristo, y por tanto nuestras mentes ciegas no podrán ver la supremacía de Cristo (cf. Juan7:17).
El Espíritu Santo Renueva la Mente
Lo anteriormente expuesto nos trae finalmente al remedio, y nos muestra cómo podremos obedecer a Romanos 12:2: “transformaos mediante la renovación de vuestra mente”. Primero, antes de que podamos hacer algo, se requiere una doble acción del Espíritu. Y luego, nos unimos a él en esas dos. Digo que se requiere la acción del Espíritu Santo, porque esta palabra: “renovación”, en Romanos 12:2 es utilizada solo una vez en otro lugar, en toda la Biblia griega, específicamente en Tito 3:5 donde Pablo dice: “El nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino conforme a su misericordia, por medio del lavamiento de la regeneración y la renovación por el Espíritu Santo”. Ahí está la palabra “renovación” que ya hemos visto que es tan necesaria. Y es una renovación por el “Espíritu Santo”. El Espíritu renueva la mente. Esta renovaciones, primero que nada, y decisivamente, una obra del Espíritu Santo. Dependemos radicalmente de él. Nuestros esfuerzos siguen sus iniciativas es el Espíritu quien nos capacita.