Por: pastor Daniel Brito
TEXTO: Mateo 20:1-16
TITULO: La viña del SEÑOR
INTRODUCCIÓN: En esta mañana estaremos estudiando la Parábola de los Viña del SEÑOR. JESUCRISTO nos deja dos lecciones sobre aquellos que son salvo en Su Viña. Es así como comenzamos nuestra lección.
1. El Trasfondo. — Es necesario regresar a los últimos 3 versículos del capítulo 19, para poder entender mejor esta Parábola. «¡Mira, nosotros lo hemos dejado todo por seguirte! —le reclamó Pedro—. ¿Y qué ganamos con eso? 28 —Les aseguro —respondió Jesús— que en la renovación de todas las cosas, cuando el Hijo del hombre se siente en su trono glorioso, ustedes que me han seguido se sentarán también en doce tronos para gobernar a las doce tribus de Israel.29 Y todo el que por mi causa haya dejado casas, hermanos, hermanas, padre, madre, hijos o terrenos, recibirá cien veces más y heredará la vida eterna.30 Pero muchos de los primeros serán últimos, y muchos de los últimos serán primeros.»
a. Nuestro SEÑOR les dice que hay una recompensa en el Cielo para los que hayan tenido que dejar todas las cosas como ellos lo habían hecho, pero la recompensa para todos los FIELES a JESUCRISTO es la Vida Eterna. Diferencia en recompensas, pero UN solo regalo que es la Vida Eterna. Es así como nuestro SEÑOR comienza esta Parábola.
b. Noten como dice que los primeros serán últimos y últimos primeros, en respuesta a la pregunta de Pedro.
i. El SEÑOR se está refiriendo a las diferentes edades de una persona, cuando es llamada a SERVIR, o sea, cuando recibe el llamado de la salvación.
(1) Algunos lo reciben cuando joven, pero otros lo reciben cuando ancianos.
(2) Algunos son como el criminal penitente en la cruz al lado de JESÚS, que entró en el Reino en la hora undécima de su vida, pero recibió el mismo regalo que es la vida eterna.
b. Noten el horario dado por nuestro SEÑOR en el que Él contrata a los labradores:
i. La hora de trabajar comienza a las 6:00 a.m
ii. Luego la hora tercera que son las 9:00 a.m
iii. Después la hora sexta o el mediodía.
iv. Y también a la hora novena que es la 3:00 p.m
v. Por último, sale a la hora undécima, que son las 5:00 p.m
c. El pago que recibirían era un denario, que usualmente equivalía al salario de un día para un hombre.
i. No vayan a caer en el error de pensar que uno puede ser salvo por obras, porque no es eso lo que esta Parábola quiere decir. Al contrario, muestra que el galardón es igual para todos, porque es por GRACIA.
ii. El pago del día de trabajo que es igual para todos, podemos decir que es la SALVACIÓN.
d. Es necesario entender que el Reino de los Cielos se rige por diferentes principios que los reinos de la tierra. En la tierra se espera un pago mejor para el que más trabaja, pero en el Reino de los Cielos es TODO por GRACIA, y por la GENEROSIDAD de nuestro SEÑOR.
2. ¿Para qué los contrata? Para trabajar en la Viña del SEÑOR. –– Como decía Matthew Henry,¹ La Viña de Dios es la Iglesia (Juan 15:1) «Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador.» Podemos decir que Él la plantó con Su Sangre en la cruz del Calvario (Juan 15:13).
a. En esta hermosa Parábola, tenemos un gran ejemplo del llamado a la salvación, que ocurre en diferentes etapas de nuestras vidas. Eso no quiere decir que uno no escuche, o que uno no conozca de Dios, quiere decir que uno sea llamado a la Salvación, porque si Dios no nos llama, nosotros no podemos venir a Él.
i. «Nadie puede venir a mí si no lo atrae el Padre que me envió, y yo lo resucitaré en el día final.» (Juan 6:44).
ii. Nadie puede salvarse por sí mismo, o venir a Dios por sí mismo, porque es DIOS quien nos LLAMA o nos ATRAE a Sí mismo.
b. Eso no quiere decir que los jóvenes, o personas de edad madura decidan esperar para convertirse cuando sean ancianos, porque hay un peligro muy grande en eso, y es que no sabemos lo que el futuro trae para nosotros.
i. «Así que somos embajadores de Cristo, como si Dios los exhortara a ustedes por medio de nosotros: «En nombre de Cristo les rogamos que se reconcilien con Dios.» (2 Corintios 5:20). Y también dice:
(1) «Nosotros, colaboradores de Dios, les rogamos que no reciban su gracia en vano.2 Porque él dice: «En el momento propicio te escuché, y en el día de salvación te ayudé.» Les digo que éste es el momento propicio de Dios; ¡hoy es el día de salvación!» (2 Corintios 6:1)
ii. Todo esto quiere decir que el no obedecer al llamado de Dios es peligroso, y, por eso dice el Texto que HOY es el día de salvación.
iii. La vida del creyente siempre es en el HOY, no esperando a otro día.
(1) «Como se acaba de decir: «Si ustedes oyen hoy su voz, no endurezcan el corazón como sucedió en la rebelión.» (Hebreos 3:15)
3. Llamados a Servir. — El llamado a la salvación no es un llamado a hacer nada, o un simple asentimiento de cabeza, o aún el levantar la mano para aceptar a JESÚS. El llamado a la SALVACIÓN es un llamado a servir. ¿A servir a quien? A servir a DIOS.
a. Noten como en otras ocasiones he hablado del apóstol Pablo que en algunas de sus Epístolas, se llamaba a sí mismo, siervo de JESUCRISTO, o literalmente: esclavo, de JESUCRISTO.
i. «Pablo, siervo de Cristo Jesús, llamado a ser apóstol, apartado para anunciar el evangelio de Dios» (Romanos 1:1)
ii. El esclavo no tenía libertad de hacer lo que quisiera, porque pertenecía a su amo.
(1) De ahí que Pablo se llamaba a sí mismo ESCLAVO de JESUCRISTO.
b. En el caso de los creyentes, el SEÑOR nos deja el libre albedrío para hacer decisiones, pero la libertad del Cristiano está limitada, si verdaderamente es un Creyente Nacido de Nuevo. Porque el creyente se entrega del TODO a JESUCRISTO haciéndose un esclavo, o siervo de JESÚS, y dedicándose a hacer la voluntad de Dios TODO el tiempo.
c. Veamos la diferencia entre un ADORADOR y un SIERVO.
i. El adorador es un devoto de JESUCRISTO, y por eso lo adora. Cuando decimos que lo adora, lo hace con palabras, con cantos, con acciones, etc.
(1) Con esto quiere aclarar que no estoy de acuerdo con la nueva onda de cantantes que se están llamando a sí mismo “adoradores” en vez de “cantantes”. No se si piensan que solamente ellos son adoradores, y los que no cantamos no lo somos, pero eso es un error.
ii. Somos llamados a SERVIR, y el adorador, es uno que SIRVE, o sea, que es un siervo o esclavo.
d. Veamos también algunos ejemplos en la Biblia sobre el uso de SERVIR a Dios.
i. Comenzamos con el profeta Daniel, donde lo encontramos al principio de su relato a una edad temprana de tal vez unos 17 años de edad, y fue fiel a Dios hasta una edad avanzada de tal vez los 90 años de edad.
(1) «El rey dio entonces la orden, y Daniel fue arrojado al foso de los leones. Allí el rey animaba a Daniel: —¡Que tu Dios, a quien siempre sirves, se digne salvarte!» (Daniel 6:16)
(2) «Ya cerca, lleno de ansiedad gritó: —Daniel, siervo del Dios viviente, ¿pudo tu Dios, a quien siempre sirves, salvarte de los leones?» (Daniel 6:20)
ii. Seguimos con Josué.
(1) «Pero si a ustedes les parece mal servir al Señor, elijan ustedes mismos a quiénes van a servir: a los dioses que sirvieron sus antepasados al otro lado del río Éufrates, o a los dioses de los amorreos, en cuya tierra ustedes ahora habitan. Por mi parte, mi familia y yo serviremos al Señor.» (Josué 24:15)
iii. Continuamos ahora con Jehú cuando está por destruir a todos los adoradores de baal.
(1) «Cuando Jehú y Jonadab hijo de Recab entraron en el templo de Baal, Jehú les dijo a los congregados: «Asegúrense de que aquí entre ustedes no haya siervos del Señor, sino sólo de Baal.»24 Entonces pasaron para ofrecer sacrificios y holocaustos.» (2 Reyes 10:23)
iv. Seguimos con el apóstol Santiago o Jacobo, que aunque era hermano del SEÑOR por ser hijo de María, no usaba eso para ganancia propia, al contrario, se llama a sí mismo “esclavo de JESUCRISTO.”
(1) «Santiago, siervo de Dios y del Señor Jesucristo»
e. Cada uno de estos ejemplos nos muestran personas en el Antiguo y el Nuevo Testamento, que eran entregados a Dios, y lo servían en toda área de su vida. Con esto podemos ver que el Siervo, es también un adorador.
4. Entrando a cuentas con los obreros. — Noten que a lo último del relato en Mateo 20, encontramos que el SEÑOR de la Viña, ordena a su capataz a que les pague a los obreros, haciendo las cosas al revés, al comenzar pagándole a los últimos primero, y luego a los primeros obreros que habían soportado el calor del día, y muchas más horas de trabajo.
a. Noten ahora las palabras del SEÑOR de la Viña a los que murmuran:
i. «Pero él le contestó a uno de ellos: “Amigo, no estoy cometiendo ninguna injusticia contigo. ¿Acaso no aceptaste trabajar por esa paga?14 Tómala y vete. Quiero darle al último obrero contratado lo mismo que te di a ti.15 ¿Es que no tengo derecho a hacer lo que quiera con mi dinero? ¿O te da envidia de que yo sea generoso?” 16 »Así que los últimos serán primeros, y los primeros, últimos.» (Mateo 20:13-16)
b. En primer lugar, en el Cielo no habrán quejas de nadie. El SEÑOR está usando un ejemplo sobre algo que sería muy normal en cualquier sitio de trabajo, y es que nadie piensa que le van a pagar igual a uno que trabaja 12 horas que al que trabaja una sola hora. Puede que gane lo mismo por hora, pero el que ha trabajado 12 horas, esperaría ganar 12 veces más en ese día que el que trabajó una sola hora.
c. En segundo lugar, el SEÑOR les dice que son envidioso, y he ahí otra lección para nosotros, porque la envidia es muy dañina.
i. La envidia desea lo que el prójimo tiene.
ii. La envidia quiere negarle al prójimo.
iii. Los envidiosos desean que el que tiene algo, lo pierda.
d. Pero la Palabra de Dios nos amonesta a dejar la envidia a un lado, y entregarnos a Su Palabra, para crecer en la salvación.
i. «Por lo tanto, abandonando toda maldad y todo engaño, hipocresía, envidias y toda calumnia,2 deseen con ansias la leche pura de la palabra, como niños recién nacidos. Así, por medio de ella, crecerán en su salvación,3 ahora que han probado lo bueno que es el Señor.» (1 Pedro 2:1-3)
5. Para concluir. — Notemos como el SEÑOR de la Viña termina también diciendo que los primeros serán últimos, y viceversa. Como dice Bonnet:² “Los que, por el contrario, han comprendido que todo es gracia en el reino de Dios, el llamamiento, el trabajo, la recompensa, y simplemente han confiado en la palabra del amo, pueden ser los primeros, aunque hayan sido los últimos en el trabajo.”
a. El llamado a la salvación es por la Gracia infinita de nuestro SEÑOR JESUCRISTO que en este día te está hablando y llamando a SERVIRLO.
Conclusión:
Oremos.
Notas:
1. Francisco Lacueva, Comentario Bíblico de Matthew Henry, p. 1159, editorial CLIE.
2. L. Bonnet, Comentario del Nuevo Testamento, tomo 1, p. 233, Casa Bautista de Publicaciones.
*Toda referencia Bíblica es tomada de la Biblia, Nueva Versión Internacional.
**Este Sermón fue predicado el 5 de Octubre, 2008.