El Hijo del Hombre es entregado

Por: pastor Daniel Brito

Título: El Hijo del Hombre es entregado

Texto: Mateo 26:1-2:

«1 Después de exponer todas estas cosas, Jesús les dijo a sus discípulos:

2“Como ya saben, faltan dos días para la Pascua, y el Hijo del hombre será entregado para que lo crucifiquen.”.»

-Nueva Versión Internacional

Introducción:

Con solamente cuatro semanas para la semana de la Pasión de nuestro SEÑOR, o Semana Santa como más se conoce, continuaremos con el tema del Sacrificio de nuestro SEÑOR en la cruz, tratando TRES eventos que ocurrieron dos días antes de la Pascua. Los eventos del texto que hemos leído en Mateo 26:2, están ocurriendo el día Miércoles de la Semana Santa, en un tiempo cuando Jerusalén estaba llena de Judíos que venían de todo el mundo conocido a celebrar la fiesta anual de la Pascua. Se estima que unos 250,000[1] corderos eran sacrificados durante esta fiesta. Es probable que la gente no tenía la menor idea que la verdadera Pascua iba a ser sacrificada. Trataremos algunos de los temas encontrados en esta narración de Mateo antes de la Crucifixión, continuando la semana que viene con el arresto y Crucifixión de JESÚS. Trataremos los siguientes TRES eventos:

(1)    El Anuncio.
(2)    Una Muestra de Amor.
(3)    ¿Por qué la traición?
(4)    Resumen.

Lección:

1.         El anuncio – El Texto dice que faltaban dos días para la Pascua y el Hijo del hombre será entregado. La muerte de JESÚS no fue una coincidencia, o una equivocación. JESUCRISTO se hizo hombre precisamente para morir en la cruz por nuestros pecados. La expresión muestra un lenguaje que revela la actitud voluntaria del Sacrificio.

a.         El Salvador sabe el día y la hora que va a ser sacrificado. Un simple hombre que escucha que lo van a ejecutar en dos días, y se encuentra libre, probablemente se daría a la fuga. JESÚS no había sido arrestado todavía, y aun podía cambiar de idea. Por lo menos es como piensa el hombre cuando ve el problema. Pero para JESÚS la cruz no era un problema; era su misión aquí en la tierra. En otros tiempos los Judíos quisieron arrestarlo y matarlo, pero no podían porque Su hora no había llegado. Juan 7:30 dice:   «Entonces quisieron arrestarlo, pero nadie le echó mano porque aún no había llegado su hora.»

b.         JESÚS anuncia su muerte dos días antes, ¿pero cuántos de veras le pusieron atención? Veamos lo que dice el siguiente punto.

2.         Una muestra de amor. – Mateo 26:4-13: «6Estando Jesús en Betania, en casa de Simón llamado el Leproso, 7 se acercó una mujer con un frasco de alabastro lleno de un perfume muy caro, y lo derramó sobre la cabeza de Jesús mientras él estaba sentado a la mesa. 8 Al ver esto, los discípulos se indignaron. –¿Para qué este desperdicio? –dijeron–. 9 Podía haberse vendido este perfume por mucho dinero para darlo a los pobres. 10 Consciente de ello, Jesús les dijo: –¿Por qué molestan a esta mujer? Ella ha hecho una obra hermosa conmigo. 11 A los pobres siempre los tendrán con ustedes, pero a mí no me van a tener siempre. 12 Al derramar ella este perfume sobre mi cuerpo, lo hizo a fin de prepararme para la sepultura. 13 Les aseguro que en cualquier parte del mundo donde se predique este evangelio, se contará también, en memoria de esta mujer, lo que ella hizo.»

a.         El apóstol Juan le añade a esta historia, aclarando que la mujer que unge a JESÚS, es la hermana de Marta y Lázaro.

b.         La mujer tomó lo más precioso que tenía, y se lo derramó a JESÚS en la cabeza.  Las mujeres judías, como las de hoy día, les encantaban los perfumes. Y era común que llevaran una frasqueta de alabastro con perfume como collar. Ese perfume era muy costoso, y parece ser que costaba el sueldo de un hombre de casi todo un año. Quiere decir que esta mujer tenía algo de mucho valor y decide que NO lo va a usar en ella misma, sino en el SEÑOR JESÚS.

i.          Noten que la mujer no le dio el perfume a JESÚS para que lo vendiera e hiciera lo que quisiera con el dinero.

ii.         La mujer unge a JESÚS echándole el perfume en la cabeza. Imagínese el olor que llenó toda la casa.

iii.        Era como que la mujer por un sentir Divino unge al Salvador en preparación para Su sepultura. Noten lo que dice el verso 12:

(1)        «Al derramar ella este perfume sobre mi cuerpo, lo hizo a fin de prepararme para la sepultura.»

c.         La envidia de los demás. – Es necesario recordar que JESÚS acaba de anunciar que le quedaban dos días para morir en la cruz. ¿Cómo es que se olvidan de todo eso, sabiendo que tienen al Hijo de Dios en medio de ellos, y se dejan llevar por la envidia?

i.          Cuantos no desperdician las cosas de Dios, poniendo atención a las cosas materiales.

ii.         Todos los discípulos se indignaron, pero el apóstol Juan menciona a Judas como el principal. Veamos lo que dice Juan 4-6:

(1)        «4Judas Iscariote, que era uno de sus discípulos y que más tarde lo traicionaría, objetó: 5–¿Por qué no se vendió este perfume, que vale muchísimo dinero, para dárselo a los pobres? 6 Dijo esto, no porque se interesara por los pobres sino porque era un ladrón y, como tenía a su cargo la bolsa del dinero, acostumbraba robarse lo que echaban en ella.» – NVI

iii.        Claramente que esto nos lleva al tema de Judas Iscariote en el siguiente punto.

3.         ¿Por qué la traición? – Este evento ocurre el día Jueves, o sea un día después del Texto de Mateo 26:2, y un día antes del día de la Pasión. – (Mateo 26:19-25) «19 Los discípulos hicieron entonces como Jesús les había mandado, y prepararon la Pascua. 20Al anochecer, Jesús estaba sentado a la mesa con los doce. 21 Mientras comían, les dijo: –Les aseguro que uno de ustedes me va a traicionar. 22Ellos se entristecieron mucho, y uno por uno comenzaron a preguntarle: –¿Acaso seré yo, Señor? 23 –El que mete la mano conmigo en el plato es el que me va a traicionar –respondió Jesús–. 24 A la verdad el Hijo del hombre se irá, tal como está escrito de él, pero ¡ay de aquel que lo traiciona! Más le valdría a ese hombre no haber nacido. 25 –¿Acaso seré yo, Rabí? –le dijo Judas, el que lo iba a traicionar. –Tú lo has dicho –le contestó Jesús.»

a.         Algo que lo hace a uno pensar es el por qué Judas, uno de los doce, uno de los que caminó con el Salvador, que oró por la gente, que vio tantos milagros, decide traicionar al Salvador. Muchos creen que Dios escogió a Judas Iscariote para traicionar a JESÚS, y que había sido destinado para el infierno. ¿Podrá ser cierto? Veamos los siguientes puntos:

i.          Toda persona tiene que hacer decisiones. Así como Dios le dijo a Adán que no comiera de “UN” árbol, así toda persona tiene que decidir por la Vida Eterna, o la condenación Eterna. Judas como cualquier otra persona escogió su propio camino.

ii.         Judas era ladrón. – Hemos leído que Judas era el que llevaba la bolsa de dinero. Parece ser que en las reuniones se recogía alguna ofrenda para el sostenimiento del Ministerio de JESÚS y Sus apóstoles. Judas se encargaba de robar una parte de lo que se recogía. Seguramente que Judas, como ladrón que era, sentía que la envidia lo devoraba cuando María unge a JESÚS con un perfume bien caro, porque él hubiera querido quedarse con una porción de la ganancia.

(1)        El hecho de que era ladrón nos enseña que Judas aunque caminaba con el Salvador, no se había entregado a Él.

(2)        Judas era como muchos que miran de afuera para adentro, pero no hacen la decisión para entrar.

(3)        Judas nunca experimentó la conversión.

b.         La historia de Judas Iscariote nos debe recordar tres cosas:

i.          Somos responsables por nuestras hechos, y decisiones.

ii.         Dios sabe todo lo que uno hace, dice o piensa. Judas le robaba a JESÚS y a los demás apóstoles, y tal vez pensaba que nadie se daba cuenta. Por eso le pregunta a JESÚS: ¿Acaso seré yo, Rabí?

iii.        Nosotros también debemos recordar que, aunque uno puede pensar que nadie se da cuenta, Dios sí puede ver todo lo que uno hace.

4.         Resumen.

a.         El Anuncio nos debe recordar que Dios siempre está anunciándose al pecador.

b.         Una Muestra de Amor por parte de María fue entregarle todo al Salvador.

c.         ¿Por qué la traición?  Nos recuerda que el ser humano hace sus propias decisiones.

Conclusión:

Oremos.

[1].William Barclay, Nuevo Testamento, p. 179, editorial CLIE.

*Este sermón fue predicado por primera vez en Marzo, 2007, y por segunda vez con algunos cambios, en Marzo,  2009