Por: pastor Daniel Brito
Titulo: El Nazareo: Consagrado para Dios
Texto: Números 6:1-8
«El Señor le ordenó a Moisés2 que les dijera a los israelitas: «Cuando un hombre o una mujer haga un voto especial, un voto que lo consagre al Señor como nazareo,3 deberá abstenerse de vino y de otras bebidas fermentadas. No beberá vinagre de vino ni de otra bebida fermentada; tampoco beberá jugo de uvas ni comerá uvas ni pasas.4 Mientras dure su voto de nazareo, no comerá ningún producto de la vid, desde la semilla hasta la cáscara.
5 »Mientras dure el tiempo de su consagración al Señor, es decir, mientras dure su voto de nazareo, tampoco se cortará el cabello, sino que se lo dejará crecer y se mantendrá *santo.
6 »Mientras dure el tiempo de su consagración al Señor, no podrá acercarse a ningún cadáver,7 ni siquiera en caso de que muera su padre, su madre, su hermano o su hermana. No deberá hacerse ritualmente *impuro a causa de ellos, porque lleva sobre la cabeza el símbolo de su consagración al Señor.8 Mientras dure el tiempo de su consagración al Señor, se mantendrá santo.»
Introducción:
En esta noche continuamos nuestro estudio del libro de Números, que el pastor John y un servidor, nos hemos turnado para enseñar todos los Jueves. En esta noche nos toca el capítulo seis, que trata sobre las reglas sobre el Nazareo, y en la última parte del capítulo, tenemos la bendición sacerdotal. Que Dios bendiga Su Palabra predicada en este noche.
1. El Nazareo. — Debemos aclarar que hay una diferencia entre Nazareno -que es alguien nacido en Nazaret, y llamado así, como nuestro SEÑOR JESUCRISTO, que aunque nació en Belén de Judea, era llamado Nazareno por haber sido criado en dicha ciudad. Y Nazareo, que es la persona que hace voto al SEÑOR como lo estaremos explicando.
a. «El nombre nazareo viene de la misma raíz que ‘separado’; era entonces uno separado de todo lo que podía contaminarle.»[1] El nazareo podía ser hombre o mujer, siempre y cuando pudiera hacerlo. Esto sería en cuanto al tiempo y las ocupaciones del hogar. Veamos algunas cosas.
i. Las personas que hacían un voto nazareo, lo hacían para consagrarse más a Dios, y abstenerse de ciertas cosas que contaminan al ser humano. Era un tiempo de servicio y dedicación a Dios. Aunque estaremos hablando más adelante de los que fueron consagrados como nazareos en su infancia, la mayoría de los que hacían el voto nazareo, lo hacían como un acto de devoción a Dios por un tiempo.
ii. El nazareo NO era un monje -antiguo testamentario, porque el nazareo no tenía que ser célibe; podía contraer matrimonio. Esos ejemplos los veremos más adelante.
b. El nazareo tenía que abstenerse de todo lo que estuviera relacionado con el fruto de la vid. No podía tomar vino, ni ninguna otra bebida fermentada. No podía tomar del vinagre que fuera del fruto de la vid, ni comer uvas o pasas. Ni siquiera las semillas o la cáscara de la uva, que viene siendo lo que menos apetece.
i. La prohibición puede ser una protesta en contra del estilo de vida de borracheras, decadencia, y degeneración moral.[2]
ii. Podemos ver como Dios preparó a este pueblo, para vivir en una cultura Cananita como un pueblo diferente (santo). La norma, no solamente en Canaán, pero en otros lugares también, era el tomar vino y comer uvas. Los Nazareos eran dedignados como pueblo especial, consagrados a Jehová solamente; no deberían conformarse con la norma del mundo.[3]
c. El nazareo tenía la misma norma de consagración al SEÑOR que el sumo sacerdote, porque no podía tocar ningún muerto, ni siquiera de un pariente cercano.
i. No podemos entender esto, pero puede ser que como la muerte es un enemigo de Dios, por esa razón el nazareo tenía que abstenerse de tocar un muerto. Veamos los versos 9-17:
(1) «Si de improviso alguien muere junto a él, la consagración de su cabeza quedará anulada; así que al cabo de siete días, en el día de su purificación, deberá rasurarse la cabeza.10 Al octavo día llevará dos palomas o dos tórtolas, y se las entregará al sacerdote a la entrada de la *Tienda de reunión.11 El sacerdote ofrecerá una de ellas como sacrificio *expiatorio, y la otra como *holocausto. Así el sacerdote hará expiación por el nazareo, ya que éste pecó al entrar en contacto con un cadáver. Ese mismo día el nazareo volverá a santificarse la cabeza,12 consagrando al Señor el tiempo de su nazareato y llevando un cordero de un año como sacrificio por la culpa. No se le tomará en cuenta el tiempo anterior, porque su consagración quedó anulada. 13 »Esta ley se aplicará al nazareo al cumplir su período de consagración. Será llevado a la entrada de la Tienda de reunión,14 y allí ofrecerá como holocausto al Señor un cordero de un año, sin defecto; como sacrificio expiatorio una oveja de un año, sin defecto; y como sacrificio de *comunión un carnero sin defecto.15 Ofrecerá además un canastillo de panes sin levadura, panes de flor de harina amasados con aceite, obleas sin levadura untadas con aceite, y también ofrendas de cereal y de libación. 16 »Entonces el sacerdote las presentará al Señor y ofrecerá el sacrificio expiatorio y el holocausto en favor del nazareo.17 Ofrecerá el carnero al Señor como sacrificio de comunión, junto con el canastillo de panes sin levadura. También presentará las ofrendas de cereal y de libación.»
d. El nazareo no podía cortarse el pelo, tenía que dejárselo crecer. Fuera hombre o mujer, el pelo del nazareo debía ir creciendo, dependiendo del tiempo que la persona hubiera hecho su voto. El pelo largo y tal vez un poco fuera de control, era una señal de su consagración a Dios por medio del voto nazareo. Veamos los versos 18-21:
i. «Luego, a la entrada de la Tienda de reunión, el nazareo se rapará la cabeza. Tomará el cabello que consagró, y lo echará al fuego que arde bajo el sacrificio de comunión. 19 Una vez que el nazareo se haya rapado la cabeza, el sacerdote tomará del canastillo un pan sin levadura y una oblea sin levadura, más la pierna cocida del carnero, y pondrá todo esto en manos del nazareo,20 después de lo cual mecerá todo esto ante el Señor como una ofrenda. Todo esto es santo y le pertenece al sacerdote, lo mismo que el pecho mecido y el muslo ofrecido como contribución. Finalizado este rito, el nazareo podrá beber vino. 21 »Esta ley se aplicará al nazareo que haga un voto. Ésta es la ofrenda que presentará al Señor por su nazareato, aparte de lo que pueda dar según sus recursos. Según la ley del nazareato, deberá cumplir el voto que hizo»
ii. Podemos notar que Dios designó los sacrificios relacionados con el nazareato para que estuvieran al alcance de los pobres. Eso es para que toda persona pudiera hacer el voto de nazareo.
iii. Después de terminar su tiempo determinado, el nazareo tendrá que raparse la cabeza, y tendrá que echarlo en el fuego que arde bajo el sacrificio de comunión. El pelo es simbólico de la vida dedicada a Dios, y aquí es ofrecida a Dios en el altar. Lo que fue dedicado a Dios, no se puede dejar que caiga en el mal uso, en el mundo humano.[4]
2. Ejemplos de Nazareos en la Biblia. — En el Antiguo Testamento tenemos por lo menos DOS ejemplos de personas que fueron nazareos de por vida. Ambos fueron consagrados por sus padres antes de nacer. Y en el Nuevo Testamento tenemos uno que parece que también fue consagrado nazareo de por vida antes de nacer.
a. Sansón. — Notemos que este relato comienza cuando la madre de Sansón salió embarazada, y el Ángel del SEÑOR, fue y le dio las instrucciones sobre como debería criar al niño. Notemos también que el Ángel del SEÑOR es una Teofanía, o sea, una manifestación de Dios en el Antiguo Testamento, apareciendo en forma de Ángel, y ese Ángel del SEÑOR no es otro que el mismo JESÚS, antes de Su Encarnación. Quiere decir que Sansón fue predestinado para la obra que Dios lo había escogido antes que naciera. Veamos Jueces 13:3-5:
i. «Pero el ángel del Señor se le apareció a ella y le dijo: «Eres estéril y no tienes hijos, pero vas a concebir y tendrás un hijo.4 Cuídate de no beber vino ni ninguna otra bebida fuerte, ni tampoco comas nada *impuro,5 porque concebirás y darás a luz un hijo. No pasará la navaja sobre su cabeza, porque el niño va a ser nazareo, consagrado a Dios desde antes de nacer. Él comenzará a librar a Israel del poder de los filisteos.»
ii. Pero Sansón siempre fue MUNDANO, y no fue muy obediente a su llamado y su voto de nazareo.
(1) En primer lugar, a Sansón le gustaba las mujeres filisteas, en nuestros días podríamos decir que le gustaba las mujeres del mundo.
(2) Sacó miel de un cadáver de un león muerto, y comió él, y les llevó a sus padres para que comieran sin decirles nada (Jueces 14:9-10).
(3) Fue a Gaza, la tierra de los filisteos, y se acostó con una prostituta.
(4) Por último tenemos la historia de Dalila, que rogándole hasta cansarlo, hizo que dijera todo su secreto sobre su fuerza. Es bien claro que estaba ligado al voto nazareo.
b. Samuel. — Este fue dedicado por su madre antes de nacer, en uno de los relatos Bíblicos más hermosos. El relato en realidad no dice que haya sido nazareo, pero sí dice que Ana su madre, lo entregó al SEÑOR mientras el niño viviera. Veamos 1 Samuel 1:21-22:
i. «Cuando Elcaná salió con toda su familia para cumplir su promesa y ofrecer su sacrificio anual al Señor, 22 Ana no lo acompañó. —No iré hasta que el niño sea destetado —le explicó a su esposo—. Entonces lo llevaré para dedicarlo al Señor, y allí se quedará el resto de su vida.» Y el verso 28 dice:
(1) «Ahora yo, por mi parte, se lo entrego al Señor. Mientras el niño viva, estará dedicado a él.» Entonces Elí se postró allí ante el Señor.»
c. Juan el Bautista. — Este último relato, es la hermosa historia del hombre que fue escogido por Dios para preparar el camino de nuestro SEÑOR JESUCRISTO. El relato no dice que sería nazareo, pero el ángel que le anuncia a Zacarías, el padre de Juan, le da las instrucciones sobre como el niño no bebería nunca vino ni ningún otro licor. Veamos Lucas 1:14-17:
i. «porque él será un gran hombre delante del Señor. Jamás tomará vino ni licor, y será lleno del Espíritu Santo aun desde su nacimiento.16 Hará que muchos israelitas se vuelvan al Señor su Dios.17 Él irá primero, delante del Señor, con el espíritu y el poder de Elías, para reconciliar a los padres con los hijos y guiar a los desobedientes a la sabiduría de los justos. De este modo preparará un pueblo bien dispuesto para recibir al Señor.»
3. Abstinencia de bebidas alcohólicas. — La Biblia no prohíbe el tomar vino, pero sí prohíbe el emborracharse. Estamos conscientes que en muchas culturas de América Latina como lo es en España, el uso del vino en la comida es muy común.
a. Para nosotros en los Estados Unidos, y en tantos otros países de América Latina, la cantidad excesiva de bebidas alcohólicas, y de personas que se emborrachan, ha creado un gran problema en nuestra cultura. Hogares destruidos, padres borrachos que golpean a sus esposas, tantas veces manejan sus carros ebrios, causando tantos accidentes y muertes inocentes. Por esa razón, nosotros pedimos a los hermanos que se ABSTENGAN de bebidas alcohólicas, que, aunque no sea pecado tomarlas, puede LLEVARNOS al pecado.
i. La Palabra de Dios dice claramente en 1 Corintios 6:9-10 dice:
(1) «¿No saben que los malvados no heredarán el reino de Dios? ¡No se dejen engañar! Ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los sodomitas, ni los pervertidos sexuales,10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los calumniadores, ni los estafadores heredarán el reino de Dios.»
b. En Efesios 5:18 tenemos un ejemplo de la diferencia tan grande que existe entre el tomar bebidas alcohólicas, y el buscar la llenura del Espíritu Santo.
i. «No se emborrachen con vino, que lleva al desenfreno. Al contrario, sean llenos del Espíritu.»
ii. Entiendo muy bien que dice “No se emborrachen con vino” y no solamente tomar. Pero a eso habría que averiguar bien cuando es que una persona se emborracha.
(1) En el estado de California, una persona es considerada legalmente “borracho”, si está manejando su carro con un nivel de alcohol en su cuerpo de 0.8, que según la policía, puede ser que la persona haya tomado una sola copa antes de manejar, porque no todos reaccionan igual. He ahí el peligro de conducir el carro después de una simple copa de vino.
4. La Bendición Sacerdotal. — (Números 6:22-27) «El Señor le ordenó a Moisés:23 «Diles a Aarón y a sus hijos que impartan la bendición a los israelitas con estas palabras: 24 »”El Señor te bendiga y te guarde; 25 el Señor te mire con agrado y te extienda su amor; 26 el Señor te muestre su favor y te conceda la paz.” 27 »Así invocarán mi nombre sobre los israelitas, para que yo los bendiga.»
a. Para concluir este capítulo seis del libro de Números, tenemos la Bendición Sacerdotal. Esta bendición la encontramos en Levíticos 9:22.
b. Encuentros arqueológicos cerca de Jerusalén, confirman este relato. Dos cilindros de plata, con inscripciones de estas bendiciones, fueron descubiertos, y su fecha es de 600 años antes de JESUCRISTO.[5]
c. Noten que esta bendición lleva el nombre de Dios, porque SOLAMENTE Dios es el que puede bendecir. El sacerdocio era quien estaba entre el pueblo y Dios, y ellos BENDECÍAN al pueblo en NOMBRE DE JEHOVÁ.
d. Nosotros en estos días, somos un real sacerdocio, y TODOS, debemos seguir el ejemplo que, como pueblo de Dios, debemos desear la bendición de Dios a los demás creyentes. Por eso un DIOS TE BENDIGA, debe seguir a nuestra conversación cuando nos despedimos, o cuando nos encontramos con algún hermano/a en la fe.
5. Últimas Palabras. — Hay aquí algo para todos recordar, y es que en el Nuevo Testamento, TODOS somos separados para el SERVICIO DEL SEÑOR. Así que hay una buena comparación entre el nazareo del Antiguo Testamento, y el CREYENTE del Nuevo Testamento que es un TIPO del nazareo, por su CONSAGRACIÓN/SEPARACIÓN del mundo.
a. (Romanos 1:7) «Les escribo a todos ustedes, los amados de Dios que están en Roma, que han sido llamados a ser santos. Que Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo les concedan gracia y paz.»
b. Así como los romanos cristianos habían sido llamados a ser santos, así también nosotros hemos sido llamados a ser SANTOS. Eso es a ser SEPARADOS. Como los nazareos, eran separados.
Conclusión:
Oremos.
Notas:
[1]David Daniels, Comentario Bíblico Mundo Hispano, tomo 3, p. 177, editorial Mundo Hispano.
[2]W. E. Bellinger Jr., Leviticus, Numbers, p. 200, Hendrickson Publishers.
[3]Timothy R. Ashley, The New International Commentary of the Old Testament, p. 142, Eerdmans Publishers.
[4]W. E. Bellinger Jr., p. 201.
[5]Ibid., p. 202.
*Toda referencia Bíblica es tomada de la Biblia, Nueva Versión Internacional.
**Este sermón fue predicado en Marzo, 2009.