En el Nuevo Pacto, todos somos iguales

Por: pastor Daniel Brito

Título: En el Nuevo Pacto, todos somos iguales

Texto: Números 27:1-11

«Majlá, Noa, Joglá, Milca y Tirsá pertenecían a los clanes de Manasés hijo de José, pues eran hijas de Zelofejad hijo de Héfer, hijo de Galaad, hijo de Maquir, hijo de Manasés. Las cinco se acercaron2 a la entrada de la *Tienda de reunión, para hablar con Moisés y el sacerdote Eleazar, y con los jefes de toda la comunidad. Les dijeron:3 «Nuestro padre murió sin dejar hijos, pero no por haber participado en la rebelión de Coré contra el Señor. Murió en el desierto por su propio pecado.4 ¿Será borrado de su clan el *nombre de nuestro padre por el solo hecho de no haber dejado hijos varones? Nosotras somos sus hijas. ¡Danos una heredad entre los parientes de nuestro padre!»
5 Moisés le presentó al Señor el caso de ellas,6 y el Señor le respondió:7 «Lo que piden las hijas de Zelofejad es algo justo, así que debes darles una propiedad entre los parientes de su padre. Traspásales a ellas la heredad de su padre.
8 »Además, diles a los israelitas: “Cuando un hombre muera sin dejar hijos, su heredad será traspasada a su hija.9 Si no tiene hija, sus hermanos recibirán la herencia.10 Si no tiene hermanos, se entregará la herencia a los hermanos de su padre.11 Si su padre no tiene hermanos, se entregará la herencia al pariente más cercano de su clan, para que tome posesión de ella. Éste será el procedimiento legal que seguirán los israelitas, tal como yo se lo ordené a Moisés.” »

Introducción:
Seguimos con nuestro estudio del libro de Números. La semana pasada quedamos en este capítulo 27, en el cual vamos a dedicar todo el estudio de esta noche. Estaremos tratando varios temas encontrado en éste capítulo 27, que tienen varias aplicaciones para nosotros. El tema central, es que Dios quería que Israel que estaba a punto de entrar en la Tierra Prometida, supiera muy bien, que había sido llamado como Pueblo, a ser santo. Ese es un llamado a la PURIFICACIÓN y a la SEPARACIÓN.

Lección:

1.    La herencia de las hijas de Zelofejad. —Este relato basado en los versos que ya hemos leído, muestra la diferencia cultural que existía e aquellos tiempos. La mujer en realidad era vista como propiedad de su padre, y después de su esposo. Las mujeres que no tenían esposos, después de la muerte de sus padres, quedaban a la merced de algún hermano, tío, u otro pariente cercano. Veamos una aclaración dada por el comentarista David Daniels:

a.    “Un propósito del segundo censo era determinar el tamaño de la herencia asignada a cada tribu (26:54). Pero antes de entrar en la tierra, hay que aclarar un principio importante en cuanto a la herencia de cada familia. Generalmente la propiedad de un hombre se dividía entre sus hijos varones cuando éste moría. Así la tierra quedaba con la familia como una herencia perpetua. (Las hijas recibían una dote de su padre al casarse, y entonces pasaban a ser miembros de la familia de su esposo, compartiendo así su herencia.)”[1]

b.    Parece ser que Zelofejad no había tenido hermanos que se hubieran casado con su esposa, para dejarle un heredero, o puede ser que su esposa murió antes que él.

i.    Pero las hijas de Zelofejad, Majlá, Noa, Joglá, Milca y Tirsá, llegaron con confianza delante de Moisés, y el sumo sacerdote Eliazar, a la entrada del Tabernáculo.

ii.    Estas mujeres tenían FE, que Israel iba a conquistar la Tierra Prometida, y la tierra iba a ser dividida. Quiere decir que ellas CREYERON a DIOS, y a Sus Promesas.

iii.    Ellas también mencionan que su padre Zelofejad, no había estado en la rebelión de Coré. Tal vez ellas querían aclararlo para no ser descalificadas por esa razón. Pero Zelofejad fue murió por su rebeldía, como la primera generación rebelde que había salido de Egipto, y Dios los había castigado 40 años en el desierto, hasta que el último de esa generación muriera.

c.    Tristemente, todavía en el mundo hay muchos países musulmanes, donde la mujer no tiene derechos para nada. No puede salir a la calle sin estar acompañada de su padre, esposo o hermano.

i.    La voz de una mujer no tiene valor, porque toma a dos mujeres para ser igual a un hombre.

ii.    Una mujer que acusa a su esposo de adulterio, tiene que probarlo.

iii.    Un hombre que acusa a su esposa de adulterio, la esposa, tiene que probar su inocencia.

2.    En el Nuevo Pacto, TODOS somos iguales. —(Gálatas 3:26-29) «Todos ustedes son hijos de Dios mediante la *fe en Cristo Jesús,27 porque todos los que han sido bautizados en Cristo se han revestido de Cristo.28 Ya no hay judío ni *griego, esclavo ni libre, hombre ni mujer, sino que todos ustedes son uno solo en Cristo Jesús.29 Y si ustedes pertenecen a Cristo, son la descendencia de Abraham y herederos según la promesa.»

a.    Si uno sigue la lectura en el libro de los Hechos, podemos notar como Dios usó a tantas mujeres en la obra del SEÑOR. El hecho que las iglesias se reunieran en casas (porque no habían templos todavía), muestra que la división cultural había sido echada a un lado, para todos reunirse en los cultos celebrados en casas.

b.    En el Evangelio no hay acepción de personas. Todos somos iguales delante del SEÑOR, sin importar raza, o si uno es mujer u hombre. Toda persona tiene libre entrada al trono de la gracia por medio de nuestro SEÑOR JESUCRISTO.

i.    (Hebreos 4:16) «Así que acerquémonos confiadamente al trono de la gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos ayude en el momento que más la necesitemos.»

ii.    El único mediador entre el hombre y Dios, es: JESUCRISTO el Hijo de Dios, y el Hijo del hombre.

(1)    (1ª  Timoteo 2:5) «Porque hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre»

3.    Josué ungido sucesor de Moisés. —(Números 27:12-23) «El Señor le dijo a Moisés: —Sube al monte Abarín y contempla desde allí la tierra que les he dado a los israelitas.13 Después de que la hayas contemplado, partirás de este mundo para reunirte con tus antepasados, como tu hermano Aarón.14 En el desierto de Zin, cuando la comunidad se puso a reclamar, ustedes dos me desobedecieron, pues al sacar agua de la *roca no reconocieron ante el pueblo mi santidad. Esas aguas de Meribá están en Cades, en el desierto de Zin.
Moisés pide un líder para Israel15 Moisés le respondió al Señor: 16 —Dígnate, Señor, Dios de toda la *humanidad,[a]nombrar un jefe sobre esta comunidad,17 uno que los dirija en sus campañas, que los lleve a la guerra y los traiga de vuelta a casa. Así el pueblo del Señor no se quedará como rebaño sin pastor.
18 El Señor le dijo a Moisés: —Toma a Josué hijo de Nun, que es un hombre de gran espíritu.[b] Pon tus manos sobre él,19 y haz que se presente ante el sacerdote Eleazar y ante toda la comunidad. En presencia de ellos le entregarás el mando.20 Lo investirás con algunas de tus atribuciones, para que toda la comunidad israelita le obedezca.21 Se presentará ante el sacerdote Eleazar, quien mediante el *urim consultará al Señor. Cuando Josué ordene ir a la guerra, la comunidad entera saldrá con él, y cuando le ordene volver, volverá.
22 Moisés hizo lo que el Señor le ordenó. Tomó a Josué y lo puso delante del sacerdote Eleazar y de toda la comunidad.23 Luego le impuso las manos y le entregó el cargo, tal como el Señor lo había mandado.»

a.    Ahora Dios le da una orden a Moisés, de que era tiempo que él subiera al monte, para morirse. Al igual que Aarón, Moisés no iba a heredar la Tierra Prometida, pero Dios se la iba a mostrar de lejos. Estos eventos eran solamente para preparar al hombre que Dios había escogido, para que delante del pueblo, fuera ungido como el sucesor de Moisés. La muerte de Moisés la encontramos en Deuteronomio 34. Pero noten que Dios había tratado con Moisés cara a cara, como nos dice Deuteronomio 34:10:

i.    «Desde entonces no volvió a surgir en Israel otro profeta como Moisés, con quien el Señor tenía trato directo»

b.    Pero Josué para saber la voluntad de Dios para ciertas decisiones, tenía que consultar a Eliazar, el sumo sacerdote, por medio del “Urim”, JEHOVÁ.

i.    El Urim y el Tunim, eran parte de lo que el sumo sacerdote usaba para saber la Voluntad de Dios. Parece que eran piedras con alguna inscripción en ellas. Eran tiradas para saber la Voluntad de Dios. Si las dos caían de una forma, significaba una respuesta positiva, si las dos caían de otra forma, entonces significaba una respuesta negativa.

ii.    Con esto debemos aclarar que Israel había recibido la ley de Moisés, por la cual ellos iban a saber como Dios quería que ellos lo adoraran, y como comportarse con sus semejantes. Eso es la Voluntad de Dios para el diario vivir.

4.    Conociendo la Voluntad de Dios en el Nuevo Pacto. —(Romanos 12:1-2) «Por lo tanto, hermanos, tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que cada uno de ustedes, en adoración espiritual, ofrezca su cuerpo como sacrificio vivo, *santo y agradable a Dios.2 No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta.»

a.    Podemos ver que en el Nuevo Pacto, se conoce la Voluntad de Dios por medio de Su Espíritu Santo que guía por medio de Su Palabra.

i.    Noten que la renovación de nuestra mente, solamente se puede hacer a través de la Palabra de Dios, porque es la Palabra de Dios la que cambia nuestra forma de pensar.

ii.    La mente del ser humano que no ha sido regenerado, está acostumbrada a pensar en todo aquello que se opone a la voluntad de Dios.

iii.    Al venir a los Pies de JESUCRISTO, el creyente necesita ahora llenar su mente de la Palabra de Dios, para ACONDICIONAR, los pensamientos, para agradar a Dios.

b.    Veamos algunas cosas sobre la Voluntad de Dios:

i.    En primer lugar, en el Nuevo Pacto, TODO lo que hacemos, debe ser dirigido a que sea SU VOLUNTAD y no la nuestra. Empezamos con la oración de JESUCRISTO del Padre Nuestro.

(1)    (Mateo 6:9-10) «Ustedes deben orar así:  »”Padre nuestro que estás en el cielo, *santificado sea tu nombre, 10 venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.»

ii.    En segundo lugar, es la VOLUNTAD de Dios nuestra SANTIFICACIÓN, porque la voluntad de Dios es que se muestre en toda nuestra conducta.

(1)    (Colosenses 1:9-12) «Por eso, desde el día en que lo supimos no hemos dejado de orar por ustedes. Pedimos que Dios les haga conocer plenamente su voluntad con toda sabiduría y comprensión espiritual,10 para que vivan de manera digna del Señor, agradándole en todo. Esto implica dar fruto en toda buena obra, crecer en el conocimiento de Dios11 y ser fortalecidos en todo sentido con su glorioso poder. Así perseverarán con paciencia en toda situación,12 dando gracias con alegría al Padre. Él los ha facultado para participar de la herencia de los santos en el reino de la luz.»

(2)    (1 Tesalonicenses 4:3-9) «La voluntad de Dios es que sean *santificados; que se aparten de la inmoralidad sexual;4 que cada uno aprenda a controlar su propio cuerpo de una manera santa y honrosa,5 sin dejarse llevar por los malos deseos como hacen los *paganos, que no conocen a Dios;6 y que nadie perjudique a su hermano ni se aproveche de él en este asunto. El Señor castiga todo esto, como ya les hemos dicho y advertido.7 Dios no nos llamó a la impureza sino a la santidad;8 por tanto, el que rechaza estas instrucciones no rechaza a un hombre sino a Dios, quien les da a ustedes su Espíritu Santo.»

(3)    Noten la importancia de la VOLUNTAD de Dios en nuestro COMPORTAMIENTO. Veamos Efesios 5:15-18:

(a)   « Así que tengan cuidado de su manera de vivir. No vivan como necios sino como sabios,16 aprovechando al máximo cada momento oportuno, porque los días son malos.17 Por tanto, no sean insensatos, sino entiendan cuál es la voluntad del Señor.18 No se emborrachen con vino, que lleva al desenfreno. Al contrario, sean llenos del Espíritu.»

iii.    En tercer lugar, el ser agradecidos, es la VOLUNTAD de Dios.

(1)    (1ª  Tesalonicenses 5:18) «den gracias a Dios en toda situación, porque esta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús.»

iv.    En cuarto lugar, buscamos Su Voluntad también en ORACIÓN. Sabiendo que el Espíritu Santo, nos guía a TODA VERDAD.

(1)    (Filipenses 4:6-7) «No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias.7 Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, cuidará sus corazones y sus pensamientos en Cristo Jesús.»

(2)    (Juan 16:13) «Pero cuando venga el Espíritu de la verdad, él los guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propia cuenta sino que dirá sólo lo que oiga y les anunciará las cosas por venir.»

c.    Para concluir, aquí encontramos una pequeña guía para lo que es el diario vivir nuestro aquí en la tierra. La Voluntad de Dios la encontramos en Su Palabra, que el Espíritu Santo revela a nuestras vidas, guiándonos a TODA VERDAD, que es Su Santa Voluntad.

CONCLUSIÓN:

Oremos.

Notas:

1. David Daniels, Comentario Bíblico Mundo Hispano, tomo 3, p. 278-279, editorial Mundo Hispano.

*Toda referencia Bíblica es tomada de la Biblia, Nueva Versión Internacional*

**Este sermón fue predicado en Julio, 2009**