VESTIMENTA

Desde la antigüedad el hombre usó una gran variedad de materiales fácilmente disponibles para cubrirse. La Biblia menciona hojas (Gn. 3:7) y pieles (Gn. 3:21). Además, probablemente se usaron pelos, hierbas y la corteza de los árboles. La vestimenta más antigua hecha por el hombre, siendo de materiales muy frágiles ha desaparecido y no ha dejado restos para el estudio arqueológico.
En la edad patriarcal de la Biblia, conocida por los arqueólogos como la edad del bronce intermedio, leemos de una †œtúnica de diversos colores† para José (Gn. 37:3). La invención de la rueca y del tejido antecede en mucho a los patriarcas y probablemente deberí­a fecharse en los tiempos neolí­ticos.
Los pueblos nómadas hací­an trajes de cueros y pieles; pero los pueblos sedentarios tení­an fácil acceso a las fibras vegetales, mayormente al algodón y al lino. El lino creció en Egipto, donde los faraones daban vestidos de lino fino como regalos, junto con el oro y las joyas (Gn. 41:42). El algodón fue introducido en *Asiria alrededor del 700 a. de J.C. por Senaquerib. Este era originario del alto Egipto y del Sudán. Ya se disponí­a de lana de una manera fácil a través del Cercano Oriente y era normalmente usada para las vestimentas exteriores (Lv. 13:47; Dt. 22:11).
El lino y el algodón se usaron normalmente sin teñirlos; pero la lana se usaba ya sea natural (de la cual hay una variedad de tonos, véase Gn. 30:32-34) o teñida. La Biblia habla de †œlino azul, púrpura y carmesí­† (Ex. 26:1), los cuales eran producidos por teñido.
Los hombres egipcios usaban un taparrabo o falda, y sus mujeres usaban capas o vestidos. El taparrabo fue el vestido cosmún a través de la mayor parte del mundo antiguo. Las pinturas de la tumba de *Beni Hasan representan a los semitas entrando en Egipto durante la edad patriarcal.
En general, el vestuario usado en el Cercano Oriente era suelto y holgado. Los *minoicos constituyen una excepción ya que las mujeres minoicas usaron vestidos que fueron hechos de tal manera para contornear la figura. Tení­an faldas amplias con bordes adornados y blusas de bajo escote o chaquetas.

Fuente: Diccionario Bíblico Arqueológico

beged (dg²,B, , 899), «vestimenta; ropaje; abrigo; tela; manta». Esta palabra se encuentra unas 200 veces durante todos los perí­odos del hebreo bí­blico. El término se refiere a cualquier tipo de «vestimenta», por lo general para uso humano. Beged aparece primero en Gen 24:53 «Y el siervo sacó objetos de plata, objetos de oro y vestidos, y se los dio a Rebeca» (lba). En este caso, el vocablo indica «ropaje hecho de materiales preciosos». Por otro lado, las «vestimentas» de las viudas tal vez fueron bastante corrientes y baratas (Gen 38:14). Sin duda las «vestimentas» que usaban las plañideras eran muy ordinarias y quizás también rasgadas (2Sa 14:2). A veces beged se refiere a «ropaje externo». Los soldados sirios (2Ki 7:15) que huyeron de Jerusalén dejaron atrás sus «prendas de vestir» (rva) y pertrechos, despojándose de toda impedimenta, aunque de seguro se quedaron con su ropa más esencial. Por otro lado, en Jdg 14:12, el término se distingue de «sábanas de lino» (ropa exterior); Sansón prometió a los filisteos que si respondí­an correctamente a su adivinanza les darí­a «treinta vestidos de lino y treinta mudas («sábanas» rv) de ropa» (lba; cf. Jdg 17:10). Las «vestimentas sagradas» que Moisés debí­a hacer para Aarón consistí­an de toda la vestimenta del culto al Señor: «El pectoral, el efod, el manto, la túnica bordada, la mitra y el cinturón. Hagan, pues, las vestiduras sagradas para Aarón tu hermano» (Exo 28:4). En Num 4:6, beged significa «cubierta» o sea una tela grande que sirve para tapar: «Y pondrán sobre ella la cubierta de pieles de tejones, y extenderán encima un paño todo de azul». Por lo general, las personas se tapaban con «mantas o frazadas»: «Cuando el rey David era viejo y avanzado en dí­as, le cubrí­an de ropas, pero no se calentaba» (1Ki 1:1). Los caballos usaban «mantas para cabalgaduras» (Exo 27:20).

Fuente: Diccionario Vine Antiguo Testamento