ROSETA, PIEDRA

La piedra Roseta es una *estela de ca. 91 cms. de alto por 71 cms, de ancho, que contiene inscripciones en griego y en dos formas del antiguo egipcio demótico, la escritura común de Egipto y la jeroglí­fica. La piedra toma su nombre de la villa egipcia de Roseta cerca de la cual fue descubierta en 1798 por un oficial de la expedición de Napoleón en Egipto.
El texto griego en la base de la piedra podí­a leerse y los eruditos intentaron usarlo como una clave para descifrar las otras dos escrituras egipcias. Silvestre de Sacy, de Francia y J. D. Ackerblad, de Suecia identificaron nombers personales griegos en el texto demótico — Tolomeo, Berenice y Arsinoe. Un erudito inglés, Thomas Young, identificó el nombre de Tolomeo en la sección jeroglifica donde grupos de signos en marcos ovalados, llamados cartuchos, se creyó que eran los nombres de los reyes. Un joven erudito francés, Jean Francois Champollion (1790–1832), pudo descifrar la escritura jeroglefica elaborando una gramática egipcia y un diccionario y traducir numerosos textos egipcios.
La piedra Roseta consistí­a de un decreto emitido por los sacerdotes de Menfis en honor de Tolomeo V, Epí­fanes ( ca. 203–181 a. de J.C. ). Su significado, sin embargo, no está tanto en su contenido como en su valor en abrir el secreto de la escritura jerogifica al mundo de la erudición. La piedra Roseta está ahora en el Museo Británico, porque llegó a estar en posesión de los británicos después de la caí­da de Alejandrí­a y de la derrota del ejército napoleónico. Para el desciframiento de los caracteres cuneiformes, véase BISITUN.

Fuente: Diccionario Bíblico Arqueológico