Calle de Damasco (Siria). (Hch 9:10, 11; GRABADO, vol. 2, pág. 748.) Con una longitud aproximada de 1,5 Km. y unos 30 m. de anchura, durante la época romana constituía una de las arterias principales de la ciudad. Por entonces estaba dividida por columnatas en tres secciones; los peatones utilizaban la calzada central, mientras que las dos calzadas laterales se destinaban a carruajes y monturas que circulaban en direcciones opuestas. En la actualidad, la calle aún conserva un equivalente árabe del nombre antiguo (Darb al-Mustaqim), pero ha dejado de ser totalmente recta. Comienza en la puerta oriental y se extiende hacia el O. En esta calle antigua, en casa de cierto hombre llamado Judas, Saulo de Tarso se alojó por un tiempo después de que se le apareció el glorificado Jesucristo. Mediante una visión, Jesús dirigió a Ananías a esta casa que se hallaba en †œla calle llamada Recta† con el fin de restaurar la vista a Saulo. (Hch 9:3-12, 17-19.)
Fuente: Diccionario de la Biblia