PROTOCATOLICISMO

DicEc
 
«Protocatolicismo» (Frühkatholizismus, Protocatholicisme, Précatholicisme) fue en principio un término peyorativo usado, por algunos autores protestantes de los siglos XIX y XX, para describir los desarrollos de la época subapostólica (ca. 95-150 d.C.) considerados como pasos atrás en relación con el prí­stino carácter evangélico del mensaje original. Así­, por ejemplo, el interés por la tradición y la literatura apostólica; la distinción naciente entre el laicado y el clero; la organización jerárquica más que carismática; el desarrollo del episcopado monárquico; la aparición del principio de la transmisión de la autoridad o de la sucesión apostólica; la concepción de la fe en categorí­as objetivas más que subjetivas; la insistencia en la sana doctrina; la moralización de la fe, con la tendencia al legalismo; el interés en la consolidación de la Iglesia y en la unidad; la insistencia cada vez mayor en los sacramentos como medios de salvación; la atenuación de la escatologí­a apocalí­ptica. Algunos autores, como E. Kí­isemann, remontan el «protocatolicismo» a los escritos tardí­os del Nuevo Testamento, como las epí­stolas pastorales, 2 Pedro y Lucas, comparándolos de manera desfavorable con la situación más carismática de la Iglesia que se revela en las cartas indudablemente paulinas. Esta postura conduce fácilmente, si no de manera inevitable, al establecimiento de un «canon dentro del canon», es decir, de una lista de libros del Nuevo Testamento que representarí­an un testimonio más auténtico y de mayor valor para el historiador y el teólogo que los demás del canon reconocido. Frente a esta visión, la Iglesia católica insiste en el carácter inspirado de todos los libros del Nuevo Testamento, aunque muestren una teologí­a diversa.

Christopher O´Donell – Salvador Pié-Ninot, Diccionario de Eclesiologí­a, San Pablo, Madrid 1987

Fuente: Diccionario de Eclesiología