Piojo (heb. kên y kinnâm, de significado incierto). El término hebreo designa alguna clase de bicho o sabandija, pero los comentadores están divididos acerca de si lo que atormentó a los egipcios en la 3ª plaga fueron «piojos», «jejenes» o «mosquitos» (Exo 8:16-18; Psa 105:31). Tampoco se sabe a qué especie pertenecían, pues hay centenares en el Cercano Oriente. Bib.: ALP 273-285.
Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico
ver ANIMALES
Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano
Palabra utilizada por la RV60 para señalar a los pequeños insectos que formaron la tercera de las plagas de Egipto (Exo 8:16-18). En hebreo, el término realmente quiere decir †œmosquitos†. O más bien †œjejenes†, que es un insecto pequeñísimo que se cría en las grandes zonas inundadas por el Nilo y cuya picadura causa unas ronchas que producen mucha molestia. No debe confundirse, entonces, con el Piojus humanus, que vive en los cabellos de los seres humanos. †¢Animales de la Biblia.
Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano
tip, FAUN INSE
vet, (heb. «kinnãm» o «kinnim»). Pequeño insecto molesto, parásito del hombre. Fue la tercera plaga de Egipto (Ex. 8:13). Hay traductores que vierten «mosquito», pero Josefo indica que se trataba de piojos, y con toda probabilidad es él quien tiene razón. Los piojos constituyen en Oriente una plaga permanente de primera magnitud. Es difícil imaginar la angustia causada por su prodigiosa multiplicación. Para escapar a esta plaga, los musulmanes se rasuran la cabeza y se depilan todo el cuerpo; con ello siguen la antigua costumbre de los sacerdotes egipcios.
Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado