OMRI

Omri (heb. Omrî, «el adorador», «discí­pulo de Yahweh» o «atado»; Piedra Moabita, mry; cun. Humri y Humria). 1. Sexto rey del reino norteño de Israel (c 885-c 874 a.C.) y fundador de una poderosa dinastí­a que reinó unos 44 años (c 885-841 a.C.), 1/5 de la duración del reino. Antes de ser rey, Omri era comandante del ejército de Ela. Estaba luchando contra los filisteos en Gibetón cuando Zimri -un oficial de los carros del rey- asesinó a Ela y usurpó el trono. Cuando esta noticia llegó al ejército, inmediatamente proclamaron rey a Omri y marcharon contra Zimri en Tirsa, la capital. Este reconoció que no podrí­a mantenerse el trono contra las fuerzas de Omri y se suicidó: su reinado fue de sólo 7 dí­as (1Ki 16: 8-10, 15-20). Sin embargo, el nuevo rey tuvo que luchar más de 4 años contra Tibni,* otro pretendiente al trono que tení­a muchos seguidores, antes de gobernar como único soberano. El reinado de Omri fue de gran importancia polí­tica. Mudó su capital a Samaria* (1Ki 16:24), una ubicación de mayor importancia estratégica que Tirsa. Al escoger un lugar totalmente deshabitado, que no tení­a historia ni tradición, Omri reveló gran sabidurí­a polí­tica e hizo por Israel lo que David habí­a hecho 858 por Judá al elegir a Jerusalén. Subyugó a Moab, como lo atestigua la Piedra Moabita* del rey Mesa (fig 359). La inscripción dice, en parte: «Omri, rey de Israel, habí­a oprimido a Moab durante muchos dí­as, porque Quemos estaba enojado con su tierra… Y Omri habí­a ocupado la tierra de Medeba, e (Israel) vivió en ella sus dí­as y en la mitad de los dí­as de su hijo, 40 años». Que la conquista de Moab fue una empresa fructí­fera se ve por el tributo que Moab pagó a su hijo Acab. Ascendió, probablemente cada año, a 100.000 corderos y la lana de 100.000 carneros (2Ki 3:4). Con sus vecinos fenicios, Omri estableció relaciones cordiales y coronó esas relaciones con el casamiento de su hijo Acab con Jezabel, la hija de Et-baal, rey de Tiro («rey de los sidonios» en 1Ki 16:31), de acuerdo con la costumbre de la época. El resultado de esta alianza con los fenicios fue la introducción del culto de Baal y Asera en Israel hasta niveles desconocidos (vs 32, 33). No se sabe mucho de las relaciones de Omri con los sitios de Damasco, excepto que otorgó concesiones económicas a Damasco y permitió que mercaderes sirios tuviera bazares en Samaria (1Ki 20:34). Tampoco se sabe si eso fue un acuerdo puramente económico o una concesión después de una derrota militar. No hay evidencias de choques con los asirios, pero los siguientes 150 años de los registros de éstos se refieren a Israel como a la «tierra de Omri», o «la casa de Omri». Aun llaman a Jehú, el exterminador de su dinastí­a, un «hijo de Omri». Su personalidad, su éxito polí­tico, o sus empresas comerciales parecen haberle ganado cierta fama ante los ojos de sus contemporáneos y de generaciones posteriores. En vista de ello, debe ser considerado como uno de los reyes más notables de Israel, aunque la Biblia sólo le dedica poco espacio, notando que «hizo lo malo ante los ojos de Jehová», aún «peor que todos los que habí­an reinado antes de él» (1Ki 16:25; fig 445). 2. Benjamita de la familia de Bequer (1Ch 7:8). 3. Descendiente de Judá de la familia de Fares (1Ch 9:4). 4. Hijo de Micael y oficial jefe de la tribu de Isacar en tiempos de David (1Ch 27:18 ).

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

nombre de varón. 1. General del ejército y último rey de Israel, de la dinastí­a de Jeroboam.

Fundador de la dinastí­a homónima ca 878-845. Tras el asesinato del rey Elá, en 882, en Tirsá, las tropas proclamaron rey a O., jefe supremo del ejército, 1 R 16, 16, imponiéndose inmediatamente sobre el rey Zimrí­, quien reinó siete dí­as solamente, 1 R 16, 17-18, al igual que sobre Tibni a quien una parte de la población le habí­a nombrado rey, 1 R 16, 21-22.

Fundó Samaria como nueva capital del reino 1 R 16, 24; esta ciudad estaba situada en el centro del paí­s, al igual que Jerusalén y Judá. No pertenecí­a a ninguna tribu y no tení­a que soportar el peso de ningún tipo de reminiscencias polí­ticas ni religiosas.

Estableció relaciones con los fariseos y casó al prí­ncipe heredero Ajab, con la princesa de Tiria, Isabel. La dinastí­a de O. fue derrocada por Jehú, ca 845. 2. Benjaminita, hijo de Bequer, 1 Cr 7, 8. 3. Descendiente de Fares de la tribu de Judá, uno de los primeros que llegó a Jerusalén después del cautiverio babilónico, 1 Cr 9, 2-4. 4. Hijo de Micael y jefe de la tribu de Isacar en época de David rey, 1 Cr 27, 18.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

1. Sexto rey de Israel (886 al 874 a. de J.C.). Omri, un hábil e inescrupuloso soldado y fundador de una dinastí­a, es el primer monarca hebreo que es mencionado en documentos no bí­blicos: Mesha lo incluye en la inscripción de la Piedra Moabita.

Omri es desestimado por el historiador hebreo por ser una mala influencia (1Ki 16:25-26). En realidad, el casamiento de su hijo Acab con Jezabel, princesa de Tiro, probablemente para confirmar un acuerdo de intercambio comercial, tuvo consecuencias terriblemente desastrosas, aunque fue la continuación de la polí­tica de David y Salomón con respecto de Tiro. La adoración del becerro por parte de Jeroboam (1Ki 12:32) continuó en Betel durante todo el reinado de Omri; y 140 años después de la muerte de Omri, encontramos a Miqueas denunciando los mandamientos de Omri (Mic 6:16). Se han excavado en las ruinas del palacio de Omri en Samaria varios patios abiertos rodeados de cuartos.
2. Un benjamita, hijo de Bequer (1Ch 7:8).
3. Hombre de Judá, de la familia de Fares (1Ch 9:4).
4. Prí­ncipe de la tribu de Isacar en el reinado de David (1Ch 27:18).

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

(Peregrino de Dios). Nombre de personas del AT.

1. Rey de Israel (882-871 a.C.). Contemporáneo de Asa, rey de Judá. Ela, hijo de Baasa, reinó por dos años en Israel, y sucumbió ante una conspiración de †œsu siervo Zimri, comandante de la mitad de los carros†, quien lo mató (1Re 16:8-11). Cuando se supo la noticia en †¢Gibetón, donde el ejército peleaba contra los filisteo s, los oficiales proclamaron rey a O. y sitiaron a †¢Tirsa, capital del reino. Zimri se vio perdido y prendió fuego al palacio real, donde murió (1Re 16:15-18). Siguió a esto una guerra civil, y pelearon los hombres de O. contra †¢Tibni, hijo de Ginat, hasta la victoria final del primero. O. demostró gran capacidad militar y construyó muchas obras, siendo la más importante el traslado de la capital desde Tirsa al monte de Semer, donde fundó †¢Samaria (1Re 16:24), en un sitio muy bien escogido, alto, fácil de defender, que resistirí­a años después el asedio de los sirios y los asirios, hasta que cayó en manos de Sargón II. Excavaciones arqueológicas en Meguido han mostrado restos de edificios construidos por O. Su reinado fue de gran prosperidad. Hizo alianza con el rey de Tiro mediante el matrimonio de su hijo †¢Acab con la hija de éste, Jezabel. Así­, habí­a una triple alianza Israel-Judá-Tiro, que trajo seguridad y comercio. Pero O. no eliminó las prácticas idolátricas de †¢Jeroboam hijo de Nabat. Mientras que, por otro lado, éstas se aumentaron como resultado de la alianza con Tiro y la acción de Jezabel en la corte. Esto traerí­a la oposición de los profetas, especialmente Elí­as y Eliseo. O. murió en Samaria y le sucedió su hijo Acab.

. Personaje en la descendencia de Benjamí­n. Hijo de Bequer (1Cr 7:8).

. Personaje en la descendencia de Judá. Hijo de Imri (1Cr 9:4).

. Jefe de la tribu de Isacar en tiempos del rey David (1Cr 27:18).

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, BIOG REYE HOMB HOAT

ver, MESA

vet, = «Jah reparte». (a) Benjamita de la familia de Bequer (1 Cr. 7:8). (b) Hombre de Judá, de la familia de Fares (1 Cr. 9:4). (c) Hijo de Micael y prí­ncipe de la tribu de Isacar durante el reinado de David (1 Cr. 27:18). (d) Rey de Israel. Antes de llegar al trono fue general de los ejércitos de Israel durante el reinado de Ela y, probablemente, bajo el anterior reinado de Baasa. Es posible que fuera entonces que Moab fue vencido. (Véase MESA (ESTELA DE], 7, 8). Omri dirigí­a el asedio de Gibetón, que los filisteos habí­an tomado, cuando supo que Zimri habí­a dado muerte a Ela y usurpado el trono. El ejército proclamó a Omri rey de Israel. Marchó contra Tirsa, la capital entonces del reino de Israel, ocupada por Zimri, que se suicidó (1 R. 16:15-20). El pueblo se dividió entonces: una mitad apoyaba a Omri, en tanto que la otra mitad querí­a dar la corona a Tibni. Omri no llegó a ser el soberano indiscutido sobre todo Israel hasta la muerte de Tibni, después de cinco años de luchas (1 R. 16:21-23). La declaración del versí­culo 23: «En el año treinta y uno de Asa rey de Judá, comenzó a reinar Omri sobre Israel», no se relaciona con la fecha de su proclamación por la soldadesca que le otorgó el trono (aunque sus doce años de reinado sí­ se cuentan a partir de aquel acontecimiento); esta declaración establece la fecha a partir de la que empezó Omri a reinar solo (cfr. 1 R. 16:15, 29). Cambió la capitalidad de Tirsa a Samaria, que construyó con este mismo objeto (1 R. 16:24). Omri se entregó a la idolatrí­a, como Jeroboam, y actuó aún peor, en ciertos respectos, que todos los reyes que le habí­an precedido sobre el trono de Israel (1 R. 16:26; Mi. 6:16). Murió hacia el año 874 a.C. Fue sepultado en Samaria. Acab, su hijo, le sucedió en el trono (1 R. 16:28). Omri es mencionado en las historias de los pueblos vecinos. Los moabitas se acordaban de él. Un siglo después de su muerte y tras la aniquilación de su familia, los asirios seguí­an asociando su nombre, que escribí­an Humri (con h aspirada), con el del paí­s de Israel y con el soberano reinante. Así­, aparece en las inscripciones de Salmansar III y de Sargón II en la expresión «paí­s de la casa de Omri», y llamando a Jehú «mar Humri», esto es, hijo o sucesor de Omri. Los fragmentos de cerámica (óstraca) hallados en Samaria mencionan el nombre de Jehová y el de Baal, confirmando ello la apostasí­a de Omri (2 R. 16:25 ss.).

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

1. Quinto hijo mencionado por nombre de los nueve hijos o descendientes de Béker, hijo de Benjamí­n. (1Cr 7:6, 8.)

2. Prí­ncipe de la tribu de Isacar durante el reinado de David; era hijo de Miguel. (1Cr 27:18, 22.)

3. Sexto rey del reino septentrional de diez tribus de Israel. No se registra nada del linaje de Omrí­, ni siquiera el nombre de su padre o de su tribu. Se sabe que fundó la tercera dinastí­a de Israel, precedida por las de Jeroboán y Baasá, y que le sucedieron en el trono su hijo Acab y sus nietos Ocozí­as y Jehoram. Entre los cuatro sumaron unos cuarenta y seis años (c. 951-905 a. E.C.) de reinado. Atalí­a, la nieta de Omrí­, gobernó seis años sobre el trono de Judá. (2Re 8:26; 11:1-3; 2Cr 22:2.) En el Obelisco Negro de Salmanasar III se dice que Jehú, quien acabó con la casa de Acab y fundó la siguiente dinastí­a de Israel, era †œhijo [es decir, sucesor] de Omrí­†. (La Sabidurí­a del Antiguo Oriente, edición de J. B. Pritchard, 1966, pág. 226.) De hecho, mucho tiempo después de haber terminado el gobierno de sus descendientes, los asirios, como tributo a su poder, continuaron llamando a Israel †œla tierra de Omrí­† y a los reyes de Israel, †œla casa de Omrí­†.
Omrí­ no subió al trono por derecho de herencia, sino por la espada. Era el jefe del ejército de Israel bajo el rey Elah (y quizás también bajo su predecesor, Baasá) cuando Zimrí­, el jefe que tení­a a su cargo la mitad de los carros, derrocó a Elah, se apoderó del reino y acabó con la casa y los amigos de Baasá. Tan pronto como se informó de este suceso al ejército israelita, que en aquel entonces estaba acampado contra los filisteos en Guibetón, †œtodo Israel†, seguramente los cabezas tribales que habí­a †œen el campamento†, hicieron rey a Omrí­. En seguida se retiraron de Guibetón y asaltaron Tirzá, la ciudad capital de Zimrí­. Este, al verse en una situación desesperada, †œquemó con fuego sobre sí­ la casa del rey†, y así­ puso un trágico fin a su gobierno de siete dí­as. (1Re 16:8-20.)
Pero a Omrí­ se le presentó un nuevo rival: Tibní­, hijo de Guinat. El pueblo permaneció dividido por unos cuatro años, durante los cuales se debió pelear una guerra civil hasta que los partidarios de Omrí­ derrotaron a los de Tibní­ y le aseguraron la gobernación indiscutida. Zimrí­ habí­a muerto en el año vigésimo séptimo del rey Asá de Judá (c. 951 a. E.C.). (1Re 16:15-18.) Finalmente, en el año trigésimo primero de Asá (c. 947 a. E.C.) murió Tibní­, sin que el registro explique cómo, y dejó a Omrí­ ocho años de dominio exclusivo. (1Re 16:21-23, 29; véase CRONOLOGíA.)
Al rey Omrí­ se le atribuye †œpoderí­o†. (1Re 16:27.) La Piedra Moabita registra en las lí­neas cuarta a octava que Omrí­ sojuzgó a Moab, una dominación que continuó durante el reinado de Acab. (2Re 3:4.) Hacia la mitad de su reinado, Omrí­ tomó la sabia decisión de trasladar su capital de Tirzá, una ciudad que habí­a capturado con mucha facilidad. Compró la montaña que pertenecí­a a Sémer, muy adecuada como fortaleza, y edificó allí­ una nueva ciudad, Samaria, capaz de resistir sitios prolongados. (1Re 16:23, 24.) Las inscripciones cuneiformes le llaman fundador de Samaria, que además fue el lugar donde se le enterró. (1Re 16:28.) En el transcurso de su reinado, Omrí­ se encontró con diversos reveses, como tener que entregar algunas ciudades al rey de Siria (1Re 20:34) y pagar tributo a Asiria, siendo el primer rey israelita en hacerlo.
En el campo religioso, Omrí­ continuó la tendencia decadente del reino norteño: continuó con la idolatrí­a de Jeroboán, de hecho, †œsiguió haciendo lo que era malo a los ojos de Jehová, y llegó a hacer peor que todos los que fueron antes de él†. (1Re 16:25, 26.) Unos doscientos años después, Jehová condenó a Israel mediante Miqueas por seguir †œlos estatutos de Omrí­†. (Miq 6:16.)

4. Hombre de Judá cuyo descendiente moró en Jerusalén tras el exilio babilonio. (1Cr 9:3, 4.)

Fuente: Diccionario de la Biblia

(heb. ˓omrı̂). 1. Jefe de Isacar durante el reinado de David (1 Cr. 27.18). 2. Sexto rey del reino septentrional de Israel, y fundador de una nueva dinastía después de la muerte de *Ela. Durante el período de anarquía que siguió a la muerte de *Baasa, el ejército, que estaba sitiando Gibetón, proclamó rey a su jefe Omri al tener conocimiento del golpe dado por Zimri (ca. 885 a.C.; 1 R. 16.15–17). El nuevo monarca marchó entonces sobre la capital, *Tirsa, y la sitió hasta que Zimri se suicidó (v. 18). Tibni, otro aspirante al trono, resistió a Omri durante cuatro años, pero finalmente fue derrotado. Omri reinó por siete años, desde el trigésimo primero hasta el trigésimo octavo año de *Asa (vv. 23, 29), un total de doce años (v. 23).

Aram, que bajo el reinado de *Ben-hadad I había sido lo suficientemente fuerte como para anexar parte de Israel durante el reinado de Baasa, todavía constituída una amenaza para Omri (cf. 1 R. 20.34). Este rey se alió con Et-baal, rey de Sidón, al tomar a su hija, *Jezabel, para su hijo *Acab (16.31), con lo que evitó asi en parte el peligro. Fue lo suficientemente fuerte como para convertir a Moab en vasallo, como lo registra Mesa en la piedra *moabita (11.4–5) (ANET, pp. 320; DOTT, pp. 196; cf. 2 R. 3.4).

También se recuerda a Omri por el programa de construcciones que llevó a cabo. La más importante de sus obras fue la nueva capital israelita de *Samaria en un lugar que se le compró a Semer, su anterior propietario (1 R. 16.24). La ciudad tenía una excelente posición estratégica, y fue la capital hasta la caída de Israel en 722 a.C. Las excavaciones arqueológicas llevadas a cabo en Meguido y Hazor también revelaron edificios atribuidos a este monarca.

Sólo tenemos detalles aislados del reinado de Omri, pero los registros asirios nos muestran que hasta el reinado de *Sargón II, también se conoció a Israel como māt/bı̄t umri, ‘la tierra/casa de Omri’ (ANET, pp. 281–285). Por haber tolerado cultos paganos se lo recuerda como un rey malo (1 R. 16.25–26).

Bibliografía. J. Bright, La historia de Israel, 1985, pp. 287–302; J. A. G. Larraya, “Omri”, °EBDM, t(t). V, cols. 630–632; S. Herrmann, Historia de Israel, 1979, pp. 266ss.

D.W.B.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico