MUSICA E INSTRUMENTOS MUSICALES

El pueblo de Israel ha sido siempre gran amante de la m. ésta, en sus inicios, era mayormente vocal. La primera mención sobre m. en la Biblia es la referencia a †¢Jubal, †œel cual fue padre de todos los que tocan arpa y flauta† (Gen 4:21). Si bien debe tomarse nota de que Dios, hablando a Job, dijo que cuando él termino la creación †œalababan todas las estrellas del alba y se regocijaban todos los hijos de Dios† Job 38:7). En numerosas ocasiones se mencionan cánticos, de Moisés, de su hermana Marí­a, de Débora, de Ana, etcétera, pero hasta nosotros han llegado sólo las letras, sin m. escrita. Igualmente pasa con las famosas composiciones musicales de David, †œel dulce cantor de Israel† (2Sa 23:1). Salomón compuso †œmil cinco cantares† (1Re 4:32). Algunos de los usos de m. pueden verse en:

a) Las celebraciones de victorias y grandes eventos. El cántico de Moisés después del éxodo (Exo 15:1-18) y el hecho de que Marí­a la profetisa, su hermana, tomara †œun pandero en su mano, y todas las mujeres salieron en pos de ella con panderos y danzas† (Exo 15:20-21), es una muestra de esta práctica. Las mujeres de Israel, tras la m. de Goliat, danzaban †œcon cánticos de alegrí­a y con instrumentos de m.† (1Sa 18:6-7).

b) Las fiestas familiares. Cuando Jacob abandonó a †¢Labán, éste se quejó de que no pudo hacerle una fiesta de despedida †œcon alegrí­a y con cantares, con tamborí­n y arpa† (Gen 31:27). El famoso Filón llegó a escribir que los judí­os pasaban noches enteras cantando su m.

c) En ocasiones de duelo. También la endecha incluí­a m. y versos, como se desprende de la instrucción para que †œtodos los cantores y cantoras† reciten las lamentaciones de Jeremí­as (2Cr 35:25). Se acostumbraba contratar músicos, especialmente flautistas, para los entierros (Mat 9:23). Según Maimónides, hasta el más pobre de los israelitas tení­a el deber de contratar por lo menos dos músicos para el entierro de su esposa.

d) El acompañamiento a profetas. Como en el caso de la †œcompañí­a de profetas† que encontró Saúl, con un grupo de personas que tocaban †œsalterio, pandero, flauta y arpa† (1Sa 10:5). Cuando fue rey, se le recomendó que buscara †œa alguno que sepa tocar el arpa† para aliviar el tormento que le causaba un espí­ritu malo (1Sa 16:16). Eliseo pidió †œun tañedor† para con la m. predisponerse a oí­r la voz de Dios (2Re 3:15).

e) La diversión en la corte y en casas de gente rica. En la corte de David se practicaba m. abundantemente, con †œcantores y cantoras† (2Sa 19:35). Salomón confiesa que hizo acumulación de †œcantores y cantoras … y de toda clase de instrumentos de música† (Ecl 2:8). Isaí­as menciona el uso de †œarpas, vihuelas, tamboriles, flautas y vino† en los banquetes de los ricos (Isa 5:12).

f) En la liturgia. Cuando se instituyó el †¢tabernáculo no se hizo mención de ningún tipo de música en el culto, lo cual llama la atención. Las †¢trompetas de plata no tení­an función litúrgica, pues serví­an para levantar el campamento o dar la †¢alarma. Pero cuando David decide trasladar el tabernáculo hacia Jerusalén lo hace acompañado de †œtoda clase de instrumentos de madera de haya; con arpas, salterios, panderos, flautas y cí­mbalos† (2Sa 6:5; 1Cr 13:8). Y deja organizada la liturgia para el templo que construirí­a Salomón con una serie de ordenanzas que poní­a a cargo mayormente de los levitas.

éstos, organizados en coro, tení­an una gran participación en los cultos en el †¢templo, en varios casos de manera antifonal. No se tienen datos sobre las notas que utilizaban y si tení­an alguna forma escrita para señalarlas. Ciertas acentuaciones en los salmos sólo tienen por propósito ayudar a la recitación. Todaví­a no se sabe con certeza cuál es el significado de la palabra †œselah† que aparece en varios salmos, aunque se sugiere en la Misná que se trataba de una pausa para que la congregación realizara alguna otra acción de culto durante ella. En los encabezamientos de algunos de los salmos se leen ciertas palabras de difí­cil interpretación, y piensan algunos que son una referencia a instrumentos musicales y otros a posibles tonadas muy conocidas. La actividad musical es equiparada a la profecí­a. Los músicos estaban †œpara que profetizasen con arpas, salterios y cí­mbalos†. †¢Asaf †œprofetizaba bajo las órdenes del rey† (1Cr 25:1-3). Tan famosos se hicieron los levitas cantores y la música israelita que en Babilonia, adonde fueron llevados exiliados, los caldeos les pedí­an: †œCantadnos algunos de los cánticos de Sion† (Sal 137:3). Se habla de †œcantores y cantoras† (2Sa 19:35; 2Cr 35:25; Esd 2:65; Ecl 2:8). †¢Aleluya.

Los instrumentos musicales. David, en su amor por la m., llegó incluso a inventar instrumentos (1Re 10:12; Amo 6:5). Los instrumentos musicales más mencionados en la Biblia son los siguientes:

Arpa. Era el instrumento más noble de las civilizaciones semí­ticas. †œEl arpa deliciosa† (Sal 81:2). La palabra hebrea es kinor. Se trataba de un cuerpo, dos brazos, un yugo y diez cuerdas. Probablemente medí­a unos 50-60 cm de altura. Las cuerdas se hací­an con tripas del intestino delgado de ovejas. El cuerpo y los brazos eran de madera de †¢haya y, a lo menos en una ocasión, de sándalo (2Sa 6:5; 1Re 10:12). Se tocaba con un plectro. Su entonación era aguda. Muchos prefieren utilizar el término †œlira†, que se aproxima mejor a lo que se quiere describir. David lo usaba mucho. Era el instrumento básico de la orquesta en el †¢templo (1Re 10:12). Los escritores de salmos la mencionan a menudo (Sal 33:2; Sal 43:4; Sal 49:4; Sal 57:8, etcétera).

Bocina. Sofar. Instrumento de viento, uno de los más antiguos conocidos por el hombre, que se hací­a vaciando los cuernos de algunos animales. Los hebreos lo fabricaban especialmente de cuernos de carneros, cabras, antí­lopes y gacelas, prefiriendo los que fueran más curvos. Se soplaba por el extremo más estrecho para producir el sonido. Se utilizaba para convocar a la gente a reuniones, así­ como para dar señales en la guerra. También para ceremonias religiosas. Es traducción de la palabra hebrea shofar, que aparece por primera vez en Exo 19:13, donde se le utiliza para dar la señal al pueblo para que se allegaran al monte Sinaí­ en el momento de recibir la ley. Las murallas de Jericó cayeron al toque de las bocinas o sofar. El sofar es todaví­a hoy utilizado en las grandes celebraciones judí­as.

Campanillas. Sólo se mencionan en relación con la vestidura del sumo sacerdote, en las orlas de cuyo manto se poní­a, alternativamente, †œuna campanilla de oro y una granada† (Exo 28:33-34). Se usa la palabra campanilla para un término hebreo, pa†™amon, de difí­cil traducción. Las campanilla, como tales, vinieron a usarse en Israel en el siglo VII a.C., por lo cual algunos piensan que se trataba de algunas plaquetas de metal que producí­an sonido. El propósito no era musical, sino anunciar los movimientos del sacerdote cuando no estaba a la vista del público. También se mencionan campanilla como usadas para acompañar con sonido el paso de los caballos (Zac 14:20).

Cí­mbalos. Era un instrumento de percusión que originalmente se hací­a de barro cocido y luego con metal. Tení­a la forma de dos platillos que se sostení­an con las manos y se golpeaban entre sí­. El choque se podí­a hacer de varias maneras para lograr distintas calidades de sonido. Los habí­a de tamaño pequeño, que se colocaban en dos dedos de cada mano, o más grandes, que habí­a que tomar uno en cada mano. Este instrumento, muy usual en los pueblos del Oriente Medio, se utilizaba para la danza. Así­, cuando el arca era llevada hacia Jerusalén, †œDavid y toda la casa de Israel danzaban … con arpas, salterios, panderos, flautas y cí­mbalos† (2Sa 6:5). Asaf era el que †œsonaba los cí­mbalos† en el †¢templo (1Cr 16:5). Cuando se echaban los cimientos †œdel templo de Jehovᆝ en dí­as de Esdras, los sacerdotes y los hijos de Asaf fueron puestos †œcon cí­mbalos, para que alabasen…† (Esd 3:10). Igualmente se hizo en tiempos de Nehemí­as cuando la restauración del muro (Neh 12:27). Pablo nos enseña que la mucha elocuencia, y aun usar de lenguaje angelical, sin tener amor, viene a ser †œcomo cí­mbalo que retiñe† (1Co 13:1), es decir, simple ruido y nada más.

Cí­tara. Era un instrumento de cuerdas parecido a la lira, con caja de resonancia. Usualmente era de tamaño pequeño, para ser utilizado mientras se caminaba. Se utilizó la cí­tara para la celebración con motivo de la restauración del muro de Jerusalén (Neh 12:27). Se le consideraba sí­mbolo de alegrí­a (Job 21:12). Pablo menciona la necesidad de tocar los distintos tonos en la cí­tara al hablar del orden del culto en cuanto a hablar en lenguas (1Co 14:7). Muchas veces hay duda al traducir esta palabra del hebreo o el griego, por lo cual algunos traductores usan †œarpa† en distintos pasajes.

Decacordio. Instrumento musical semejante al †¢arpa, pero con diez cuerdas. Era de forma triangular. Se atribuye a David su invención (Sal 33:2; 2Cr 7:6).

Flauta. Instrumento de viento. Se usan varias palabras en hebreo, traducidas flauta en castellano, pero la idea general es de un palo hueco, con hoyos en la superficie, que se sopla desde un extremo. Permite tocar melodí­as que expresan tanto alegrí­a como tristeza. Por eso Job habla de los que †œse regocijan al son de la flauta† y de haber cambiado su †œflauta en voz de lamentadores† (Job 21:12; Job 30:31). Los flautistas tocaban en los entierros (Mat 9:23). El término que aparece en Dan 3:10, traducido flauta en la †œorquesta† de Nabucodonosor, parece haber sido algo parecido al pí­fano. En el NT se menciona la flauta en la cita que el Señor hace del refrán: †œOs tocamos flauta y no bailásteis† (Mat 11:17; Luc 7:32). También Pablo habla de la necesidad de diferenciar las notas para saber qué se está tocando con la flauta (1Co 14:7).

Pandero. Tamboril. Tamborí­n. Instrumento de percusión que consistí­a en una membrana de piel que se armaba extendida sobre una caja cuadrada o redonda que se tomaba con una mano. Con la otra se golpeaba la piel, de donde viene la raí­z hebrea del nombre: tof -golpear-. Este instrumento, muy rústico, era usado para acompañar la danza, y su presencia se tení­a siempre como señal de gozo y alegrí­a (Isa 24:8). †¢Labán hubiera querido hacer una fiesta de despedida a Jacob †œcon alegrí­a y con cantares, con tamboril y arpa† (Gen 31:27). La hija de †¢Jefté salio a recibirle †œcon pandero y danzas† (Jue 11:34).

Salterio. Vihuela. Instrumento de cuerdas. Era un tipo de lira, más parecida a un arpa, pero más grande y con doce cuerdas que se hací­an del intestino grueso de ovejas. No se usaba plectro para pulsarlo, sino los dedos. La palabra hebrea es nevel. Era el segundo instrumento de importancia en la orquesta del †¢templo. †œCantadle con salterio y decacordio† (Sal 33:2) es una expresión de un salmista. En una moneda acuñada en los años 132-35 d.C. aparece la figura esquematizada de un salterio con una caja de resonancia en la base.

Trompeta. Instrumento de viento. Es una evolución natural de la bocina o sofar. El cuerno de animales se sustituyó por metal. Dios ordenó a Moisés hacer dos trompetas de plata, con las cuales se daba la señal de †¢alarma en caso de guerra, para levantar el campamento y para las grandes celebraciones. Estaban reservadas para ser usadas sólo por los sacerdotes (Num 10:2-10). En el traslado del arca a Jerusalén se usaron trompeta (1Cr 15:24). En la coronación de los reyes se tocaban las trompeta (1Re 1:34). A todos los habitantes del mundo, dice un oráculo de Isaí­as: †œCuando se toque trompeta, escuchad† (Isa 18:3). Los fariseos, cuando iban a dar limosna, hací­an que alguien tocara trompeta anunciando el hecho, lo cual el Señor condenó (Mat 6:2). En el dí­a del juicio el Señor †œenviará sus ángeles con gran voz de trompeta.† (Mat 24:31). Pablo habla de †œla final trompeta, porque se tocará la trompeta† en la resurrección (1Co 15:52).

Zampoña. En la †œorquesta† de Nabucodonosor se menciona un instrumento con este nombre (Dan 3:7-10). La traducción es difí­cil, pues zampoña. se llama a varias flautas juntas, pero también a una especie de gaita tocada en Italia. En todo caso, parece ser que se trataba de un instrumento de viento. Pero algunos interpretan que probablemente la intención del texto es señalar que todos los instrumentos mencionados tocaban en armoní­a, pues la palabra zampoña. viene del griego symphonia.

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

I. Música

Resulta evidente, dadas las frecuentes referencias en el AT, que la música representaba un papel importante en la cultura heb. Según la tradición, Jubal, hijo de Lamec, que “fue padre de todos los que tocan arpa y flauta” (Gn. 4.21), fue el inventor de la música. La estrecha relación entre las artes pastoriles y musicales se evidencia en el hecho de que Jubal tenía un hermano mayor, Jabal, que fue “padre de los que habitan en tiendas y crían ganados” (Gn. 4.20).

En una etapa posterior la música fue consagrada el servicio del culto en el templo, pero también tuvo expresión secular desde las primeras épocas. Así, Labán reprochó a Jacob el que se fuera secretamente sin darle la oportunidad de amenizar su partida “con alegría y con cantares, con tamborín y arpa” (Gn. 31.27). Frecuentemente se usaba la música en momentos de regocijo, ocasiones en las que generalmente se la vinculaba con la *danza. Había cantos de triunfo después de las victorias en las batallas (Ex. 15.1ss; Jue. 5.1ss). Miriam y las mujeres celebraron la caída del faraón y sus jinetes “con panderos y danzas” (Ex. 15.20ss), y Josafat regresó victorioso a Jerusalén “con salterios [“arpas”, °nbe ], arpas [“cítaras”, °nbe ] y trompetas” (2 Cr. 20.28). La música, el canto, y la danza eran comunes en las festividades (Is. 5.12; Am. 6.5). En particular, consistituían rasgos de las fiestas de la vendimia (Is. 16.10), y de las celebraciones matrimoniales (1 Mac. 9.37, 39). Los reyes tenían cantores e instrumentistas (2 S. 19.35; Ec. 2.8). El zagal también tenía su lira (1 S. 16.18). Los jóvenes en las puertas se entretenían con música (Lm. 5.14). Hasta la ramera aumentaba sus poderes de seducción con el canto (Is. 23.16). La música se usaba en momentos de duelo como también en los de alegría. La endecha (qı̂nâ) que constituye el libro de Lamentaciones y el lamento de David por Saúl y Jonatán (2 S. 1.18–27), son ejemplos notables. Se hizo costumbre contratar plañidores profesionales para que colaborasen en los funerales. Entre ellos siempre se incluían los flautistas (Mt. 9.23). Según Maimónides, el esposo más pobre debía contratar por lo menos dos flautistas y una mujer plañidera para el funeral de su mujer (Mišnāyôṯ 4).

Así como la música formaba parte integral de la vida social heb., ella tenía, también, su lugar en la vida religiosa. 1 Cr. 15.16–24 contiene un relato detallado de la organización por David del coro y la orquesta levíticos. Aparte de este pasaje sólo hay referencias dispersas e indirectas al uso de la música en el culto religioso, y hay pocos elementos que sirvan para obtener una impresión clara del carácter del servicio musical en el templo.

De la naturaleza de la música que tocaban los músicos heb. no tenemos información alguna. No se sabe con seguridad si tenían algún sistema de notas. No se ha conservado ningún sistema identificable. Se han hecho intentos de interpretar los acentos del texto heb. como una forma de notación, pero sin éxito. Dichos acentos constituían una guía para el recitado más bien que para la música, y de todos modos son de origen tardío. Si bien no tenemos elementos de comprobación en cuanto a la música instrumental del templo, podemos descubrir por la forma de los salmos que estaban destinados a ser cantados en forma antifonal, ya sea por dos coros (Sal. 13; 20; 38), o por un coro y la congregación (Sal. 136; 118.1–4). Parecería que después de la cautividad los coros se formaban con un número igual de voces masculinas y femeninas (Esd. 2.65). Pero no está claro si cada uno de los coros era de voces mixtas, o si uno era de voces masculinas y el otro de voces femeninas. Probablemente lo que hacían era entonar más bien que cantar, si bien no se sabe cómo entonaban, y con toda seguridad sería algo muy diferente del canto eclesiástico moderno.

De la Mesopotamia proceden las pruebas documentales (parte temprana del 2º milenio a.C.) sobre el cordaje y la afinación de las arpas, y de los instrumentos musicales con letanía (s. VI a.C.) ; cf. D. Wulstan, O. R. Gurney, Iraq 30, 1968, pp. 215–233; W. G. Lambert, en H. Goedicke eds. Near Eastern Studies … W. F. Albright, 197, pp. 335–353. En Ugarit (perteneciente al 1400 a.C. aprox.) se encontró un grupo de tablillas cuneiformes con himnos en lengua hurrita, con un tipo de notación musical; cf. A. D. Kilmer, RA 68, 1974, pp. 69–82; ibid. (con D. Wulstan), pp. 125–128, con referencias anteriores. Se ha hecho un intento de reproducir la afinación de arpas y la himnología en forma musical en un disco fonográfico; cf. A. D. Kilmer, R. L. Crocker, R. R. Brown, Sounds from Silence, 1977.

II. Instrumentos musicales

Acerca de los instrumentos de la Biblia tenemos algo más de información, si bien no hay información definida en cuanto a su forma o construcción. Sin embargo, se han encontrado instrumentos pertenecientes a otras naciones antiguas del Medio Oriente, principalmente de los egipcios. La etimología de las palabras hebreas contribuye en alguna medida, como también las versiones antiguas, pero, con todo, el conocimiento que tenemos es muy limitado. Los instrumentos que se mencionan en la Biblia se pueden dividir en tres grupos principales: cuerdas, vientos, y de percusión.

a. Cuerdas

(i) La lira. El kinnôr, que se traduce generalmente “arpa”, aunque también “cítara”, es el primer instrumento musical que se menciona en la Biblia (Gn. 4.21), y es el único instrumento de cuerdas que se menciona en el Pentateuco. Es uno de los instrumentos con los que Labán el sirio hubiese querido despedir a Jacob, si este no hubiera partido en forma tan apresurada (Gn. 31.27). Esta alusión sugiere que el instrumento puede haber sido de origen sirio. Ha habido diferentes opiniones sobre si se trataba realmente de un arpa o una lira. El peso de la opinión favorece a la lira, que es la palabra que se emplea en rsv. El hecho de que era uno de los cuatro instrumentos musicales que iban delante de los jóvenes profetas (1 S. 10.5) indica que era un instrumento portátil y, por consiguiente, pequeño. Antiguas pinturas en tumbas egipcias representan a extranjeros, semitas de Sutu (Transjordania), portando liras que tocan con un plectro o púa. Tampoco se sabe a ciencia cierta si el kinnôr se tocaba con un plectro o a mano. En 1 S. 16.23 “David tomaba el arpa [lira] y tocaba con su mano”; pero la ausencia de la mención de un plectro no constituye prueba de que las cuerdas eran tocadas con los dedos unicamente. No hay seguridad en cuanto al número de cuerdas que tenía el kinnôr. Josefo pensaba que tenía diez. Otra sugestión, basada en la asociación del instrumento con el heb. šemı̂nı̂ṯ (‘octava’, LXX hyper tēs ogdoēs) en 1 Cr. 15.21, es que tenía ocho cuerdas; pero la alusión en este pasaje está lejos de ser evidente.

El kinnôr era un instrumento de madera, siendo el de David probablemente de ciprés (2 S. 6.5). Los que Salomón hizo hacer para el templo se fabricaron de sándalo (1 R. 10.12), y evidentemente eran de gran valor. Josefo (Ant. 8.94) dice que la armazón de los mismos tenía electro, e. d. ya sea un metal mixto o ámbar.

La palabra “arpa” aparece también (en °vm, °sba) como traducción del vocablo arm. qı̂ṯrôs (°vrv2 “tamboril”; rsv “lira”; °vrv3, °vp, °nbe, °bj “cítara”), que aparece únicamente entre los instrumentos de la orquesta de Nabucodonosor en Dn. 3. Es la misma raíz de la que ha surgido la palabra occidental “guitarra”.

(ii) El salterio. Este vocablo viene del gr. psaltērion, que denota un instrumento que se pulsa con los dedos en lugar del plectro. El verbo gr. psallō significa tocar incisivamente o puntear. Es la palabra que se usa con más frecuencia para traducir el heb. nēḇel, aun cuando ocasionalmente se encuentra la traducción “vihuela”, “arpa”, etc. En la LXX nēḇel se traduce de diversas maneras (psaltērion, psalmos, kithara, nablion, nabla, nablē, naula y nablas). Se acepta generalmente que se trataba de una especie de arpa, como traduce °nbe, aunque no hay seguridad en cuanto a su descripción exacta. Se menciona por primera vez en 1 S. 10.5, y esto parecería confirmar la opinión de que era de origen fenicio, ya que hubo poco contacto entre Israel y Fenicia antes de esta fecha. Se han hecho intentos de reconstruir la forma del nēḇel identificándolo con el significado original de la raíz de la palabra odre, jarra o cántaro. Se ha sugerido que tenía una caja de resonancia abultada en el extremo inferior. Esta identificación de la raíz ha llevado incluso a la suposición de que tenía forma de gaita. Pero estas sugestiones son meras conjeturas.

Como el kinnôr, el nēḇel se hacía con madera de ciprés y más tarde con sándalo. Es evidente que David sabía tocar tanto el nēḇel como el kinnôr. Como en la Biblia se lo vincula generalmente con otros instrumentos musicales, se piensa que representaba el contrabajo.

La palabra heb. ˒āśôr se suele vincular con nēḇel. Esta palabra proviene de la raíz que significa “diez”, y se piensa generalmente que indica que el instrumento tenía diez cuerdas. Esta interpretación se encuentra también en la LXX y la Vg. (psaltērion, decajordeon y psalterium decem jordarum). Con toda probabilidad el nēḇel ˒āśôr era simplemente otro tipo de nēḇel.

La palabra “salterio” aparece también como traducción del arm. psantērı̂n (Dn. 3.5ss), otro de los instrumentos que componía la orquesta de Nabucodonosor. La palabra arm. parecería ser traducción del gr. psaltēron, y se traduce “arpa” en °nbe. J. Stainer (The Music of the Bible, pp. 40–55) sostiene, argumentando detalladamente, que en realidad se trata del dulcémele. Sin embargo, resulta imposible determinar con mayor seguridad de qué instrumento se trataba, salvo que era un instrumento de cuerdas.

Tabla donde se enumeran los instrumentos musicales mencionados en la Biblia, con los nombres correspondientes en tres versiones corrientes

(iii) La sambuca. Esta palabra aparece en °vm, °ci, °bj, en Dn. 3, como traducción del arm. sabbeḵâ (°vrv2 “arpa”). Es uno de los instrumentos de la orquesta de Nabucodonosor, y por consiguiente no era hebreo. La palabra sabbeḵâ se identifica generalmente con el gr. sambykē, y esta es la traducción que aparece en Dn. 3 en la LXX. Ha sido descrita ya sea como un arpa triangular pequeña de cuatro o más cuerdas y tono alto, o un arpa grande de muchas cuerdas. Cualquiera sea la descripción correcta, se trataba de un instrumento de cuerdas. Según Estrabón (10. 471) era de origen bárbaro. Más acertadamente rsv traduce “trigón”.

(iv) La zampoña. Esta es la traducción del arm. sûmpônyâ, que se considera generalmente como un préstamo gr. Aparece en la Biblia únicamente en la orquesta de Dn. 3. En la actualidad se entiende que era un tipo de gaita (así °vm. La traducción al italiano moderno es sampogna, una especie de gaita que se usa actualmente en dicho país. De otro modo podría derivarse del gr. ty(m)panon, una especie de tambor.

b. Insturumentos de viento

(i) La flauta. 1. Equivale al heb. ḥālı̂l, traducido así en °vrv2. Esta palabra aparece sólo seis veces en el AT. En el NT la flauta es el gr. aulos, usada en LXX para ḥālı̂l. La Vg. emplea tibia. Tanto aulos como tibia son términos generales que abarcan tanto instrumentos con lengüeta, tales como el oboe y el clarinete, como instrumentos que se tocan soplando por o a través de un agujero, como es el caso de la flauta.

La palabra ḥālı̂l proviene de una raíz que significa agujerear o perforar. La palabra aulos viene de una raíz que significa soplar. Pero ni la derivación de ḥālı̂l, ni su traducción en LXX, ofrece indicación alguna de la naturaleza del instrumento. El peso de la opinión parece favorecer al oboe más bien que a la flauta, pero no se sabe con seguridad. Igual que en la actualidad, parecería que en la antigüedad era habitual que el que tocaba un instrumento con lengüeta llevara consigo una cantidad de lengüetas en una caja (gr. glōssokomon). Se trataba, en efecto, de una caja para lengüetas y no una “bolsa”, como dice °vrv2, lo que Judas usaba como alcancía (Jn. 12.6; 13.29).

La flauta se usaba en las procesiones festivas (Is. 30.29), en momentos de regocijo nacional (1 R. 1.40), y también en los funerales (Mt. 9.23). El hecho de que podía producir un sonido lastimero lo evidencia la alusión a dicho instrumento en Jer. 48.36.

2. “Flauta” es también la traducción del arm. marôqı̂ṯâ. Aparece únicamente en Dn. 3 (°vrv1, °ci, °bj “pifano”), y se deriva de la raíz šāraq, palabra onomatopéyica que significa “silbar” o “sisear”. El sonido de la mayoría de los tipos de flautas va acompañado de un silbido o siseo. Por lo tanto es una suposioón razonable el que el instrunento a que se hace referencia pertenece a esta clase.

3. Otra palabra heb. (˓ûḡāḇ) que se traduce “flauta” (“organo” en °vrv1) ocurre sólo cuatro veces en el AT. En Gn. 4.21 evidentemente constituye un término genérico que cubre todos los instrumentos de viento, así como la palabra paralela en este versículo, kinnôr, es el término general para todos los instrumentos de cuerda. En Job 30.31 aparece nuevamente en asociación con el kinnôr, y en Job 21.12 representa a la sección de los vientos en paralelo con los miembros de las familias de cuerdas y de percusión. La encontramos nuevamente en el Sal. 150.4 entre numerosos instrumentos de otros tipos. La LXX no ofrece ayuda en cuanto a la naturaleza de este instrumento, porque usa tres palabras diferentes. (En Gn. 4.21 kithara, ‘guitarra’; en los dos pasajes de Job psalmos, ‘salterio’; y en Sal. 150.4 organon, ‘órgano’.) La derivación de la palabra heb. es incierta. Algunos la han ligado con una raíz que significa “lujuriar”, “sentir afecto desmesurado”, aludiendo así a sus tonos sensuales o atrayentes; pero esto no es más que conjetura. No cabe duda de que tiene que ser algún tipo de flauta, o posiblemente un grupo de flautas.

(ii) La bocina. Esta palabra (heb. qeren) ocurre frecuentemente en el AT. Es cognado del gr. keras y el lat. cornu. Parece haberse usado en la época bíblica con dos fines: como recipiente para llevar aceite, y como una especie de trompeta. En este segundo sentido aparece en tres pasajes únicamente. En Jos. 6 se usa como sinónimo de šôfār (el heb. yôḇēl significa literalmente cuerno de carnero) en el relato de la captura de Jericó. En 1 Cr. 25.5 (cf. °bj, con nota) se enumera a los que David senaló para tocarla, y en Dn. 3 es uno de los instrumentos de la orquesta de Nabucodonosor. Las trompetas antiguas se hacían con cuernos de animales evidentemente. Posteriormente fueron imitados con metales.

(iii) La trompeta. La trompeta se menciona frecuentemente en la Biblia. Esta palabra se usa principalmente como traducción de dos vocablos heb. diferentes, šôfār y aṣōṣe. La LXX traduce uniformemente salpinx, palabra que también se usa en el NT.

El šôfār, cuerno largo con extremo retorcido, era la trompeta nacional de Israel. Se usaba en ocasiones militares y religiosas para reunir a la gente. El šôfār se sigue usando en las sinagogas judías en el día de hoy.

La aṣōrâ era una trompeta hecha, de plata batida. A. Moisés Dios le mandó que hiciese dos trompetas para reunir a la congregación, y para poner en movimiento al campamento. Nm. 10.1–10 contiene las instrucciones que Dios le dio a Moisés con respecto a las ocasiones en que debía hacer sonar la trompeta. Se trataba principalmente de un instrumento sagrado y no marcial.

En 2 S. 6.5 °vrv2 tiene “flauta” para el heb. mena˓an˓ı̂m, que aparece únicamente en este pasaje. Se usa juntamente con los címbalos (véase c. (ii) inf.), entre otros instrumentos que David y los hijos de Israel tocaban ante el Señor. La raíz de donde se deriva esta palabra significa “temblar”, “vibrar”, y es probable que fuese una especie de matraca. La LXX traduce kymbala, ‘cimbalos’, y por consiguiente es menos acertado que la Vg. sistra, ‘matracas’ (gr. seistron de seiō, ‘sacudir’, ‘mover adelante y atrás’). °vm traduce “sistros” y en el mg “castañuelas”; °nbe “sonajas”. Se han conservado ilustraciones de matracas o sonajas egipcias antiguas que consisten de un aro en forma de ovalo con una manija, al que se fijaban varillas con anillos sueltos que se golpeaban entre sí cuando se sacudía el instrumento.

c. Percusión

(i) Campanillas. Dos palabras heb. diferentes se traducen “campanillas”: pa˓amôn, de una raíz que significa ‘golpear’, aparece cuatro veces en Éxodo, con referencia a las campanillas de oro en las vestiduras de Aarón; la otra palabra, meṣillâ, se encuentra únicamente en Zac. 14.20. La LXX tiene jalinoi, ‘brida’. La palabra heb. viene de la misma raíz que la que se traduce “címbalos”, y probablemente se refiere a los discos o tazas metálicos que se fijan en las bridas de los caballos, ya sea como ornamento o con el fin de producir un tintineo.

(ii) Címbalos. Esta palabra viene del gr. kymbalon, que aparece una vez en el NT (1 Co. 13.1), y también en la LXX como traducción de los vocablos heb. meṣiltayim y ṣelṣelı̂m. kymbalon se deriva de kymbē, que significa fuente o plato ahuecado. Las dos palabras heb. derivan de la misma raíz, palabra onomatopéyica que significa zumbar o temblar. meṣiltayim parecería una forma posterior de esta palabra, que aparece unas doce veces en los libros de Crónicas, una vez en Esdras, y una en Nehemías. La forma más antigua ṣelṣelı̂m se encuentra en los Salmos y una vez en 2 Samuel. En el Sal. 150 se usa la palabra dos veces en un solo versículo con diferentes adjetivos. Se sabe que existían dos clases de címbalos en la antigüedad. Un tipo consistía en dos platos de metal de poca profundidad que se tenían uno en cada mano y se golpeaban entre sí. Los otros tenían forma de taza, y una de estas se tenía fija mientras que la otra se golpeaba netamente con ella. Se ha sugerido que en el Sal. 150 se hace alusión a los dos tipos de címbalos, pero esto es mera conjetura.

En todos los pasajes donde se mencionan címbalos se usan en ceremonias religiosas. El gr. kymbalon se usa en 1 S. 18.6 en la LXX, como traducción del heb. šālı̂š, que proviene de la raíz que significa “tres”. La Vg. traduce systrum, ‘sonaja’. Se ha sugerido que se trataba de un triángulo o un instrurnento de tres cuerdas, pero no hay ninguna seguridad en cuanto a lo que denotaba.

(iii) Pandero, tamboril, tamborín. Estas palabras se usan como traducción del heb. tōf (LXX tympanon). Este instrumento era una especie de tamborín que se sostenía y se golpeaba con la mano. Se usaba como acompañamiento para el canto y la danza (Ex. 15.20). Siempre se asocia en el AT con la alegría y el gozo, y aparece acompañando la alegría de los festejos (Is. 5.12), y el regocijo de las procesiones triunfales (1 S. 18.6).

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D.G.S., K.A.K.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico