Gen 42:27 abriendo uno .. en el m, vio su dinero
Luk 2:7 porque no había lugar para ellos en el m
10:34
Mesón (heb. mâlôn; gr. katáluma, «alojamiento» [literalmente, un lugar para aflojar las cargas a fin de descansar]; pandojéion, «posada» [de pas + déjomai, «recibir a todos»]). La palabra hebrea se aplica a cualquier lugar donde se pase la noche, tenga o no protección o abrigo, y se traduce por «mesón», «posada», «alojar», etc, (Gen 42:27; 43:21; Exo 4:24; Jos 4:3, 8; 2Ki 19:23; etc.). El mundo antiguo no conocía los hoteles en sentido moderno, y las casas de huéspedes diferían considerablemente de las de nuestros días. Los caravasares («palacios para caravanas», posadas para caravanas comunes en el Cercano Oriente) eran meros abrigos para las bestias y los hombres alrededor de un patio, que tenía un pozo o un manantial (fig 26). Si había habitaciones, éstas no tenían muebles; los viajeros dormían sobre sus propias esteras o ropas, y traían su comida. Algunos creen que el katáluma (Luk 2:7) era en realidad una habitación para huéspedes o aposento (como se lo tradujo en Mar 14:14 y Luk 22:11). Sin embargo, sólo la pandojéion (Luk 10:34) habría sido una verdadera casa de huéspedes. En el relato del buen samaritano, el término «mesón» es una traducción justificada.
Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico
ver POSADA
Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano
tip, CONS
ver, HOSPITALIDAD
vet, El albergue oriental no se parece mucho al hotel de los países occidentales. La hostelería no era tan necesaria en la antigüedad como en nuestros días. La hospitalidad (véase HOSPITALIDAD) era considerada como un deber, y los viajeros eran recibidos de buena voluntad (Ex. 2:20; Jue. 19:15-21; Hch. 28:7, etc.). El albergue público era tan sólo un refugio, destinado a la vez a las personas y a los animales. Probablemente se parecía a un caravanserrallo actual: estancias para los viajeros, lugar para guardar las mercancías, y cuadras que rodeaban un gran patio rectangular, cuyo centro estaba ocupado por un pozo. No había muebles; el viajero extendía su capa sobre el suelo, y se envolvía en su manto, que le servía de colchón y de cubierta. El mismo tenía que procurarse su comida y el alimento para sus animales. La presencia de un hotelero que vendiera víveres era algo muy inusitado en aquellos tiempos (Lc. 10:34, 35). En la antigüedad, sólo se menciona «un lugar para pasar la noche» (Gn. 42:27; 43:21; Ex. 4:24), o «un albergue de caminantes» (Jer. 9:2). La primera alusión a una casa más o menos organizada parece hallarse en Jer. 41:17: «Y se detuvieron (o «habitaron», RVR ’77) en la caravanera de Camaam (la cual está a un lado de Bet-lehem)» (V. M.). Lucas habla del mesón donde María y José no encontraron lugar (Lc. 2:7). El mismo término «kataluma» se vuelve a hallar en Mr. 14:14 y en Lc. 22:11: «¿Dónde está el aposento donde he de comer la pascua…?» El término de Lc. 10:34, «pandocheion», parece indicar una instalación más completa, donde un mesonero puede dar las provisiones necesarias y dar algunos cuidados.
Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado
En griego, pan·do·kjéi·on, que significa literalmente †œlugar que recibe (o acoge) a todos†, es decir, que da albergue a los viajeros y a sus animales. Es posible que los antiguos mesones del Oriente Medio tuvieran cierto parecido con los que se han construido allí en tiempos más recientes. Estos suelen constar de un patio cercado por un muro con una sola entrada. Adosadas al muro hay una serie de habitaciones sin muebles, construidas sobre una plataforma, a las que se accede por el patio interior y en las que los viajeros se alojan y dejan sus mercancías. Los animales permanecen en el patio, que suele tener un pozo en el centro. Los mesoneros de tiempos antiguos suministraban ciertas provisiones necesarias a los viajeros y cuidaban de las personas dejadas a su cargo, servicios por los que recibían una compensación. (Lu 10:33-35.)
Fuente: Diccionario de la Biblia
1. kataluma (katavluma, 2646), véase APOSENTO, Nº 2. 2.pandoqueion, o pandokeion (pandocei`on, 3829), lit.: lugar donde todos son recibidos (pas, todo; decomai, recibir). Denota una casa para recepción de extraños, un caravanserai, traducido «mesón» en Luk 10:34, en la parábola del buen samaritano. Allí se podía guardar el ganado y también las bestias de carga. Este término debe ser distinguido del Nº 1.¶ Cf. pandoqueus en el siguiente versículo, véase MESONERO.¶
Fuente: Diccionario Vine Nuevo testamento