MESEC

Mesec (heb. Meshek, «saco», «bolsa» o [el acto de] «sacar»). 1. Hijo de Jafet (Gen 10:2; 1Ch 1:5) y antepasado de un pueblo mencionado por Ezequiel junto con los descendientes de Tubal, otro hijo de Jafet (Eze 32:26; 38:2,3; 39:1). Aparecen como comerciantes de esclavos y de objetos de bronce en los mercados de Tiro (Eze 27:13). En Psa 120:5 se los menciona como aparentemente relacionados de algún modo con el pueblo de Cedar. Las inscripciones asirias los nombran desde el s XII a.C. como Mushku. También se refieren a Tabal, en quien se reconoce a Tubal. Los registros de Tiglat-pileser I (1113-1074 a.C.) y de Salmanasar III (859-824 a.C.) identifican a los Mushku como una nación ubicada en el norte de la Mesopotamia. De allí­ avanzaron a Frigia en el Asia Menor, y mientras estuvieron en esa región, bajo su rey Mita, pelearon contra Sargón II (s VIII a.C.). El último rey de Carquemis pidió en vano ayuda a Mita en su lucha contra los asirios. Después de gobernar el norte de Anatolia por un tiempo, los Mushku perdieron esa región, primero ante los cimerios y luego ante los lidios. Herodoto los llama Mosjoi, y a su nación hermana Tubal la llama Tibarenoi. Mapa IV, B-5. Bib.: Herodoto iii.94; vii.78; véase también P-NH vi.4; Estrabón xi.2.14-17. 2. Hijo de Sem (1Ch 1:17). Véise Mas.

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

nombre de dos personajes y de un pueblo. 1. Hijo de Jafet, Gn 10, 2; 1 Cro 1, 5. 2. Hijo de Aram, descendiente de Sem, 1 Cro 1, 17. 3. Generalmente asociado con Túbal, paí­ses del Asia Menor, Is 66, 21; comerciaban con Tiro esclavos y objetos de bronce, Ez 27, 13. M. formaba parte con Túbal del paí­s de ® Magog. Mesí­as, hebreo mashiah, griego Christós, el ungido. Este término es muy frecuente, sobre todo, en Samuel y en los Salmos. El término ungido se aplicaba, por ejemplo, a los sacerdotes, Lv 4, 3/5/16; 6, 15; 16, 32. Pero, ante todo, es un tí­tulo real, que poní­a a quien lo llevaba en relación directa con Dios: †œel ungido de Yahvéh†. En los libros de Samuel el ungido siempre designa al rey, Saúl, David, pero no en cuanto persona, sino en cuanto a la misión que se le encomendó, a la dignidad que ostenta; es Yahvéh quien unge al rey como caudillo de su heredad, de su pueblo de Israel, 1 S 10, 1; 15, 17; 24, 7; †œYo te he ungido rey de Israel†, le dice el profeta Natán a David, de parte de Dios, 2 S 12, 7. Por esto, en los Targum, versiones populares de las Escrituras en arameo, se usa la expresión †œrey mesí­as†. Esa relación directa del rey mesí­as con Dios se encuentra diáfana en el texto de Samuel: †œVive Yahvéh que sois reos de muerte por no haber velado sobre vuestro señor, el ungido de Yahvéh†, 1 S 26, 16. En los Salmos el rey, el ungido, es el hijo adoptivo de Yahvéh, cuyo reino no tendrá fin, cuyo poder llegará hasta los confines de la tierra; sumisión consiste en que haga triunfar la paz y la justicia, que sea el salvador de su pueblo. Aunque estas expresiones son comunes en otros pueblos respecto a sus soberanos, la diferencia del monarca israelita está en que es ungido por Yahvéh, lo que lo hace su vasallo, su lugarteniente suyo en este mundo. La profecí­a de Natán a David, basada en las palabras según las cuales no será David quien edifique el Templo, sino su hijo y sucesor Salomón, indica la alianza de Yahvéh con el linaje de David, que permanecerá en el trono de Israel, 2 S 7. Esta misma promesa mesiánica sobre la estirpe de daví­dica se expresa en Sal 2; 72 (71); 89 (89), 30-38; 110 (109); 132 (131), 11-12. Esto mantuvo la esperanza del pueblo en un futuro rey mesí­as, un rey particular, un último soberano que establecerí­a el reinado de Yahvéh en la tierra, de un liberador del pueblo de la opresión, esperanza guardada aun después de la desaparición del reino, vigente en ví­speras de la aparición de Jesús en este mundo y hasta hoy dí­a entre los judí­os.

Los cristianos vieron la realización de esta promesa en Jesús el ungido de Dios, traducido por la versión griega Septuaginta, como Christós. Este M., que no es un rey terrenal, pues viene a hablar del Reino de los Cielos, ya se vislumbra en las profecí­as, en la de Natán a David, según la cual será de su linaje; †œSaldrá un vástago del tronco de Jes醝, dice el profeta Isaí­as, que será lleno del espí­ritu profético, el espí­ritu de Yahvéh reposará sobre él, que hará reinar la justicia, que refleje la santidad de Yahvéh, y restablecerá la paz del paraí­so, Is 11, -1-9; en Jeremí­as se lee: †œsuscitaré a David un Germen justo †, Jr 23, 5-6; 33, 15-16; como David, el M. saldrá de Belén, de Efratá, †œla fecunda†, Mi 5, 1. Isaí­as lo llama Emmanuel, †œDios con nosotros†, Is 7, 14; Jeremí­as, Sidqenû, †œYahvéh justicia nuestra†, Jr 23, 6.

Los Evangelios y los primeros cristianos vieron estas profecí­as cumplidas en Jesús, quien es el Salvador, el Cristo o M., de la estirpe daví­dica, nacido en Belén, Mt 2, 1; Lc 2, 4-7; el Rey Pací­fico del que habla Za 9, 910; el Emmanuel anunciado por Isaí­as, el Hijo del hombre de origen celeste contemplado por el profeta Daniel en su visión, Dn 7. Pero la misma persona de Jesús y su misma vida las que lo muestran como el M., mas no un m. polí­tico, pues él repudió esta idea.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

(heb., meshekh, alto).
1. Un hijo de Jafet (Gen 10:2) asociado con Magog y Tubal que varios piensan que pudieron haber sido los progenitores de los rusos y otros pueblos eslavos.
2. Un nieto de Sem (1Ch 1:17); llamado Mas en Gen 10:23.
3. El pueblo descendiente del anterior, notables por su comercio de esclavos y bronce con Tiro (Eze 27:13) y mencionado en profecí­a (Ezequiel 38; 39).
4. Una tribu mencionada en el Psa 120:5 con (o probablemente en contraste con) las tiendas de Quedar. Probablemente el mismo que el inciso 3.

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

(Sacado). Nombre de personas del AT.

1. Hijo de Jafet (Gen 10:2; 1Cr 1:5). Se le atribuye ser padre de uno de los pueblos que habitaban al SE del mar Negro.

. Hijo de Sem (1Cr 1:17).

. Pueblo descendiente del #1, conocido también como los †œmoscos†, a los cuales menciona Herodoto como moradores del Cáucaso, al S del mar Negro. El uso del nombre en la Biblia es para aludir a un paí­s lejano y hostil. En ese sentido es utilizado en el Sal 120:5, junto con †¢Cedar. Entre los pueblos que comerciaban con Tiro se menciona a M. con †¢Javán y Tubal (Eze 27:13). En una profecí­a de Ezequiel se menciona a M. y Tubal como bajo la soberaní­a de †¢Gog (Eze 38:2-23).

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, PUEB BIOG HOMB HOAT

vet, = «posesión». (a) Pueblo descendiente de Jafet (Gn. 10:2). Vendí­a esclavos y utensilios de bronce en los mercados tirios (Ez. 27:13). Aliado de Tubal y aliado, o súbdito, de Gog, prí­ncipe de Ros, de Mesec y de Tubal (Ez. 32:26; 38:2, 3; 39:1). Mesec y Tubal aparecen juntos en las inscripciones asirias, como en la Biblia. En la época de Tiglat-pileser I (hacia el año 1115-1102 a.C.), y de Salmansar III (860-825), Musku, es decir Mesec, se hallaba al norte de Asiria, en los montes y en los confines de Tabal (Tubal) al oeste. Estos dos pueblos fueron poco a poco empujados hacia las cercaní­as del mar Negro. Herodoto los llama Moschoi y Tibarenoi; los sitúa en los montes del sureste del mar Negro (Herodoto 3:94; 7:78). Los Moschoi moraban entre los rí­os Phasis y Cyrus (Plinio, Histo. Nat. 6:4; Estrabón 11:2, 14-17). (b) Descendiente de Sem a través de Aram (1 Cr. 1:17); es el Mas que aparece en Gn. 10:23.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

1. Uno de los hijos que le nacieron a Jafet, hijo de Noé, después del Diluvio. (Gé 10:2; 1Cr 1:5.) Debieron recibir ese nombre sus descendientes y la tierra donde se establecieron. El profeta Ezequiel a menudo menciona juntos a Mesec y Tubal, e indica que estaban al N. de Palestina. Se dice que exportaban esclavos y cobre a Tiro, que eran pueblos belicosos y que eran aliados o súbditos de †˜Gog de Magog†™ en su cruel campaña profetizada contra †œlas montañas de Israel†. (Eze 27:13; 32:26; 38:2, 3; 39:1, 2; véase GOG núm. 2.) Se menciona a Mesec aparte de Tubal en el Salmo 120:5, donde debe representar a un pueblo agresivo y bárbaro.
Unos mil años después del Diluvio comienzan las referencias a los musku en las inscripciones asirias. Los musku eran un pueblo que ocupaba una zona de Asia Menor al O. de Asiria. Los emperadores asirios Tiglat-piléser I, Tukulti-Ninurta II, Asurnasirpal II y Sargón hacen referencia a conflictos con ellos. El hecho de que a los musku se les mencione con frecuencia junto a los tabali (probablemente el Tubal de la Biblia) apoya la opinión de que el nombre musku se deriva de Mesec. Posteriormente Heródoto (Historia, III, 94) se refiere a los moscos y los tibarenos del mismo modo.
Muchos eruditos indican que ha de relacionarse a los musku con los frigios, que al parecer dominaron gran parte del centro y el occidente de Asia Menor hacia el fin del II milenio a. E.C. Algunos investigadores creen que el rey Mita de Muski, mencionado por el emperador asirio Sargón, es el rey Midas de Frigia, que gobernó durante el mismo perí­odo según la tradición griega.

2. El texto masorético incluye a Mesec en la descendencia de Sem en 1 Crónicas 1:17. Sin embargo, la genealogí­a correspondiente registrada en Génesis 10:23 lee †œMas†.

Fuente: Diccionario de la Biblia

(TM mešeḵ; LXX Mosoch). Uno de los hijos de Jafet (Gn. 10.2 = 1 Cr. 1.5) que está asociado aquí y en otros lugares con Tubal. En 1 Cr. 1.17 se lo menciona como descendiente de Sem por Aram, mientras que en el pasaje paralelo (Gn. 10.23) aparece como Mas. Uno de estos es, presumiblemente, un error, y Mosoch en la LXX de Gn. 10.23 sugiere que la k se ha perdido allí. El casamiento de personas de distintos orígenes que sugiere la presencia del mismo nombre entre los hijos de Jafet y de Sem, que supondría un punto de vista así, no sería imposible (* Naciones, Tabla de las). Los descendientes de Mesec se mencionan posteriormente como exportadores de esclavos y de cobre (Ez. 27.13), como pueblo guerrero que amenazaba desde el N (Ez. 32.26; 38.2–3; 39.1), y como típicos de una sociedad salvaje (Sal. 120.5). La íntima asociación de este nombre con Tubal hace que sea probable su identificación con el pueblo que a menudo se menciona juntamente como Tabâl y Musku o Mušku en inscripciones as., y Tibarēnoi y Mosjoi en Herodoto. Los muš-ka-a-ia se mencionan por vez primera en los anales de Tiglat-pileser I (ca. 1100 a.C.) dedicados a reunir un ejército de 20.000 hombres en el N, y puede ser que ya estuvieran en la zona al SE del mar Negro un siglo antes cuando se hace referencia en los textos hititas a un tal Mitas en esa misma región, ya que su nombre es parecido al del rey de los muški en el ss. VIII. Se los menciona en los anales de Tukulti-ninurta II y Asurnasirpal II en el ss. IX, y en los de Sargón en el VIII. Este rey indica que el nombre del gobernante era mi-ta-a, que según algunos entendidos sería equivalente a Midas de Frigia, el reino que sucedió a los hititas en el Asia Menor, y que los muski, por lo tanto, han de ser equiparados con los frigios. El gentilicio musku no se menciona en las inscripciones aqueménidas, pero Herodoto dice que los mosjoi corresponden a la satrapía 19ª de Dario (3.94), y que formaban un contingente en el ejército de Jerjes (7.78). Esta información lleva a la conclusión de que Mesec se refiere, quizás, a un pueblo que hablaba una lengua indoeuropea que penetró el Cercano Oriente desde las estepas del N, y se impusieron como gobernantes sobre los pobladores de la región en la Anatolia oriental.

Bibliografía. B. M. Ubach, “Mesek”, °EBDM, t(t). V, cols. 78–79; G. von Rad, El libro del Génesis, 1977, pp. 178ss.

S. Parpola, Neo-Assyrian Toponyms, 1970, pp. 252–253; R. D. Barnett, CAH³, 1975, pp. 417–442; J. N. Postgate, Iraq 35, 1973, pp. 21–34.

T.C.M.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico