Partidarios de una línea intransigente contra los obispos que, cediendo ante el arrianismo, deseaban ahora volver a la plena comunión con la Iglesia. Su postura durísima les llevó incluso a romper la comunión con Dámaso, obispo de Roma. Comunidades de este tipo se formaron en España, Italia, Alemania y Oriente dando lugar al denominado cisma luciferino o luciferiano. El nombre derivaba de que su postura se decía originada en la de Lucifer de Cagliari, pero es más que dudoso que él capitaneara estos grupos aunque sí los precedió ideológicamente. Ver Arrio; Dámaso; Lucifer de Cagliari.
VIDAL MANZANARES, César, Diccionario de Patrística, Verbo Divino, Madrid, 1992
Fuente: Diccionario de Patrística