JOSE DE ARIMATEA

Rico funcionario judí­o que se encargó, junto con †¢Nicodemo, de enterrar el cuerpo del Señor Jesús, aportando para ello un sepulcro que habí­a mandado hacer para sí­ mismo. J. de A. era miembro de Sanedrí­n pero se habí­a hecho †œdiscí­pulo de Jesús†, aunque †œsecretamente por miedo de los judí­os†. Era un †œvarón bueno y justo…. que también esperaba el reino de Dios† por lo cual †œno habí­a consentido en el acuerdo ni en los hechos de ellos†. Fue más fuerte en él el amor que el temor y tras la muerte del Señor Jesús fue a Pilato y pidió su cuerpo. Pilato se lo concedió y J. de A. †œcompró una sábana†, envolvió con ella al Señor Jesús, y lo puso en su propio sepulcro que quedaba cerca del lugar de la crucifixión (Mat 27:57-60; Mar 15:43-46; Luc 23:50-53; Jua 19:38-42). Esta acción de J. de A. y †¢Nicodemo cumplió la profecí­a de Isa 53:9, (†œmas con los ricos fue en su muerte†).

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, BIOG FUNC HOMB HONT

ver, GENEALOGíA (de Jesús), EGIPTO (Estancia israelita), TIPO, TIPOLOGíA, JESUCRISTO, MARíA, MATíAS

vet, = «que él (Dios) añada». (Heb.: «Yãsaph».). Miembro del sanedrí­n, hombre rico y distinguido, esperaba el reino de Dios (Mr. 15:43). No habí­a consentido en la sentencia de muerte pronunciada contra Jesús, por cuanto era discí­pulo secreto de El, al igual que Nicodemo, el único otro miembro del concilio que tení­a fe en El. Valerosamente, José reclamó el cuerpo de Jesús a Pilato, y lo sepultó en su propio sepulcro nuevo, cumpliendo así­ la profecí­a de Is. 53:19 (Mt. 27:57-60; Lc. 23:50-53; Jn. 19:38).

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

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Personaje de Jerusalén de cierta dignidad social y riqueza (Mt. 27.60). Era miembro del Sanedrí­n (72 jueces) (Mc. 15.43), justo y recto (Lc. 23.50).

Tení­a un sepulcro preparado excavado en roca en Jerusalén, lo que indicaba cierta riqueza o significación social. Fue discí­pulo oculto de Jesús y dio la cara para reclamar a Pilato su cuerpo y para enterrarlo en su propia sepultura.

Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogí­a Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006

Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa

Un judío de *Arimatea, “varón bueno y justo … que también esperaba el reino de Dios” (Lc. 23.50–51), “que era discípulo de Jesús, pero secretamente por miedo a los judíos” (Jn. 19.38), y miembro del sanedrín, que no había votado a favor de la muerte de Jesús. Era rico, y después de haber pedido a Pilato que se le permitiera retirar el cuerpo de Jesús, lo envolvió en una sábana limpia, y lo puso en un sepulcro nuevo de su propiedad, que había hecho labrar en una peña (Mt. 27.57–60). (En esto Mateo quizás ve el cumplimiento de Is. 53.9.) En una leyenda, que aparece por primera vez en Guillermo de Malmesbury, José es enviado por Felipe de las Galias a la Gran Bretaña en 63 d.C., donde fundó el primer asentamiento cristiano en dicho país, lugar que después llegó a ser la ciudad de Glastonbury. No hay referencias a este relato en Gildas ni en Beda. J. A. Robinson, en su Two Glastonbury Legends, 1926, dice que estos pasajes son interpolaciones. Una leyenda aun posterior, compuesta por Walter Map en 1200, dice que José llevo el santo grial a Inglaterra.

J.W.M.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico