ENTRE, EN MEDIO

A. Preposición qereb (br,q, , 7130), «entre». Esta preposición se usa por primera vez en Génesis: «Abram habitó en la tierra de Canaán, y Lot habitó en [entre] las ciudades de la llanura y fue instalando sus tiendas hasta Sodoma» (13.12). El término se usa 222 veces en el Antiguo Testamento; predomina en el Pentateuco (particularmente en Deuteronomio) pero no es muy frecuente en los libros históricos (excepto los primeros libros, Josué y Jueces). En los libros poéticos, qereb se usa más a menudo en el libro de Salmos. Aparece una sola vez en Job y tres en Proverbios. Es bastante frecuente en los libros proféticos. B. Nombre qereb (br,q, , 7130), «entrañas; en medio». Como nombre, este vocablo se relaciona con la raí­z acádica qarab, que significa «en medio». En el hebreo de la Mishnah y en el moderno, qereb generalmente quiere decir «en medio» en vez de «lo interior» o «entrañas». Un uso idiomático de qereb denota una parte interior del cuerpo de donde provienen la risa (Gen 18:12) y los pensamientos (Jer 4:14). La Biblia limita otro uso idiomático, que significa «entrañas», a los animales: «No comeréis del cordero nada crudo, ni cocido en agua; sino asado al fuego, con su cabeza, sus piernas y sus entrañas» (Exo 12:9). El nombre se aproxima al uso preposicional con el significado de «en medio» o «en». Puede estar alguna cosa o persona «en medio de» un lugar: «Quizás haya cincuenta justos dentro de [qereb] la ciudad; ¿la destruirás con todo y no perdonarás el lugar por causa de los cincuenta justos que estén dentro de ella?» (Gen 18:24 rva). O bien puede estar en medio de la gente: «Samuel tomó el cuerno del aceite, y lo ungió en medio de [qereb] sus hermanos; y desde aquel dí­a en adelante el Espí­ritu de Jehová vino sobre David» (1Sa 16:13). Se dice que Dios está en medio de la tierra (Exo 8:22), de la ciudad de Dios (Psa 46:4) y de Israel (Num 11:20). Aun cuando está próximo a su pueblo, Dios permanece santo: «Regocí­jate y canta, oh moradora de Sion; porque grande es en medio de ti el Santo de Israel» (Isa 12:6; cf. Hos 11:9). El uso idiomático de qereb en el Salmo 103.1 («Bendice, alma mí­a, a Jehová, y bendiga todo mi ser su santo nombre») es más difí­cil de discernir porque el nombre está en plural. Tal vez sea mejor interpretar «todo mi ser» como una referencia a la totalidad del ser del salmista, en lugar del interior de su cuerpo [p. ej. «entrañas» rv]. La Septuaginta brinda las siguientes traducciones en griego de qereb: kardia, «corazón [como el centro de la vida fí­sica, espiritual y mental]» o «corazón [en sentido figurado, interior o central]»; koilia «cavidad del cuerpo, barriga»; y mesos, «medio» o «en medio de». tawek (Jw<,T; , 8432), "en medio; entre; medio; centro". Este vocablo, que también figura en ugarí­tico, aparece unas 418 veces en el hebreo bí­blico en todos los perí­odos. Tawek indica la parte de cualquier espacio, lugar, número de personas, cosas o lí­neas que no se ubica en las márgenes o extremos. Este es el énfasis en Gen 9:21 "Y bebió [Noé] del vino, y se embriagó, y estaba descubierto en medio de su tienda". En muchos contextos el término significa "entre" y no necesariamente en el medio: "Entonces levantó la cabeza del jefe de los coperos y la cabeza del jefe de los panaderos, en medio de ["entre"] sus servidores" (Gen 40:20 rva). En Exo 14:29 tawek se usa como una extensión de "a través de": "Los hijos de Israel caminaron en seco por en medio del mar" (rva). La idea de "dentro de" puede enfatizarse con añadir vocablos como me>éí†m, «barriga, entrañas», o lev, «corazón»: «Mi corazón fue como cera, derritiéndose en medio de mis entrañas» (Psa 22:14). El término a veces significa sencillamente «en» con el sentido de «mezclar»: «Y batieron a martillo láminas de oro, y las cortaron en hilos para entretejerlas con la tela azul, púrpura y escarlata y el lino fino» (Exo 39:3 lba). Tawek puede significar «medio» cuando se aplica a un objeto o a una persona que se ubica entre otros dos: «Hicieron también campanillas de oro puro, y pusieron campanillas entre las granadas en las orillas del manto, alrededor, entre las granadas» (Exo 39:25). Aunque el sentido es igual, la traducción tiene que ser diferente en Jdg 15:4 «Y Sansón fue y capturó trescientas zorras, tomó antorchas, juntó las zorras cola con cola y puso una antorcha en medio de cada dos colas» (lba). Tal vez el mismo significado se halle la primera vez en que se usa el término: «Entonces dijo Dios: «Haya una bóveda en medio de las aguas, para que separe las aguas de las aguas»» (Gen 1:6 rva). En Num 35:5 el vocablo tiene la acepción de «en el centro»: «Mediréis también afuera de la ciudad, al lado oriental dos mil codos, al lado sur dos mil codos, al lado occidental dos mil codos, y al lado norte dos mil codos, con la ciudad en el centro» (lba). En otros pasajes, este vocablo significa una hipotética lí­nea central que divide a algo en dos partes iguales: «Tomó todos estos animales, los partió por la mitad y puso cada mitad una frente a otra» (Gen 15:10; cf. Eze 15:4). En algunos casos tawek se usa como nombre, con el significado de «el centro de un lugar u objeto»: «Sejón, rey de los amorreos, †¦ reinaba desde Aroer, que está en la ribera del rí­o Arnón, y desde el centro del valle» (Jos 12:2 rva). El vocablo aparece únicamente 7 veces sin un antecedente preposicional. beí†n (ºyBe , 996), «entre; en medio; dentro; en el intervalo de». Un cognado de este vocablo se halla en arábigo, arameo y etiópico. Hay alrededor de 375 casos del término durante todos los perí­odos del hebreo bí­blico. Los estudios acreditan que la forma pura del vocablo es bayin, aunque esta nunca aparece en el hebreo de la Biblia. El término casi siempre (excepto 1Sa 17:4, 23) es una presuposición que significa «en el intervalo» o «entre». Puede representar un «espacio intermedio» en general: «Esto ha de ser para ti como una señal sobre tu mano y como un memorial entre tus ojos» (Exo 13:9 rva). A veces el término indica «en medio» en el sentido de «estar muy próximo»: «Dice el perezoso: «Â¡Hay un león en el camino! ¡Hay un león en medio de las calles!»» (Pro 26:13 rva). En otros casos, beí†n significa «entre» en relación con repartir: «¿Negociarán por él [leviatán] los grupos de pescadores? ¿Se lo repartirán entre sí­ los mercaderes?» (Job 41:6 rva). En Job 34:37, la palabra significa «en medio de» con el sentido de «uno entre muchos»: «Porque a su pecado añade la rebelión; aplaude en medio de nosotros» (rva). El espacio entre dos objetos se indica de varias maneras. En primer lugar, repitiendo beí†n antes de cada objeto: «Y separó Dios la luz de las tinieblas [lit., «entre la luz y entre las tinieblas»]» (Gen 1:4); o sea, puso un intervalo o espacio entre cada uno. En otras ocasiones, con menor frecuencia, este concepto se comunica poniendo a beí†n delante del primer objeto y le delante del segundo: «Haya una bóveda en medio [beí†n] de las aguas, para que separe las aguas de [le] las aguas» (Gen 1:6 rva). Una tercera modalidad coloca beí†n antes del primer objeto junto con la expresión «con referencia a» que precede al segundo objeto (Jl 2.17), o bien con beí†n delante del primer objeto y la frase «con referencia al intervalo de» antes del segundo objeto (Isa 59:2). En muchos pasajes, beí†n se usa con el sentido de «hacer una distinción entre»: «Haya lumbreras en la bóveda del cielo para distinguir [beí†n] el dí­a de la noche» (Gen 1:14 rva). A veces beí†n implica una relación metafórica. Por ejemplo: «Esta es la señal del pacto que yo establezco entre mí­ y vosotros y todo ser viviente» (Gen 9:12). El pacto es una relación de contrato. En forma similar, la Biblia habla de un juramento (Gen 26:28) y de la buena voluntad (Pro 14:9) que llena el «espacio» metafórico entre las dos partes. El vocablo se usa para denotar un «intervalo de dí­as» o «un perí­odo»: «Lo que se preparaba †¦ cada diez dí­as [literalmente, «a intervalos de diez dí­as»], odres de vino en abundancia» (Neh 5:18). En su modalidad dual, beí†n representa el «espacio entre dos ejércitos»: «Salió entonces del campamento de los filisteos un paladí­n [literalmente, «un hombre entre dos ejércitos»], el cual se llamaba Goliat» (1Sa 17:4). En tiempos antiguos, una batalla, o toda una guerra, podí­a decidirse a través de la lucha entre dos campeones.

Fuente: Diccionario Vine Antiguo Testamento