Edfu, ubicada sobre el lado occidental del Nilo, a mitad del camino entre Luxor y Asuán, era la capital del segundo distrito del alto Egipto. Los griegos la llamaban Apolonópolis Magna, comparando así al dios Horus de Edfu con Apolo. Auguste Mariette descubrió Edfu en 1860 y desenterró el templo de Horus que es el monumento más perfactamente preservado del mundo antiguo. Fue empezado por Tolomeo III, Evérgetes, en el 237 a. de J.C. y no fue completado hasta el 57 a. de J.C. Sus torres se levantan a una altura de 34 mts. y las paredes encierran un espacio de 137 por 37 mts. El frente del propileo es de 77 mts. de altura. Antiguos templos habían sido edificados en Edfu por los faraones Seti I, Ramesés IV, pero no han quedado remanentes.
Horus, el dios de Edfu, está representado en los monumentos de Egipto por un disco solar alado. La leyenda dice que él fue auxiliado en su guerra con el dios Seth y sus seguidores por hombres que conocieron el arte de trabajar el metal. La leyenda parece reflejar un relato de una tribu de usuarios primitivos de implementos y armas de piedra que fueron derrotados por pueblos que habían aprendido a usar el metal.
BIBLIOGRAFIA: Henri Henne, Octave Guerade, Maurice Alliot, Rapport sur les fouilles de Tell Edfou (1921–22), Impr. d l†™Institute francaise d†™archeologie orientale, Cairo, 1924.
Fuente: Diccionario Bíblico Arqueológico