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Sacerdotes de los celtas del Norte que tenían amplios poderes para dirigir los grupos sociales en sus correrías de saqueo y en los cultos a los dioses naturales sobre todo en los sacrificios que también solían ser humanos.
El druidismo es el sistema de creencias supersticiosas sobre los mitos de la naturaleza y bajo la inspiración de esas figuras sacerdotales y guerreras que eran los druidas.
Algunas sectas naturalistas que recientemente han surgido con este nombre nada tienen que ver con los ritos antiguos, prohibidos ya en el Imperio romano y proscritos desde hace un milenio por el cristianismo. Pero se atribuyen poderes mágicos y adivinatorios y se divulgan por el Norte de Europa y algo por Norteamérica.
Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006
Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa