Parte de la vestidura tanto de hombres como de mujeres. En hebreo hay varias palabras que se traducen como c. en castellano. La más usual se refiere al c. corriente, que servía para ceñir el vestido interior y el exterior a la cintura. No se hacía lo mismo con la otra pieza, el manto. El c. que utilizaba †¢Elías era, en realidad, muy ancho, casi como un delantal (2Re 1:8), así como el de Juan el Bautista (Mat 3:4). Ambos eran de cuero. Dios usó como figura †œun c. de lino† que Jeremías debió esconder debajo de una peña en el †¢éufrates (Jer 13:1-7). Ese tipo de c. era considerado como valioso. El c. podía ser de la misma tela que el vestido, o de cuero, o de lana. Sólo en Daniel y Apocalipsis se mencionan c. de oro (Dan 10:5; Apo 1:13; Apo 15:6).
La expresión †œceñir los lomos† significa tomar el ruedo del vestido y amarrarlo a la cintura con el c. para estar preparado para la acción, ya sea viajar o para trabajar (Exo 12:11; 2Re 4:29; 2Re 9:1). También se consideraba el uso del c. como señal de que el niño había llegado a ser hombre, porque podía usar armas. El c. se utilizaba para llevar dinero (a veces escondido) o en una bolsa pequeña que también servía para guardar algunos alimentos. Por eso el Señor Jesús dijo a sus discípulos que no se proveyeran †œde oro, ni plata, ni cobre en vuestros c.† (Mat 10:9). En el c. se llevaban armas (2Sa 20:8). El espacio entre el borde de la falda y el c. podía utilizarse como recipiente para transportar granos. Bastaba tomar la falda por el ruedo y levantarla. A eso se refiere la expresión †œdad y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo† (Luc 6:38). †¢Armadura y armas.
Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano
Estas palabras cubren varios términos heb. y varias prendas de vestir. El término ˒aḇnēṭ se aplica al cinturón ceremonial, especialmente el que llevaban el sumo sacerdote y sus asociados, y que se hacía de lino bordado en azul, púrpura, y escarlata (Ex. 28.4, 39–40; 29.9; 39.29; Lv. 8.7, 13; 16.4), aunque también lo llevaban otros altos dignatarios (Is. 22.21, “talabarte”). En Ex. 28.8, 27–28, etc. el “cinto de obra primorosa” es ḥēšeḇ, “artefacto”, de oro, azul, púrpura, escarlata, y lino fino, aparentemente un cinto muy trabajado para el efod (* Vestido, d). El término ˒ēzôr generalmente significa “taparrabo”. Un tosco cinturón de cuero caracterizaba al profeta Elías (2 R. 1.8) y a su contraparte en el NT, Juan el Bautista (Mt. 3.4; Mr. 1.6).
Dios ordenó a Jeremías (13.1–11) que se comprara un cinto de lino que luego se pudrió, como símbolo de que la corrupta Judá no tenía ningún valor.
Siglos después, Agabo se ató con el cinturón de Pablo como símbolo del cautiverio que sufriría el apóstol (Hch. 21.11). Además de simbolizar el avance de las tropas asirias con cintos bien ajustados (Is. 5.27; cf.
ḥaḡôr, ḥaḡôra significa cinto, pretina o faja propiamente dicha. A menudo dichos cinturones eran muy ornamentados y valiosos, incluyendo, sin duda, los que se vendían en Pr. 31.24 y pertenecientes a las damas opulentas en Is. 3.24; cf. Dn. 10.5; Ap. 1.13; 15.6. Los llevaban los guerreros para sujetar la espada en su vaina (2 S. 20.8; cf. 1 R. 2.5 y el heb. de 2 R. 3.21; cf. ANEP, fig(s). 173–174), y pueden haber sido parte de regalos y recompensas (1 S. 18.4; 2 S. 18.11). En el trabajo, la gente generalmente recogía sus vestidos dentro de la faja o cinto, como se hace todavía en el oriente.
La palabra mēzah, ‘cinto’ o ‘faja’, aparece en Sal. 109.19; este término y ˒aḇnēṭ quizás podrían relacionarse con las palabras
Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.
Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico