La capital del antiguo imperio heteo estaba ubicada a 145 kms. al oriente de la moderna Ankara, en la gran curva del río Halys. Las ruinas de la antigua Hattusas, la moderna Boghazkoy, fueron descubiertas por el francés Charles Felix Marie Texier a principios del siglo XIX y publicadas en su Description of Asia Minor (París, 1839). En ese tiempo la existencia del imperio heteo en Asia Menor no se sospechaba. Durante las décadas siguientes, sin embargo, William Wright, un misionero a Damasco y A. H. Sayce, de Oxford, sugirieron que un número de monumentos que habían salido a luz en Siria y Asia Menor eran de origen heteo y que los heteos habían gobernado una vez un imperio poderoso.
Las ruinas de Boghazkoy revelan que fue una inmensa ciudad con fuertes fortificaciones. Sus murallas tenían una serie de torres horadadas con puertas ornamentadas con relieves labrados extraordinariamente. El visitante podría descubrir la forma cruda de las esfinges, los leones labrados o un guerrero heteo—todos en cuclillas, estilo grave que ha venido a caracterizar el arte heteo.
En 1906 Hugo Winckler de Berlín inició la excavación de Boghazkoy. Los estudios heteos avanzaron significativamente por el descubrimiento de una colección de tabletas cuneiformes con inscripciones en muchos idiomas, incluyendo uno que se comprobó era el idioma de los antiguos heteos. El desciframiento del heteo fue un trabajo combinado de muchos eruditos, con la mayor contribución provista por Friederich Hrozny, un erudito checoeslovaco.
Los documentos descubiertos en Boghazkoy incluyen mitos y leyendas heteos, anales históricos y un código de leyes. Este último realmente forma un cuerpo de precedentes legales, que sirvió como guía para los jueces locales. Los eruditos estaban interesados particularmente en el descubrimiento de una copia del tratado de paz entre el rey heteo Hattusilis III ( ca. 1275–1250 a. de J.C. ) y el faraón egipcio Ramesés II, el más antiguo de los tratados conocido por los estudiantes de la historia antigua. También existe un texto egipcio del mismo tratado.
Con breves interrupciones durante los años de guerra, la Sociedad Oriental Alemana ha continuado excavaciones en Boghazkoy hasta el presente.
Véase también HETEOS.
BIBLIOGRAFIA: Hugo Winckler and P. Puchstein, †œExcavations at Boghaz-keui in the Summer of 1907†, Smithsonian Institute Annual Report. 1908, Washington, 1909. Hans G. Guterbock, †œParticipation in the excavation of Boghazkoy, Turkey, ancient Hattusa, capital of the Hittite Empire†, Yearbook, 1933, págs. 271–276, American Philosophical Society, Philadelphia, 1933. Kurt Bittel, Bogaskoy die Kleinfunde der Grabungen, 1906–12, J. C. Heinrichs, Leipzig, 1937. Kurt Bittel and Hans G. Gutterbock, Bogazkoy: Neue untersuchungen in der hethischen hauptstadt, Verlag der Akademie der wissenschaften, Berlin, 1935.
Fuente: Diccionario Bíblico Arqueológico