La basílica era uno de los edificios que comúnmente rodeaban el foro en las ciudades del imperio romano. Era una estructura rectangular dividida por columnas en una nave y 2 alas laterales. En un extremo estaba el ábside (o nicho) redondeado. La basílica romana era usada como corte de justicia y centro administrativo. El diseño influyó en la arquitectura cristiana en sus comienzos y algunas basílicas fueron en realidad usadas para servicios religiosos.
Fuente: Diccionario Bíblico Arqueológico