ANTIFEMINISMO

(-> Eva, mujer, patriarcalismo). Las cartas pastorales, escritas por un hombre de Iglesia, que asume la tradición de Pablo para justificar un orden eclesial ajustado a las nuevas condiciones sociales, han elaborado un pensamiento que podemos llamar antifeminista. Lo hacen básicamente por reacción: a los cristianos les han acusado de perturbar el buen orden social, fundado en la división de funciones y espacios: la mujer en la casa, los hombres en la vida pública. Las primeras iglesias cristianas, al menos en la lí­nea de Pablo, habí­an roto ese modelo, juntando a varones y mujeres en un mismo espacio eclesial, con unas mismas funciones y tareas. Por esa razón, ellas empezaron a verse como un peligro para la estruc tura social del mundo helenista, siendo criticadas por ello. Pues bien, tomando el nombre y autoridad de Pablo, algunos cristianos han querido hacer que las iglesias respeten el modelo social del entorno. Esa fue posiblemente una reacción que se fundaba en la «prudencia»: los «buenos» obispos y/o presbí­teros patriarcales que fueron tomando la dirección de las comunidades tuvieron quizá miedo de la libertad de las mujeres y quisieron oponerse a sus pretensiones (cf. 2 Tim 3,6-7). En ese contexto surgió una palabra que ha tenido un gran influjo en toda la historia cristiana: «Las mujeres callen en la Iglesia» (1 Tim 2,11-15; cf. 1 Cor 14,25). Ellas aparecen como sexo débil y pecador: han pervertido a Adán; por eso están condenadas al silencio comunitario, sometiéndose a sus maridos, que aparecen como portadores de la palabra de Dios para ellas. En esta lí­nea se sitúa la glosa de 1 Cor 14,23-36. A pesar de ello, las cartas pastorales reconocen la existencia de un orden de viudas* que sirven en la Iglesia, aunque reaccionan ante ellas a la defensiva: han de ser mayores de sesenta años, bien probadas; las más jóvenes han de casarse de nuevo, para no dar escándalo en la Iglesia y fuera de ella (1 Tim 5,3-16).

PIKAZA, Javier, Diccionario de la Biblia. Historia y Palabra, Verbo Divino, Navarra 2007

Fuente: Diccionario de la Biblia Historia y Palabra