Alas de aves (Deu 32:11; Job 39:13, Job 39:26; Psa 55:6), alas de los querubines (1Ki 6:24) o seres vivientes (Eze 1:5-25; Rev 4:8) y alas figuradas (Psa 17:8; Psa 18:10; Psa 55:6; Psa 68:13; Psa 91:4; Psa 139:9; Pro 23:5; Isa 40:31; Mal 4:2; Mat 23:37).
Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano
tip, ANGE TIPO La Biblia menciona con frecuencia las alas, especialmente en el libro de los Salmos, donde las citas tienen un bellísimo contenido poético (Sal. 17:8; 18:10; 55:6; 68:13). Las alas del águila son el símbolo de la fuerza (Is. 40:31), y se compara la protección que Jehová da a los suyos, con la que el águila da a sus polluelos para defenderlos de los peligros (Sal. 17:8; 36:7; 57:1). Los querubines del arca tenían alas (Ex. 8:6-7; 1 Cr. 28:18). Los serafines que vio Isaías (Is. 6:2) en su visión tenían seis alas: con dos cubrían sus rostros, con dos cubrían los pies y con las otras dos volaban. Estos seres misteriosos adoraban a Dios y clamaban en voz alta su gloria y majestad. Cuando Jesús lloró sobre Jerusalén a causa de la suerte que esperaba a sus habitantes en los acontecimientos futuros relativos a su destrucción, compara la protección que El quiso darles, con el refugio que brinda la gallina a sus polluelos cuando están ante el peligro (Mt. 23:37; Lc. 13:34). En el Apocalipsis, la mujer que representa al pueblo de Dios recibe «dos alas de la gran águila» para que huya de la serpiente que encarna al Diablo (Ap. 12:14). Dios brinda a los suyos protección a la sombra de sus alas y les ofrece los medios para escapar del peligro mortal de las asechanzas del maligno; son algunos de los significados de las alas en la Biblia.
Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado