Acacia (heb. shittâh [plural, shittîm]). Cualquiera de varias especies del género Acacia y la familia Mimosa que crecen en las tierras bíblicas. Puede sobrevivir en regiones áridas donde muy pocas plantas logran subsistir. En el desierto, las acacias son pequeñas, retorcidas y estropeadas por la intemperie, pero en condiciones favorables el árbol puede alcanzar una altura de 4 a 7 m. Sus ramas tienen espinas blancas, fuertes y delgadas, y la fruta es una vaina angosta y curvada. La madera del tronco es dura, de pequeño y durable, 5. Una acacia en En-gadi, Palestina. 15 muy apreciada en la fabricación de muebles (madera que se usó en la construcción del tabernáculo y sus muebles; Exo_25-27; 30:37; etc.; fig 5). El plural hebreo se suele transliterar Sitim* para designar a varias localidades palestinas. Bib.: PB 24-26.
Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico
Mimosa Nilotica Linn. Sittim, sethim, palabra hebrea de origen egipcio. írbol de las mimosáceas, de madera dura e incorruptible, flores en racimo perfumadas, fruto en legumbre. Muy abundante en Egipto en diversas variedades, de una de las cuales se extrae la goma arábiga Is 41, 17. Esta madera se empleó en la hechura del tabernáculo y otros objetos sagrados Ex 25, 27-28. ® Sittim.
Diccionario Bíblico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003
Fuente: Diccionario Bíblico Digital
ver PLANTAS
Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano
írbol cuya madera (en heb. sitim) fue utilizada para la construcción del †¢tabernáculo en el desierto (Exo 25:5, Exo 25:10, Exo 25:13, Exo 25:23). Existen diversas variedades de a. La más abundante en las regiones desérticas de Palestina y la península del Sinaí es algo espinosa, con hojas pequeñas y unas florecillas amarillas que se dan en racimos, pero su tronco no es muy ancho, lo cual hace difícil creer que fuera ésta la utilizada en la construcción del mobiliario del tabernáculo. Por eso una de las preguntas retóricas que hacían los rabinos era: †œ¿De dónde en el desierto fueron nuestros padres capaces de obtener madera de acacia?† Existe, sin embargo, una variedad, la acacia albida, que crece en regiones tropicales y subtropicales, no de mucha altura pero sí con un tronco grueso, que produce una madera de bastante dureza, pero liviana. Además, no absorbía humedad y no era muy atacada por insectos, por lo cual, además de muebles, se le utilizaba para la construcción de naves. La a. era considerada sagrada. En el día de la redención de Israel, Dios dará †œen el desierto cedros, acacias, arrayanes y olivos† (Isa 41:19). †¢Plantas de la Biblia.
Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano
tip, FLOR ARBO (en hebreo «shittah»). Son varios los tipos que crecen en Egipto y Palestina, siendo la más común la «Acacia seyal». Su madera fue extensamente usada en la construcción del tabernáculo, y también el arca, la mesa de los panes de la proposición, y los altares estaban hechos con ella (Ex. 25-38; Dt. 10:3). La madera de este árbol era y es muy apreciada por su ligereza, dureza, y admisión de un pulimentado extremo. Es mencionada por Herodoto; Josefo también menciona su resistencia y durabilidad; es virtualmente incorruptible. Livingstone pensaba que para el tabernáculo se usó la «Acacia giraffa», que él denominaba «madera indestructible». Se ha considerado la «Acacia nilótica», una especie de acacia silvestre, como la zarza que Moisés vio ardiendo y sin consumirse (Heb. «seneh»). Ciertas variedades de acacia producen goma arábiga. Se menciona también en Is. 41:19.
Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado
(heb. schit·táh).
írbol que crecía bien en el desierto, donde los israelitas residieron temporalmente. Podía proporcionar tablas bastante grandes (de unos cuatro metros y medio de longitud, según Exodo 36:20, 21), como las que los israelitas usaron en la construcción del tabernáculo desarmable. Como ese término prácticamente desaparece del registro bíblico después de la entrada de Israel en la Tierra Prometida, parece ser que el árbol en cuestión no era común en Palestina. Esas características encajan mejor con las especies de acacia conocidas como Acacia seyal y Acacia tortilis que con cualquier otro árbol de aquella zona. Estas acacias todavía abundan en el Négueb y en los aledaños del Sinaí, y es posible hallar algunas en el valle del Jordán, al S. del mar de Galilea, pero no en el N. de Palestina.
Ha de notarse que la palabra seyal es el término árabe para †œtorrente†, y precisamente el hábitat de la acacia son los valles torrenciales o uadis, por los que corre el agua durante la estación lluviosa, y que se hallan en las regiones áridas y desérticas de las inmediaciones del mar Muerto y, más al S., del desierto de Arabia y la península del Sinaí. Por lo tanto, la profecía de Joel 3:18 dice: †œDe la casa de Jehová saldrá un manantial, y tendrá que regar el valle torrencial de los írboles de Acacia†, lugar que de otro modo normalmente estaría seco. (Véase SITIM.) En Isaías 41:19 Jehová dice: †œEn el desierto pondré el cedro, la acacia y el mirto y el árbol oleífero†. Aquí se profetiza que tres árboles que por lo general crecen en suelos fértiles llegarían a medrar junto a la acacia como resultado de la provisión divina para su riego. (Isa 41:17, 18.)
Las extendidas ramas de la acacia están armadas de largas espinas. Las ramas suelen entrelazarse con las de las acacias vecinas formando densos matorrales, lo que explica por qué en el registro bíblico casi siempre se usa la forma plural schit·tím. Aunque la acacia puede crecer a alturas de 6 a 8 m., normalmente presenta la apariencia de un arbusto. Tiene hojas compuestas y suaves, se cubre de flores amarillas de agradable olor y su fruto lo forman unas vainas estrechas y curvadas. La corteza, negra y áspera, cubre una madera pesada, muy dura y de veta o grano fino, y es inmune al ataque de los insectos. Estas características, junto con el hecho de que se hallase con facilidad en el desierto, convirtieron a la acacia en un material de construcción ideal para el tabernáculo y sus enseres. Se utilizó para construir el arca del pacto (Ex 25:10; 37:1), la mesa del pan de la proposición (Ex 25:23; 37:10), los altares (Ex 27:1; 37:25; 38:1), los varales para llevar estos artículos (Ex 25:13, 28; 27:6; 30:5; 37:4, 15, 28; 38:6), las columnas para la cortina y la pantalla (Ex 26:32, 37; 36:36), los armazones (Ex 26:15; 36:20) y las barras que los conectaban. (Ex 26:26; 36:31.)
La madera de acacia todavía es muy apreciada en la ebanistería debido a su veta fina, su color pardo-anaranjado y su durabilidad. Los antiguos egipcios sellaban los féretros de sus momias con madera de acacia y también la utilizaban en la construcción de sus barcos. Ciertas especies de acacia producen la goma arábiga comercial.
[Fotografía en la página 39]
Acacia, árbol común en la región sinaítica, cuya madera se empleó en el tabernáculo
Fuente: Diccionario de la Biblia
(En hebreo shíttah, plural shíttîm; Theod. pyxos; Vulgata, spina, espina). El Hebreo shíttah es probablemente una contracción de Shinttah, y por lo tanto idéntico al egipcio shent; al copto shonte, espina; al arábigo sunt. De ahí el nombre griego akantha, espina, el latín, acanthus para el egipcio acacia. A la madera de acacia se le designa como, «madera incorruptible», en los Setenta, y lignum setim, «madera de acacia» en la Vulgata. La acacia bíblica pertenece al genus Mimosa, y es sin duda idéntica a la Acacia seyal (Del.) o la Acacia tortilis (Hayne); ambas son llamadas seyyal, o árboles del torrente; sayl significando torrente. Crecen en el desierto wadis, o en los valles del torrente, del Sinaí. La madera es liviana, dura y durable, y crece casi tan negra como el ébano con la edad. El Arca de la Alianza, la mesa para los panes de proposición, el altar de los holocaustos, el altar del incienso, las partes de madera del tabernáculo, fueron hechos de madera de acacia (Éx. 25,5).
(Vea Plantas en la Biblia).
Bibliografía: VIGOUROUX, en Dict. de la Bible (París, 1895); CHAPMAN en HASTINGS, Dictionary of the Bible, art. Shittah Tree (Nueva York, 1902).
Fuente: Maas, Anthony. «Acacia.» The Catholic Encyclopedia. Vol. 1. New York: Robert Appleton Company, 1907. 28 Jan. 2012
http://www.newadvent.org/cathen/01079a.htm
Traducido por Félix Carrera Franco. rc
Fuente: Enciclopedia Católica