AMILENIALISTAS

tip, ESCA

ver, LEVADURA, ISRAEL, APOCALIPSIS, DANIEL, RESURRECCIí“N

vet, Los amilenialistas creen que no se debe esperar ningún reino visible del Señor. Todas las promesas del AT acerca del Reino son espiritualizadas en favor de la Iglesia, y «Sión» representa simplemente a la Jerusalén celestial. Según esta postura, no hay porvenir nacional alguno para Israel: el retorno de los judí­os a Palestina no tiene relación alguna con las profecí­as, y su restauración y conversión a nivel nacional no son nada más que una vana esperanza (cfr. sin embargo Ro. 11:11-15, 25-26; Jer. caps. 30, 31, 32, 33; Ez. caps. 36-48; Zac. 12:10; 13:8-9; véase asimismo ISRAEL). En la teorí­a amilenialista las seis menciones de los mil años en Ap. 20:2-7 son reducidas a un simbolismo del actual perí­odo de la Iglesia. Sin embargo, esta teorí­a afronta dificultades exegéticas serias para explicar el significado de las resurrecciones en este pasaje. La mayorí­a de expositores amilenialistas «espiritualiza» la Primera Resurrección antes de los mil años, manteniendo, sin embargo, que en el v. 5 sí­ se trata de un verdadero «volver a la vida» (Berkhof: «Teologí­a Sistemática», p. 871). Esta es la postura general, de la que sin embargo difiere Hoekema, que espiritualiza todo el pasaje, y sitúa la resurrección general sólo en Ap. 20:11-13 (Hoekema: «Amillenialism», en «The Meaning of the Millenium», editor R. G. Clouse, PP. 167-172, véase Bibliografí­a). Tampoco queda explicado de manera satisfactoria, con esta teorí­a, el encadenamiento de Satanás. Además, en tanto que en el AT los anuncios de juicio sobre la nación de Israel como nación van seguidos de maravillosas promesas de redención y de salvación asimismo a nivel nacional (cfr. Jer. 7-25 y 27-29 con 30-33; Ez. 11:1-13 con 14-25, etc.), en cambio en el amilenialismo se aplican a Israel sólo los juicios, en tanto que las promesas de bendición a Judá e Israel se aplican a la Iglesia. Finalmente, el reinado de Cristo con sus santos, que el postmilenialismo aplica a esta edad de la Iglesia sobre la tierra, el amilenialismo, según uno de sus más destacados exponentes, lo aplica a un reinado de las almas de los santos en la era presente, con Cristo, en los cielos (Hoekema, obra cit., p. 150). Pero esta postura se basa en la espiritualización de la «Primera Resurrección». Si esta espiritualización se puede mostrar carente de una verdadera base exegética, la teorí­a amilenialista se enfrenta entonces a una dificultad básica fatal. Véase MILENIO.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado