DEUDA. DEUDOR

El que tiene deuda con otro. En los estatutos del AT estaba establecido que †œcada siete años…. perdonará a su d. todo aquel que hizo empréstito de su mano† (Deu 15:1-2). Un israelita que no pudiera pagar su deuda podí­a hacerse siervo del acreedor. Pero se hací­a esta advertencia: †œCuando tu hermano empobreciere, estando contigo, y se vendiere a ti, no le harás servir como esclavo. Como criado … estará contigo; hasta el año del jubileo te servirᆝ (Lev 25:39-40). Incluso el ladrón, que si no podí­a pagar la restitución era †œvendido por su hurto† (Exo 22:3) se beneficiaba de aquel perdón que se hací­a cada siete años. Es dentro de estos conceptos que debe ser examinado el caso de la viuda, que dijo a Elí­as: †œHa venido el acreedor para tomarse dos hijos mí­os por siervos† (2Re 4:1). Igualmente el de los d. que dijeron a Nehemí­as: †œDimos nuestros hijos y nuestras hijas a servidumbre† por causa de deudas (Neh 5:5). Es también el caso de la parábola en que el Señor habló de alguien a quien †œordenó su señor venderle, y a su mujer e hijos, y todo lo que tení­a, para que se le pagase la deuda† (Mat 18:25). El apremio corporal por deudas podí­a llegar al encarcelamiento †œhasta que pagase todo lo que le debí­a† (Mat 18:30, Mat 18:34).

De esta costumbre, sin embargo, se llegó a abusar. †¢Amós denunció a aquellos que †œvendieron por dinero al justo, y al pobre por un par de zapatos† (Amo 2:6). Cuando los préstamos se hací­an poniendo como prenda o garantí­a la ropa, ésta debí­a ser devuelta †œa la puesta del sol. Porque sólo eso es su cubierta, es su vestido para cubrir su cuerpo. ¿En qué dormirá?† (Exo 22:26-27). No se podí­a tomar en prenda un instrumento vital para el sustento del d., como era †œla muela del molino … porque serí­a tomar en prenda la vida del hombre† (Deu 24:6). Tampoco se podí­a tomar †œen prenda la ropa de la viuda† (Deu 24:17). Ezequiel alaba como justo a aquel †œque al d. devolviere su prenda† (Eze 18:7). El perdón de las deudas, que habí­a sido enseñado en el AT, es llevado por el Señor Jesús a la expresión †œPerdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros d.† (Mat 6:12).

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano