El término hebreo barak y sus derivados comunican la idea de †œbendición†. La raíz significa †œrodilla†, por lo cual algunos interpretan que la palabra †œbendito† se derivó del acto de estar arrodillado adorando o recibiendo una bendición de él. En la mentalidad hebrea, al hablar de bendición se pensaba en un acto mediante el cual la persona recibía poder para obtener éxito, prosperidad, fecundidad, longevidad, etcétera.
La bienaventuranza es, entonces, un estado de felicidad. El término †œbienaventurado† se utiliza casi siempre como una expresión equivalente a †œfeliz aquel†. Así, en el cántico de Moisés, se dice: †œBienaventurado tú, oh Israel, ¿quién como tú, pueblo salvo por Jehovᆠ(Deu 33:29). La reina de Saba, tras ver la gloria de Salomón, exclamó: †œBienaventurados tus hombres, dichosos estos tus siervos…† (1Re 10:8). Es con ese sentido que se utiliza el término en otras porciones, como el Sal 1:1 (†œBienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos†).
Señor Jesús habló de ocho bienaventurados en Mat 5:3-11 (†œlos pobres en espíritu†, … †œlos que lloran†, … †œlos mansos†, … †œlos que tienen hambre y sed de justicia†, … †œlos misericordiosos†, … †œlos de limpio corazón†, … †œlos pacificadores†, … †œlos que padecen persecución por causa de la justicia†). En Luc 6:20-23 aparecen como bienaventurados †œlos pobres…. los que ahora tenéis hambre…. los que ahora lloráis….† y también aquellos a los cuales los hombres †œaborrezcan, y cuando os aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa del Hijo del Hombre†.
el hombre se dirige a Dios, llamándole †œBienaventurado† (†œel bienaventurado y solo Soberano, Rey de reyes, y Señor de señores† [1Ti 6:15]), o †œbendito† (†œBendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo† [1Pe 1:3]), está expresando adoración y reconociendo que él es la fuente de †œtoda buena dádiva y todo don perfecto† (Stg 1:17).
Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano