El cuerpo humano asciende, se mantiene en el aire, sin ningún soporte natural.
– Enoc y Elias, Gen 5:24, Gen 11:5, 2 R.2.
– Jesucristo, Mar 16:19, Luc 24:51, Hch.l.
– Varios Santos: José Cupertino, Francisco Javier, Pablo de la Cruz, Pedro de Alcántara, Felipe Neri, Esteban de Hungría, Teresa de Jesús.
Diccionario Bíblico Cristiano
Dr. J. Dominguez
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Fuente: Diccionario Bíblico Cristiano
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Fenómeno de elevarse del suelo por causas no normales. Puede deberse a un efecto parapsicológico, que supone cierta superación aparente de la ley física de la gravedad.
Y en ocasiones puede ser un fenómeno sobrenatural, que resulta inexplicable en lo humano, pero que manifiesta la influencia divina en el hombre, a través de ese signo tan conocido por los expertos en mística.
Educativamente conviene enseñar al educando a no darlo más importancia de lo que lo que tiene: efecto sensible de una causa insensible. Si es imprudente negar su posibilidad en uno u otro sentido, más imprudente es creer sobrenatural lo que es natural o jugar con fuerzas preternaturales en las que la voluntad no tiene dominio. Es una indicación importante en este terreno y en otros similares, pues el educador, dado el auge que tiene el espiritismo y la magia en los tiempos actuales, debe prevenir contra errores de juicio a los educados.
Hay que enseñar a discernir, a juzgar, a entender lo que es milagro y lo que no es. Se debe respetar los signos de sobrenaturalidad cuando existen. Y en ocasiones, se debe consultar con expertos sobre las dudas en torno a la veracidad de los fenómenos místicos.
Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006
Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa