SIROFENICIA

Mar 7:26.


Sirofenicia (gr. surofoiní­kissa, «de Siria y Fenicia»). Habitante (el sustantivo griego está en género femenino) de la costa de Fenicia, la que en tiempos del NT pertenecí­a a la provincia imperial romana de Siria. Se usaba este término para establecer una diferenciación entre los sirofenicios de los libiofenicios que viví­an en los alrededores de Cartago. Marcos usa el término (Mar 7:26) para referirse a una mujer que, según Mateo, era «cananea».*

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

con este gentilicio denomina el Evangelio de Marcos a la mujer que se le acercó a Jesús, en la región de Tiro, para pedirle que liberara a su hija poseí­da de un espí­ritu inmundo. También se le llama griega, para significar que era gentil, Mc 7, 26.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

Una moradora de la región cerca de Tiro y Sidón, en el Lí­bano moderno (Mar 7:26; comparar Mat 15:22).

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

En la época del NT Fenicia era considerada como parte de la provincia romana de Siria. De ahí­ el gentilicio de †œs. de nación† que se da a la mujer griega que le pidió al Señor Jesús que sanara a su hijo de un demonio (Mar 7:26).

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

vet, Se distinguí­a entre los fenicios de Siria y los fenicios de Libia, estos últimos originarios de ífrica del norte (Mr. 7:26; cfr. Mt. 15:22, donde la mujer recibe el apelativo de cananea). Hacia el fin del siglo II d.C., la provincia de Siria fue dividida entre la Gran Siria y la Siria fenicia.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

Designación que en Marcos 7:26 se aplica a una mujer no israelita de las regiones de Tiro y Sidón. El adjetivo †œsirofenicia†, que combina †œsiria† y †œfenicia†, probablemente se originó por haber sido Fenicia parte de la provincia romana de Siria. A la mujer sirofenicia también se la llama una kja·na·nái·a (literalmente, †œcananea†; traducido †œfenicia† en NM), pues los primeros habitantes de Fenicia descendí­an de Canaán y con el tiempo el término †œCanaán† llegó a referirse principalmente a Fenicia. (Mt 15:22, nota.) El que se la llamase †œgriega† probablemente indica que era de ascendencia griega. (Mr 7:26.)
Poco después de la Pascua del año 32 E.C., esta mujer sirofenicia se acercó a Jesucristo y le pidió repetidas veces que expulsara el demonio que tení­a su hija. Al principio Jesús se negó a hacerlo, diciendo: †œNo es correcto tomar el pan de los hijos y echarlo a los perritos†. Aunque los perros eran animales inmundos para los judí­os, Jesús suavizó esta comparación asemejando a los no judí­os a †œperritos† que pueden tenerse en casa, y no a perros callejeros. No obstante, parece que lo que Jesús dijo sirvió para probar a la mujer, pues esta admitió con humildad: †œSí­, Señor; pero en realidad los perritos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos†. Puesto que sus palabras reflejaron gran fe, su hija fue sanada. (Mt 15:21-28; Mr 7:24-30.)

Fuente: Diccionario de la Biblia

surofoinikissa o surofunissa (surofoinivkissa, 4949), se emplea en Mc 7.26 como el nombre nacional de una mujer llamada «una mujer cananea» en Mat 15:22, esto es, no judí­a sino descendiente de los antiguos moradores de la tierra costera de Fenicia. El término denotaba probablemente una persona siria residiendo en la misma Fenicia.¶ Hay una tradición de que el nombre de la mujer era Justa, y el de su hija, Berenice (Homilí­as Clementinas, ii.19; iii.73). En Act 21:2,3 se utilizan indistintamente ambas partes del término.

Fuente: Diccionario Vine Nuevo testamento