MESAC

Dan 1:7; 3:30


Mesac (heb. y aram. Mêshak). Nombre babilónico de Misael, uno de los 3 compañeros de Daniel (Dan 1:7; 2:49; 3:12-30). Todos los intentos por explicar el nombre, que no parece ser de origen babilónico, han fracasado hasta ahora.

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

Un nombre pagano dado a Misael, uno de los cuatro prí­ncipes de Judá tomados por Nabucodonosor para que fuesen instruidos en su palacio para llegar a ser consejeros del rey. Estos cuatro tení­an nombres hebreos que contení­an la sí­laba el para Dios, o í­a(s) para el Señor, pero les cambiaron sus nombres para honrar a los dioses de Babilonia (Dan 1:3-7).

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

Nombre babilonio que el oficial principal de la corte de Nabucodonosor dio a Misael, compañero de Daniel. El significado de este nuevo nombre es incierto, pero quizás hiciera referencia a Aku, una deidad sumeria.

Mantiene integridad durante su juventud. A Mesac (Misael) se le llevó cautivo desde Jerusalén a Babilonia junto con otras personas, entre ellas Joaquí­n, en el año 617 a. E.C. A Misael, Azarí­as, Hananí­as y Daniel se les sometió a un perí­odo de aprendizaje de tres años en la corte real, y al final del mismo superaron a los propios consejeros del rey. (2Re 24:1, 6, 8, 12-16; Da 1:1-7, 17-20.) Durante este tiempo, su devoción a Dios permaneció inquebrantable, pues hasta rehusaron contaminarse con los manjares del rey. (Da 1:8-16.)
Hay tres posibles razones para que consideraran †˜contaminados†™ los manjares del rey: 1) los babilonios comí­an animales que de acuerdo con la ley de Moisés eran inmundos, 2) no siempre los desangraban bien y a veces posiblemente los estrangulaban y 3) los paganos solí­an sacrificar animales a sus deidades, y para ellos comer aquella carne formaba parte de su adoración. (Da 1:8; compárese con 1Co 10:18-20, 28.)
Daniel alcanzó luego un puesto gubernamental elevado en la corte del rey, y a petición suya, Nabucodonosor nombró a Mesac, Sadrac y Abednego sobre la administración del distrito jurisdiccional de Babilonia. (Da 2:48, 49.)

Se niega a inclinarse ante la imagen. La atención del rey se centró de nuevo en Mesac y sus dos compañeros, cuando se negaron a inclinarse ante la colosal imagen que Nabucodonosor habí­a erigido delante de los restantes funcionarios del gobierno. Tení­an plena fe en Jehová, por lo que rehusaron adorar a los dioses del rey. Fuera que Dios los librase del horno ardiente o no, mantendrí­an su integridad más bien que transigir para que se les librara. (En Heb 11:34, 35 se habla de los que †œdetuvieron la fuerza del fuego† y que †œrehusaron aceptar la liberación por algún rescate, con el fin de alcanzar una resurrección mejor†.) Debido a la fe que mostraron, Jehová utilizó un ángel para salvarlos. De hecho, cuando salieron, †œel olor del fuego mismo no les habí­a venido†. Nabucodonosor, que se habí­a encolerizado tanto que antes de arrojar en el horno a los tres hombres, habí­a ordenado que se calentara siete veces más de lo usual, reconoció entonces el poder del Dios de ellos para librarlos. Además, emitió una orden para que se desmembrase a cualquiera que dijese algo malo contra el Dios de Mesac y se convirtiera su casa en excusado público. (Da 3:1-30.)

Fuente: Diccionario de la Biblia

(heb. mēšaḵ). Nombre que el jefe de los eunucos de Nabucodonosor dio a Misael (“¿quién es lo que es Dios?”), uno de los compañeros de cautiverio de Daniel en Babilonia (Dn. 1.7; 2.49, etc.). El significado más plausible que se ha sugerido para este nombre es el bab. mēsku (‘me he vuelto débil’), quizás dado por su similitud con el nombre heb.

D.J.W.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico