MENE

Dan 5:25 la escritura que trazó es: M, M, Teke!
5:26


Mene (aram. menê’ ). Una de las palabras de la inscripción que apareció en la pared del palacio del rey Belsasar durante la fiesta de la noche en que cayó Babilonia (Dan 5:25, 26). Menê’ es una forma del verbo «contar» y significa «contado». La escritura completa decí­a: «MENE, MENE, TEKEL, UPARSIN», que es una transliteración del aram. Menê’ Menê’ reqêl ûfarsîn. El mensaje se interpretarí­a así­: «Contado, contado, pesado y pedazos». Esta comunicación crí­ptica, pasible de ser descifrada, exigí­a un intérprete. De acuerdo con el registro, los sabios de Babilonia no pudieron leer la escritura (Dan 5:8). No se da la razón, y cualquier explicación es sólo especulativa. La inscripción aparentemente estaba en arameo, pero, como se indica arriba, aunque estos sabios hubieran entendido las 3 palabras no habrí­an comprendido su significado (CBA 4:830-832). Finalmente se llamó a Daniel para revelar el mensaje divino, quien dio la interpretación: MENE, «Dios ha contado tu reino y le ha puesto fin»: TEKEL,* «Pesado has sido en balanza, y fuiste hallado falto»; PERES, «Tu reino es dividido, y dado a los medos y a los persas» (vs 26-28). Véase Uparsí­n.

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

Téquel, Parsin, palabras proféticas que escribió una mano misteriosa en la pared del palacio de Baltasar, rey de Babilonia, cuando celebraba un festí­n en el cual se bebió en los vasos sagrados del Templo, que habí­an sido llevados por el rey Nabucodonosor. Baltasar hizo llamar a sus adivinos, caldeos y astrólogos, y ninguno entendió el sentido de aquella escritura. La reina, enterada de la preocupación del rey, entró a la sala y le informó que Daniel, judí­o desterrado en Babilonia, habí­a sido nombrado por Nabucodonosor, jefe de los adivinos. Daniel, entonces, fue llevado ante el rey y, tras enrostarle su idolatrí­a y el haber profanado los vasos sagrados, descifró el sentido de las palabras: †œMené: Dios ha contado los dí­as de tu reinado y les ha puesto fin;Téquel: has sido pesado en la balanza y te falta peso; Parsin: tu reino se ha dividido y ha sido entregado a medos y persas, Dn 5, 25-28.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

La primera palabra de un mensaje enigmático inscrito en el †œenlucido de la pared† de la sala de banquetes del rey Belsasar de Babilonia la noche del 5 de octubre del año 539 a. E.C. (calendario gregoriano), justo antes de que la ciudad cayese ante los medos y los persas. Según Daniel, a quien Jehová comisionó para leer la inscripción y dar su interpretación, la escritura decí­a: †œMENE, MENE, TEQUEL y PARSíN†. (Da 5:25.) Como la inscripción debí­a componerse solo de consonantes, serí­a necesario colocar las vocales de forma adecuada e interpretar inteligente y correctamente el texto. Las palabras tienen el siguiente significado literal: †œUna mina, una mina, un siclo y medios siclos†.
Al dar la interpretación exacta, Daniel dijo en primer lugar: †œEsta es la interpretación de la palabra: MENE: Dios ha numerado los dí­as de tu reino y lo ha terminado†. (Da 5:26.) Con solo la primera parte, el rey Belsasar tendrí­a que haber entendido claramente el mensaje. Jehová habí­a destronado al poderoso Nabucodonosor, que habí­a tenido más poder que Belsasar. Por consiguiente, también podrí­a acortar el número de los dí­as del reinado de Belsasar y los de su corregente y padre Nabonido. Jehová tení­a poder para poner fin a la dinastí­a. La palabra †œMENE† apareció dos veces en la inscripción, quizás porque el mensaje aplicaba a los dos gobernantes del reino de Babilonia en aquel tiempo, Nabonido y Belsasar. Sin embargo, Daniel empleó †œMENE† una sola vez en la interpretación, posiblemente porque solo Belsasar estaba presente en esa ocasión.
La Biblia no aclara por qué ninguno de los sabios de Babilonia fue capaz de leer la escritura. (Da 5:8.) Puede que se debiera a la naturaleza crí­ptica del mensaje o a que se escribió con unos caracteres o en un idioma que desconocí­an.

Fuente: Diccionario de la Biblia