IDUMEA

Idumea (heb. ‘Edôm, «rojo», «terroso» o «sangriento»; gr. Idoumáia). Nombre que los griegos y romanos usaron para Edom (Mar 3:8). En el perí­odo intertestamental y en tiempos del NT designaba un área al oeste y noroeste del antiguo Edom, en el sur de Judá. Esta región recibió su nombre de los edomitas, quienes se habí­an mudado a ella después de la caí­da de Jerusalén en el 586 a.C., y otra vez después de haber sido expulsados de su antigua patria por los árabes nabateos en el s IV a.C. En los tiempos de los macabeo, los edomitas ocupaban importantes ciudades, hebreas como Bet-sur y Hebrón (1 Mac. 4:29; 5:65). El gobernante macabeo Juan Hircano finalmente los subyugó y los obligó a aceptar la religión judí­a. Como prosélitos judí­os, técnicamente llegaron a ser y se los consideró parte de la nación. Descendientes de los idumeos fueron los Herodes. Mapa 1, C-1/2. Bib.: FJ-AJ xiii.9.1.

Fuente: Diccionario Bíblico Evangélico

Ver Edom.

Diccionario Bí­blico Digital, Grupo C Service & Design Ltda., Colombia, 2003

Fuente: Diccionario Bíblico Digital

(relacionado con Edom). El nombre que los griegos y los romanos usaban para referirse al pueblo de Edom (Mar 3:8). Ver EDOM, EDOMITAS.

Fuente: Diccionario Bíblico Mundo Hispano

Idumea es el término usado por los griegos y romanos para referirse al paí­s ocupado por un pueblo conocido en el Antiguo Testamento como edomitas. Cuando los nabateos expulsaron a los edomitas fuera de su lugar tradicional, ellos se movilizaron hacia el norte a la región del Hebrón. Antí­pater, padre de Herodes el Grande era idumeo.

Fuente: Diccionario Bíblico Arqueológico

Forma grecorromana para señalar a †¢Edom. No indica, sin embargo, a la región tradicionalmente conocida con ese nombre, sino a otra dentro del territorio mismo de Israel, al S, cerca de †¢Hebrón, adonde los edomitas emigraron aprovechándose de la destrucción de Jerusalén por los caldeos en el 586 a.C., hecho que denunciaron los profetas (Eze 25:12; Amo 1:11). Pueblos árabes, especialmente los nabateos, tomaron el territorio de la antigua Edom. Más tarde, en el año 126 a.C., Juan Hircano dominó a los habitantes de I., a los cuales obligó a circuncidarse, poniéndoles como gobernador a Antí­pater, que fue el abuelo de †¢Herodes el Grande.

Fuente: Diccionario de la Biblia Cristiano

tip, REGI

ver, EDOM

sit, a3, 290, 465

vet, Nombre dado por los griegos y romanos a Edom, desde el siglo III a.C. (Mr. 3:8). Este nombre es empleado por la versión de los LXX en la época grecorromana para traducir el nombre de la región de los idumeos, tierra situada al sur de Palestina y ocupada por este pueblo después de la toma de Jerusalén por Nabucodonosor en el año 587 a.C. (Véase EDOM.)

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico Ilustrado

[010]

Región sureña de Palestina, en las cercaní­as de la depresión del Mar Muerto, en torno a la región de la Arabá. La tradición bí­blica consideró patrimonio de las doce tribus salidas de Esaú (Edom), el hijo de Isaac. (Gen. 36.1-42). En tiempos de Jesús se habí­a reducido el antiguo territorio a una dependencia de Judea, por efecto de las conquistas macabeas y por la expansión de los grupos árabes más orientales, que habí­an constituido el reino de los Nabateos, cuya capital era Petra. Idumea, patria de Herodes, habí­a quedado reducida al sur de Palestina, a la zona agrestre entre Hebrón y Bersebá.

Los datos primeros de Idumea aparecen con frecuencia en el contexto de una permanente rivalidad con Israel. Por eso abundan los oráculos contrarios a Edom: Am. 11.1; Ez. 25. 12; Jer. 49,7; Mal. 1.2. Como zona independiente y original desapareció con la rebelión judaica y la destrucción de sus habitantes.

Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogí­a Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006

Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa

(del gr., significa: †œ[Tierra] de los Edomitas†).
En tiempos de los macabeos y los romanos, los lí­mites geográficos de Idumea no incluí­an la zona más importante de la antigua Edom, al E. del Arabá, pero abarcaba parte de lo que habí­a sido originalmente territorio de Simeón y de Judá. Como se indica en el libro apócrifo de 1 Macabeos (4:29, 61; 5:65, BJ), Idumea englobaba la región que estaba alrededor de Hebrón, y, en dirección N., llegaba hasta Bet-zur, aproximadamente a 26 Km. al SSO. de Jerusalén. Se dice que los idumeos sufrieron una derrota aplastante a manos de Judas Macabeo. (1 Macabeos 5:3.) Según Josefo, luego Juan Hircano subyugó a todos los idumeos, permitiéndoles permanecer en el paí­s a condición de que se sometiesen a la circuncisión y se adhiriesen a la ley judí­a. En lugar de abandonar el paí­s, los idumeos cumplieron estas condiciones. (Antigüedades Judí­as, libro XIII, cap. IX, sec. 1.) Los habitantes de Idumea estuvieron entre aquellos que fueron personalmente a Jesús †œal oí­r cuántas cosas hací­a†. (Mr 3:8; véase EDOM, EDOMITAS.)

Fuente: Diccionario de la Biblia

La forma gr. (idoumaia) del heb. ˒eḏôm se refiere a una zona de la Palestina occidental, y no a Edom propiamente dicha. En la época del éxodo, Edom se extendía a ambos lados del Arabá, y la porción occidental llegaba hasta cerca de Cades (Nm. 20.16). David subyugó a Edom, pero hubo continuos conflictos entre *Edom y Juda. Después de la caída de Jerusalén en 587 a.C. los edomitas aprovecharon esta calamidad para emigrar hasta el corazón de la Judá meridional, al S de Hebrón. Varios profetas se expresaron contra Edom a causa de esto (Jer. 49.7–22; Lm. 4.21–22; Ez. 25.12–14; 35.3; Abd. 10ss).

Como, más tarde, varios grupos árabes, especialmente los nabateos, se infiltraron en la antigua Edom, se establecieron más inmigrantes en Judá, y la zona que ocuparon se conoció como Idumea (1 Mac. 4.29; 5.63). Judas Macabeo llevó a cabo exitosas campañas contra ellos, y Juan Hircano los subyugó ca. 126 a.C., colocó a Antípater como gobernador, y los obligó a circuncidarse (Jos., Ant. 13.258). Antípater fue abuelo de *Herodes el Grande. La palabra Idumea aparece en el NT solamente en Mr. 3.8.

J.A.T.

Douglas, J. (2000). Nuevo diccionario Biblico : Primera Edicion. Miami: Sociedades Bíblicas Unidas.

Fuente: Nuevo Diccionario Bíblico

El país habitado por los descendientes de Edom. La palabra Idumea es la forma grecizada del nombre hebreo ‘Edôm (egipcio, Aduma; Asirio, U-du-um-ma-ai, U-du-mu, U-du-mi), que parece haber sido aplicado a la región por el color rojo de sus acantilados areniscos. Idumea estaba situada al sur de Judá y del Mar Muerto, pero sus límites, fronterizos con el desierto, son difíciles de determinar. Según Génesis 36,8 ss., al dejar Canaán Esaú fijó su residencia en el Monte Seír, entonces el hogar de los horitas (Gén. 14,6; D.V.: Chorreans). Comúnmente se piensa que el Monte Seír es el Jebel esh-Shera, una cordillera que prolonga las montañas de Moab, al este de la ‘Arabah; sin embargo, varias indicaciones sugieren una localización más occidental y llevó a algunos a creer que el Monte Seír debía ser buscado más bien en las tierras altas entre Cadés y la parte sur del Mar Muerto. Las Tablas de Tell el-Amarna ciertamente hablan de She-e-ri como un país al sur de la Palestina Oriental; los mismos documentos mencionan en esa región una ciudad de U-du-mu (Edom), en la cual se reconoce a Ed-Dome (Ruma de Josué 15,52 — D. V.; Hebreo, Dûmah), al sur sureste de Hebrón, y a veces el nombre se usa para designar el país de los edomitas. Por otro lado, la ruta seguida por los Israelitas, regresando de Cadés a Esyon Guéber (Deut. 2,8) y ladeando al este de la Arabá a través de Salmona (desconocida), Phunon (Khirbet Fenân) y Oboth (prob. Wady Weibeh), luego yendo al noreste a Jeabarim (Kh. ‘Ai, este, sureste de Kerak), para «rodear la tierra de Edom» (Núm. 21,4), la que no se le permitió cruzar (Núm. 20,17), indica que esta tierra no se extendía más allá de la Arabá. Usualmente se entiende bajo el nombre de Idumea, no sólo el Monte Seír, sino toda la región circundante habitada por tribus que reclaman ser descendientes de los edomitas.

En tiempos antiguos los edomitas eran gobernados por ‘allûphîm o «duques»; pero durante la estadía de los hebreos en el desierto el Monte Seír estaba bajo el control de un rey. Génesis 36,31-39, da una lista de «los reyes que gobernaron la tierra de Edom, antes de que el pueblo de Israel tuviera un rey”; por esta lista sabemos que la monarquía edomita era electiva. A pesar de la relación de sangre que unía a Israel y a Edom, los dos pueblos estaban frecuentemente en conflicto. Saúl había vuelto su ejército contra los edomitas (1 Sam. 14,47); David conquistó y guarneció el país (2 Sam. 8,14) y Salomón ocupó sus puertos en el Mar Rojo (1 Ry. 9,26). Durante el reinado de Joram, Idumea logró sacudirse por un tiempo del yugo de Jerusalén, pero Amasías obligó una vez más a los edomitas a estar bajo el dominio de Judá; finalmente bajo Ajab ganaron su independencia. Con la caída de Judá a manos de los babilonios, a quienes se habían unido en su riña, el poder de los edomitas se volvió mayor, y tomaron posesión de todo el sur de Palestina, haciendo a Hebrón su capital. Pero a pesar de su alianza con los sirios durante la guerra de los Macabeos, no pudieron resistir la fuerte acometida de los patriotas israelitas que los expulsaron del sur de Judá. Al perder sus posesiones al este de la Arabá, que habían caído hacía tiempo en manos de los nabateanos, los hicieron una presa fácil para sus vecinos, y en 109 a.C fueron conquistados por Juan Hicarno, quien, sin embargo, les permitió quedarse en el país con la condición de que adoptaran el judaísmo. Cuando a la muerte de Alejandra (69), Aristóbulo trato de arrebatarle la corona a su hermano Hircano II, Antipater, gobernador de Idumea, se alineó con este último en el conflicto, y a la llegada de los romanos, se adhirió fuertemente a ellos. La ayuda que le prestó a su ejército en varias expediciones, y los servicios que le rindió a Julio César fueron recompensados en 47 con el muy codiciado título de ciudadano romano y el nombramiento de procurador de Judea, Samaria y Galilea. Su hijo fue Herodes el Grande.

Bibliografía: BURCKHARDT, Viajes por Siria y la Tierra Santa (Londres, 1822); ROBINSON, Investigaciones Bíblicas en Palestina, II (Londres, 1856); PALMER, El Desierto del Éxodo (Cambridge, 1871); HULL, Monte Seír (Londres, 1889); IDEM, Memoria sobre la Geología y Geografía de Arabia Petra, Palestina y los distritos adyacentes (Londres, 1889); MUSIL, Arabia Petra, II, Edom. Topographischer Reisebericht (Vienna, 1907); BUHL, Geschichte der Edomiter (Leipzig, 1893); LAGRANGE. L’Itinéraire des Israélites du Pays de Gessen aux bords du Jourdain. De Cadès à ‘Asion-Gaber in Revue Biblique (1900), 280; JAUSSEN, SAVIGNAC, and VINCENT, ‘Abdeh in Revue Biblique (1904), 403; (1905), 74, 235.

Fuente: Souvay, Charles. «Idumea.» The Catholic Encyclopedia. Vol. 7. New York: Robert Appleton Company, 1910.
http://www.newadvent.org/cathen/07638a.htm

Traducido por Luz María Hernández Medina.

Fuente: Enciclopedia Católica