Hay once palabras en el AT que se traducen «gobernar» y «gobierno» (y por otros sinónimos), siendo la más frecuente el verbo māšal, que aparece en forma más o menos extendida a través del AT. Se usa acerca de José que fue gobernador de todo Egipto (Gn. 45:8), del linaje de David (2 Cr. 7:18), del gobierno de Dios sobre Jacob (Sal. 59:13) y del Mesías, uno de cuyos títulos es «Señor» (Mi. 5:2).
De las cinco palabras del NT que se usan para gobernador la predominante es archōn, participio sustantival del verbo archō, «gobernar». Ap. 1:5 afirma que Cristo es el «soberano de los reyes de la tierra», que es un reflejo de la difundida idea judaica sobre el carácter y papel del Mesías. Esta palabra se usa para Cristo solamente una vez, pero el mismo pensamiento aparece varias veces, por ejemplo, Ro. 14:9 y Col. 1:18. En el NT, archōn generalmente se refiere a quienes están en posiciones de autoridad política o religiosa. Los funcionarios a cargo de las sinagogas eran los «principales» (Lc. 8:41), y los miembros del sanedrín también llevaban esta denominación (Jn. 3:1). Otro uso de la palabra se aplica a los malos espíritus cuyas filas y oficios son paralelos a las organizaciones visibles. Satanás se describe como príncipe de los demonios (Mr. 3:22). Pablo mismo llama a Satanás «príncipe de este mundo» (Jn. 12:31). Pablo alude al diablo como «príncipe de la potestad del aire» (Ef. 2:2).
David H. Wallace
Harrison, E. F., Bromiley, G. W., & Henry, C. F. H. (2006). Diccionario de Teología (280). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.
Fuente: Diccionario de Teología