CONSTITUCIONES Y CANONES APOSTOLICOS.

Las Constituciones Apostólicas (de las cuales los Cánones forman la última sección) son un cuerpo de leyes eclesiásticas que según la opinión general no son apostólicas, escogiéndose a manera de conjetura la última parte del siglo cuarto como su fecha de composición. El concilio de Trulla (692) tuvo la obra que estamos considerando, pero sólo aceptaron los Cánones como autoritativos, debido a que las Constituciones habían sido llenadas de muchas interpolaciones inortodoxas. Algunos creen que el que añadió las interpolaciones fue algún editor del siglo cuarto, que pertenecía a la iglesia de Antioquía o del norte de Siria. Algunos explican el supuesto arrianismo de los documentos como si fueran escritas antes del Concilio de Nicea (en 325), época en que no era necesaria la precisión teológica.

El título completo de las ordenanzas es «Ordenanzas de los Santos Apóstoles mediante Clemente»; la obra se compone de ocho libros. Los primeros 6 libros se asemejan a la Didascalia Apostolorum, una obra siriaca del tercer siglo que era un libro de gobierno eclesiástico, y trata de: (1) hábitos y costumbres de los legos, (2) episcopado y culto, (3) viudas, el clero, bautismo, (4) provisión para los pobres, virginidad, (5) martirio, (6) cismáticos. En cuanto al libro séptimo, los caps. 132 están basados en la Didaché; 3349 dan detalles para la práctica de la liturgia. Y en cuanto al octavo libro, los caps. 12 tienen que ver con los dones espirituales; los caps. 327 presentan la liturgia de San Juan Crisóstomo de Antioquía; los caps. 2846 son cánones, y el cap. 47 (posiblemente una adición posterior) contiene los ochentaicinco cánones apostólicos. Veinte de estos cánones parecen estar basados en los cánones del concilio de Antioquía (en 341). Dionisio el Exiguo, un escita, tradujo los primeros cincuenta cánones al latín (cerca de 520), omitiendo el resto, pues se desviaban de la práctica romana. Los cánones que se omitieron trataban mayormente con la conducta moral impropia. A través de la traducción de Dionisio, los cánones llegaron a ser parte de la Ley Canónica Occidental, y llegaron a ser muy influyentes (p. ej., en Graciano, c. 1140), aunque se negó su carácter apostólico. Estos ochentaicinco cánones tienen que ver principalmente con la ordenación, responsabilidades y conducta moral del clero. El conocimiento moderno de las Constituciones viene de 1546 cuando un veneciano, Carolus Capellus, imprimió un epítome de ellas en latín.

BIBLIOGRAFÍA

PG; AnteNicene Christian Library, Edimburgo, 1864, Vol. xvii, pp. 257–269; ODCC.

M.R.W. Farrer

PG Patrologia Graeca (Migne)

Harrison, E. F., Bromiley, G. W., & Henry, C. F. H. (2006). Diccionario de Teología (123). Grand Rapids, MI: Libros Desafío.

Fuente: Diccionario de Teología