MEDIOS DE COMUNICACION SOCIAL

Contenidos y expresiones a nivel planetario

Los medios de comunicación social («mass media» o «mediática») son cauces normales de la comunicación entre los hombres y también del anuncio evangélico a todos los pueblos. Pueden ser publicaciones, radio, televisión, cine, audiovisuales, informática, telemática, internet, agencias de noticias, etc. El mundo se ha convertido en una «pequeña aldea».

No conviene olvidar que el elemento principal de estos medios consiste en la base ideológica, especialmente cuando queda escrita. De ahí­ la importancia y responsabilidad de los libros y, consecuentemente, de las editoriales y librerí­as. Los grandes momentos históricos de renovación o de crisis se han fraguado en ideas sembradas muchos años antes.

En relación con los medios de comunión social, se puede encuadrar la «informática», que es más bien el conjunto de tecnologí­as electrónicas también en vistas a la información, acentuando la técnica de combinación de datos y de rapidez en la comunicación de los mismos («telemática», «internet», «ordenador»). Un problema de fondo en este tema es de orden moral, ajeno propiamente a la informática el dominio del mercado y el desarrollo monopolizado, con detrimento de las sociedades menos desarrolladas económicamente.

Un nuevo «areópago» por evangelizar

En el campo de la evangelización, se consideran estos medios como un «areópago» o punto neurálgico de la sociedad «El primer areópago del tiempo moderno es el mundo de la comunicación, que está unificando a la humanidad y transformándola – como suele decirse – en una aldea global. Los medios de comunicación social han alcanzado tal importancia que para muchos son el principal instrumento informativo y formativo, de orientación y de inspiración para los comportamientos individuales, familiares y sociales. Las nuevas generaciones crecen en un mundo condicionado por esos medios» (RMi 37).

Su influjo en la información y en la formación, en los criterios, escala de valores y actitudes humanas es muchas veces determinante (cfr. IM 3-7). Quienes emiten la información seleccionan los datos y los presentan según unos intereses concretos propaganda, negocios, polí­tica, ideologí­a… Mientras el diálogo del encuentro interrelacional tiende a compartir, los medios de información tienden a convencer según intereses previos. Los beneficios y los perjuicios, según los casos, pueden darse a nivel económico, cultural, moral, polí­tico y religioso. Pueden informar y desinformar, formar y deformar.

Educación para su uso activo y pasivo

El recto uso de estos medios presupone los principios éticos de veracidad, respeto de la dignidad personal y cultural, y responsabilidad social. La educación para el uso activo y pasivo de estos medios camina a la par con la educación en la propia conciencia y libertad. Este recto uso, concretado en espí­ritu crí­tico y de discernimiento, ayudará a superar el riesgo de despersonalización y masificación.

Ordinariamente los contenidos son escasos en relación con las impresiones e instancias de la publicidad. Sobresale la presentación por encima del mensaje real. Durante las «mesas redondas» o «interviews» (como en la televisión y en la radio) hay que prestar atención a las tácticas psicológicas. No pueden dejarse en manos de inexpertos o de gente no especializada, los contenidos evangélicos, sobre todo cuando se quieren relativizar los contenidos de la fe, sometiéndolos a un bombardeo de opiniones impresionistas y contrapuestas sin crí­tica seria y sin base cultural.

El ciudadano y el creyente necesitan educarse para su uso activo y pasivo, también en vistas a la evangelización. Para ello hay que apuntar a exigir una información objetiva y una orientación que favorezca la formación según la conciencia y los valores evangélicos. El individuo y la sociedad necesitan aprender a discernir e interpretar las ideas y las noticias recibidas, distinguiendo los contenidos de las impresiones (cfr. IM 16).

El creyente que presente temas cristianos tendrá en cuenta que la sociedad «icónica» pide signos no tanto acerca de ideas, sino de «alguien» Cristo resucitado presente. «Nunca como hoy la Iglesia ha tenido la oportunidad de hacer llegar el Evangelio, con el testimonio y la palabra, a todos los hombres y a todos los pueblos» (RMi 92).

Referencias Ambitos nuevos de evangelización, Anuncio, catequesis, educación, formación.

Lectura de documentos IM (todo el documento); AG 26; EN 45; RMi 37; CEC 2493-2499; CIC 822-832.

Bibliografí­a AA.VV., Diccionario de ciencias y técnicas de la comunicación (Madrid, San Pablo, 1992); AA.VV., La comunicación y los «mass media» (Bilbao, Mensajero, 1975); M. AJASSA, Comunicazioni sociali ed evangelizzazione, en Portare Cristo all’uomo, (Roma, Pont. Univ. Urbaniana, 1985) II, 693-703; E. BARAGLI etc., Mass media, en Nuevo Diccionario de Espiritualidad (Madrid, Paulinas, 1991) 1189-1206; (Congregación para la Doctrina de la Fe) Instrucción sobre algunos aspectos relativos al uso de los instrumentos de comunicación social en la promoción de la doctrina de la fe (30 marzo 1992); (Congregación para la Educación Católica) Orientaciones sobre la formación de los futuros sacerdotes para el uso de los instrumentos de la comunicación social (Roma 1986); R. ECHARREN, Propaganda, opinión pública y medios de comunicación social (Madrid, Paulinas, 1970); R.F. EXPOSITO, Mas media, en Nuevo Diccionario de Espiritualidad (Madrid, Paulinas, 1991) 1189-1206; J. IRIBARREN, Introducción a las relaciones públicas en la Iglesia ( BAC, Madrid, 1996); (Pontificio Consejo Comunicaciones Sociales) Etica en la publicidad (Lib. Edit. Vaticana 1997); A. LOPEZ QUINTAS, El secuestro del lenguaje. Técnicas de manipulación del hombre (Madrid, PPC, 1987); Mª V. REYZABAL, Publicidad, manipulación o información (Madrid, San Pablo, 1996).

(ESQUERDA BIFET, Juan, Diccionario de la Evangelización, BAC, Madrid, 1998)

Fuente: Diccionario de Evangelización