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Formas asociativas que se han dado en la Iglesia con variedad de contenidos, intenciones y alcances, aludiendo al valor radical del mensaje evangélico expresado por el mismo Cristo que deseo para sus seguidores la unidad y la unión como reflejo de su propia unión con el Padre celeste (Jn. 17.21).
Algunas uniones se definieron como Institutos seculares de apostolado compartido y otras como Asociaciones o Federaciones de los más diversos estilos, alcances y modelos. Se puede citar, entre los centenares de las existentes, media docena de «uniones» más catequísticas o significativas:
– Unión de las Hijas de Dios, fundada en 1924 por Teresa Iranci en la Diócesis de Treviso, en Italia.
– Unión y «Comunión en Cristo», fundada por María Teresa Linssen en 1927 en Oud-Valkenburg, en Holanda.
– Unión Apostólica Parroquial, iniciada en 1934 en la Parroquia de S. Hilario, en Florencia.
– Unión de Catequistas del Sto. Crucifijo y de María Inmaculada, surgida en Turín en 1914 por el Hno. Teodoreto, de las Escuelas Cristianas.
– Unión sacerdotal «Jesús Cáritas» surgida bajo la espiritualidad de Charles de Foucault en 1951 en Francia.
– Unión de Sacerdotes Seculares Misioneros, fundada por Augusto Doerner en 1913 en Reinsfeld y luego en Bonn.
Pedro Chico González, Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa, Editorial Bruño, Lima, Perú 2006
Fuente: Diccionario de Catequesis y Pedagogía Religiosa