Comentario de Números 16:4 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Cuando Moisés lo oyó, se postró sobre su rostro,

Núm 16:45; Núm 14:5; Núm 20:6; Jos 7:6.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

La respuesta de Moisés fue compleja. Primero, se sometió a la voluntad de Dios como se ve en su acto de postrarse sobre su rostro. Después, emitió una prueba basado en la expectativa de una demostración pública de la voluntad de Dios. Instruyó a cada uno de los disidentes a tomar un incensario, un receptáculo de metal para el incienso usado en la adoración, y poner incienso en él como muestra de acercamiento a Dios. Entonces todos esperarían la decisión de Dios. Finalmente Moisés repitió las mismas palabras de ellos. Antes estos hombres dijeron a Moisés y Aarón que habían ido muy lejos (v. Núm 16:3, «¡basta ya de vosotros!»); ahora Moisés decía que ellos habían ido muy lejos (v. Núm 16:7, «esto os baste»). Las palabras son precisamente las mismas en el texto hebreo.

 EN PROFUNDIDAD

¿Por qué los terremotos?

• Usó Dios un terremoto para juzgar a Coré y su familia (Núm 16:31, Núm 16:32)? El texto no lo dice, pero el fenómeno descrito se parece a un terremoto. De seguro la geología de Palestina predispone a la actividad sísmica. Ciertamente, en estos días se registran en Israel de 200 a 300 temblores menores cada día.

• Estudios geológicos modernos muestran la razón. El valle del río Jordán y el Mar Muerto yacen sobre una falla que va de norte a sur y forma parte de un sistema macizo transcontinental conocido como la Falla del Valle afro-arábigo. Las dos fallas paralelas que conforman esta grieta probablemente indican la superposición de dos de las placas tectónicas de la tierra. Numerosas fallas secundarias se dispersan de este a oeste desde la porción palestina de esta falla.

• Como resultado de estas características, el Medio Oriente ha experimentado numerosos terremotos a través de los siglos, algunos de los cuales han sido catastróficos. La Biblia menciona algunos:

• En los días de Saúl durante una campaña contra los filisteos (1Sa 14:15).

• En el monte Horeb donde se escondió Elías (1Re 19:11).

• En los días del rey Uzías (Amó 1:1; Zac 14:5).

• En la muerte de Jesús (Mat 27:51).

• En Filipos cuando Pablo y Silas fueron encarcelados (Hch 16:26).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe