Dios los bendijo y les dijo: “Sed fecundos y multiplicaos. Llenad la tierra; sojuzgadla y tened dominio sobre los peces del mar, las aves del cielo y todos los animales que se desplazan sobre la tierra.”
Gén 1:22; Gén 8:17; Gén 9:1, Gén 9:7; Gén 17:16, Gén 17:20; Gén 22:17, Gén 22:18; Gén 24:60; Gén 26:3, Gén 26:4, Gén 26:24; Gén 33:5; Gén 49:25; Lev 26:9; 1Cr 4:10; 1Cr 26:5; Job 42:12; Sal 107:38; Sal 127:1-5; Sal 128:3, Sal 128:4; Isa 45:18; 1Ti 4:3.
se mueven sobre la tierra. Sal 69:34.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Y los bendijo Dios: La sonrisa de Dios, la calidez de su beneplácito (Gén 1:22; Gén 2:3; Gén 9:1; Gén 12:2, Gén 12:3). Se deleita con lo que ha creado (Pro 8:30, Pro 8:31). La palabra sojuzgadla (Heb. kabash) significa «poner bajo servidumbre». Esta dura expresión se usa muchas veces para conquistas militares (Zac 9:15) y para Dios, que domina nuestras iniquidades (Miq 7:19). Como un rey se encamina a la guerra para conquistar un territorio, así el Gran Rey dijo a los humanos que dominaran y rigieran la tierra. Por otro lado, ¿por qué esta necesidad de sojuzgar la tierra? Existen a lo menos cuatro alternativas:
(1) El pecado iba a arruinar la tierra y la gente tendría que realizar un esfuerzo muy grande para sobrevivir (Gén 3:17-19).
(2) Satanás iba a desafiar la voluntad de Dios y haría todo lo posible por arruinarla.
(3) Si la tierra estuviera sola, no se mantendría bien. Para que esto no sucediera, Dios hizo planes para que la humanidad tuviera necesidad de administrarla y controlarla.
(4) La belleza de la tierra estaba solamente en el huerto de Dios (Gén 2:8); el resto era sólo tierra hostil. No importa cuál sea la respuesta, sojuzgar no significa destruir ni arruinar; significa actuar como administrador que tiene autoridad para desarrollar todo como Dios lo planeó. Y esta orden es igual para hombres y mujeres.
Dios el Creador, de una pintura de Miguel Angel en la Capilla Sixtina en Roma. Después de seis días de trabajo, Dios se regocijó con su creación (Gén 1:31).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
FRUCTIFICAD Y MULTIPLICAOS. Al hombre y a la mujer se les encargó que fueran prolíficos y que dominaran sobre la tierra y el reino animal.
(1) Fueron creados para formar relaciones de familia. Ese propósito expreso de Dios en la creación indica que Él considera una familia piadosa y la crianza de los hijos como de suma prioridad en el mundo (véanse Efe 5:21, nota; Tit 2:4-5, nota, y el ARTÍCULO PADRES E HIJOS, P. 1716. [Col 3:21]).
(2) Dios esperaba que ellos le consagraran todas las cosas en la tierra y que la administraran de una manera que lo glorificara a Él, cumpliendo el propósito divino (cf. Sal 8:6-8; Heb 2:7-9).
(3) Se puso el futuro de la tierra bajo su dominio. Cuando pecaron, acarrearon ruina, desesperanza y sufrimiento a la creación de Dios (cf. Gén 3:14-24; Rom 8:19-22).
(4) Solamente la obra de Jesucristo va a restaurar (a tierra a su perfecto lugar y función en su venida al final de estos tiempos (Rom 8:19-25; 1Co 15:24-28; Heb 2:5-8; véase Apo 21:1, nota).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
bendijo. Esta segunda bendición (cp. Gén 1:22) incluía la reproducción y el dominio Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla … Dios, que acababa de crear el universo, creo a su representante (gobierno) y la representación (cp. imagen y semejanza). El hombre llenaría la tierra y supervisaría su operación. «Sojuzgar» no sugiere una condición salvaje y rebelde para la creación, porque Dios mismo la había declarado como «buena». Más bien se refiere a un ordenamiento productivo de la tierra y de sus habitantes para que rindan sus riquezas y cumplan los propósitos de Dios.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
Gén 8:17; Gén 9:1; Gén 9:7; Sal 8:6-8; Sab 9:2; Sab 10:2; Stg 3:7.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
NOTAS
(1) O: “que se arrastra”. Heb.: ha·ro·mé·seth; lat.: quae mo·vén·tur.
REFERENCIAS CRUZADAS
v 49 Sal 107:38
w 50 Gén 9:1; Lev 26:9
x 51 Gén 2:15
y 52 Sal 8:6; Isa 11:9; Stg 3:7
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
Sed fecundos y multiplicaos, y llenad la tierra. La primera parte de esta bendición es idéntica a la que se da a las aves y peces en el quinto día (vers. 22). Por extensión, la bendición del día sexto se aplica también a los animales en los vers. 24, 25. Ahora bien, el vers. 28 va dirigido sólo a la humanidad.
sojuzgadla. Al mandato de ser fecundos se añade el mandato de sojuzgar y ejercer dominio sobre la creación de Dios, con la autoridad divina delegada.
Fuente: La Biblia de las Américas
llenad. Esta palabra no puede usarse para apoyar la idea de una repoblación de la tierra después de la destrucción de una civilización anterior, como expresan algunas teorías.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
y les dijo… En contraste con los animales → v. Gén 1:22 a los que bendice diciendo, Dios bendice y le dice al hombre. Es decir, establece una relación personal con el hombre, conversa con él → Gén 3:9; Gén 35:9-10, y lo conoce por nombre → Mat 16:18.
Fuente: Biblia Textual IV Edición
Lit., dijo Dios
O, arrastra
Fuente: La Biblia de las Américas
dijo. Dios bendice y le dice al hombre, en contraste con los animales g v. 22 que los bendice diciendo. A diferencia de estos, Dios establece una relación personal con el hombre, conversa con él g 3.9, 35.9-10 y lo conoce por nombre g Mat 16:18.
Fuente: La Biblia Textual III Edición
[=] *Gn 8:17 *Gn 9:1 *Sal 8:5