Comentario de 1 Juan 5:11 – Exégesis y Hermenéutica de la Biblia

Y éste es el testimonio: que Dios nos ha dado vida eterna, y esta vida está en su Hijo.

Dios nos dio vida eterna, dice el texto griego, empleando el tiempo aoristo, que indica un hecho definido singular. El referido hecho es la encarnación y el sacrificio del Hijo de Dios en su muerte de cruz. ¡Es tan significante, pues, este testimonio que Dios ha dado por tres testigos! ¡Envuelve la vida eterna!

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento por Partain

este es el testimonio. 1Jn 5:7, 1Jn 5:10; Jua 1:19, Jua 1:32-34; Jua 8:13, Jua 8:14; Jua 19:35; 3Jn 1:12; Apo 1:2.

Dios nos ha dado. 1Jn 5:13; 1Jn 2:25; Mat 25:46; Jua 3:15, Jua 3:16, Jua 3:36; Jua 4:4, Jua 4:36; Jua 6:40, Jua 6:47, Jua 6:68; Jua 10:28; Jua 12:50; Jua 17:2, Jua 17:3; Rom 5:21; Rom 6:23; 1Ti 1:16; Tit 1:2; Jud 1:21.

esta vida está en su Hijo. 1Jn 5:12, 1Jn 5:20; 1Jn 1:1-3; 1Jn 4:9; Jua 1:4; Jua 5:21, Jua 5:26; Jua 11:25, Jua 11:26; Jua 14:6; Col 3:3, Col 3:4; Apo 22:1.

Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico

este es el testimonio es la misma frase que en el v. 1Jn 5:9 se traduce «este es el testigo». El testimonio de Dios es que nos ha dado vida eterna … en su Hijo. La vida eterna no es algo que hay que ganar, sino un regalo de Dios (Rom 6:23).

Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe

Esto resume la bendición del testimonio subjetivo en el interior del creyente, y se trata de la vida misma que poseemos en Cristo y que se expresa en la gracia y el poder que Él suministra todo el tiempo. Es la experiencia misma de conocer a Cristo en la vida personal. La vida solo se encuentra en Él, así que es imposible tenerla sin Él.

Fuente: Biblia de Estudio MacArthur

5:11 — “Y este es el testimonio; que Dios nos ha dado vida eterna; y esta vida está en su Hijo.” Dios nos ha dado el testimonio triple. Es el testimonio que tiene que ver con la vida eterna. Esta vida eterna está en su Hijo. Compárense 1:2; Col 3:3-4; Gál 2:20; Jua 1:4; Jua 5:26; Jua 14:6; Jua 11:25-26; Hch 3:15. El versículo siguiente nos dice cómo poseer esta vida eterna.
Dios nos dio vida eterna, dice el texto griego, empleando el tiempo aoristo, que indica un hecho definido singular. El referido hecho es la encarnación y el sacrificio del Hijo de Dios en su muerte de cruz. ¡Es tan significante, pues, este testimonio que Dios ha dado por tres testigos! ¡Envuelve la vida eterna!

Fuente: Notas Reeves-Partain

LA ESENCIA DE LA FE

1 Juan 5:11-13

Y este es el testimonio: Que Dios nos ha dado la vida eterna, la cual está en Su Hijo. El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo, no tiene la vida.

Os he escrito estas cosas a los que creéis en el nombre del Hijo de Dios para que sepáis que tenéis la vida eterna.

Con este párrafo llega a su fin la carta propiamente dicha. Lo que sigue es más bien una posdata. El final es la afirmación de que la esencia de la vida cristiana es la vida eterna.

La palabra para eterna es aiónios. Quiere decir mucho más que simplemente que no se acaba nunca. Una vida que durara para siempre, que no tuviera fin, podría considerarse una maldición y no una bendición, una carga intolerable y no un regalo maravilloso. Hay solamente Uno a Quien se puede aplicar adecuadamente aiónios, y es Dios. En el verdadero sentido de la palabra, Dios es el único que posee y habita la eternidad. La vida eterna no es otra cosa que la vida de Dios mismo. Lo que se nos promete es que aquí y ahora se nos puede conceder participar de la misma vida de Dios.

En Dios hay paz, y por tanto la vida eterna quiere decir serenidad. Quiere decir una vida liberada de los temores que asedian la situación humana. En Dios hay poder, y por tanto la vida eterna quiere decir la derrota de la frustración. Quiere decir una vida llena del poder de Dios, y por tanto victoriosa sobre las circunstancias. En Dios hay santidad, y por tanto la vida eterna quiere decir la derrota del pecado. Quiere decir una vida revestida de la pureza de Dios e impenetrable a las infecciones contaminantes del mundo. En Dios hay amor, y por tanto la vida eterna quiere decir el final del rencor, la amargura y el odio. Quiere decir una vida que tiene en el corazón el amor de Dios, y el invencible amor del hombre en todos sus sentimientos y en todas sus acciones. En Dios hay vida, y por tanto la vida eterna quiere decir la derrota de la muerte. Quiere decir una vida que es indestructible porque tiene en sí la indestructibilidad de Dios mismo.

Juan está convencido de que tal vida nos viene por medio de Jesucristo y no de ninguna otra manera. ¿Por qué había de ser así? Si la vida eterna es la vida de Dios, quiere decir que podemos poseer esa vida sólo cuando conocemos a Dios y somos capacitados para acceder a Él y descansar en Él. Podemos hacer estas dos cosas solamente en Jesucristo. El Hijo es el único que conoce plenamente al Padre; y por tanto es el único que puede revelarnos plenamente cómo es Dios. Como decía Juan en su evangelio: » Nadie ha visto nunca a Dios. Es el único, Que es Dios, Que está en el seno del Padre, Quien nos lo ha dicho todo acerca de Dios» (Jn 1:18 ). Y Jesucristo es el único Que nos puede traer a Dios. Es en Él en Quien se nos abre el camino nuevo y vivo a la presencia de Dios (He 10:19-23 ). Podemos usar una analogía sencilla. Si queremos llegar a alguien a quien no conocemos, y que se mueve en un nivel totalmente diferente del nuestro, podemos conseguirlo solamente si encontramos a alguien que le conozca y esté dispuesto á presentárnosle. Eso es lo que Jesús hace por nosotros en relación con Dios. La vida eterna es la vida de Dios, y sólo podemos encontrarla por medio de Jesucristo.

Fuente: Comentario al Nuevo Testamento

1Jn 5:20; Jua 3:36; Jua 17:3.

Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana

REFERENCIAS CRUZADAS

d 259 Jua 17:3

e 260 Jua 5:26

Fuente: Traducción del Nuevo Mundo

11 super (1) El testimonio de Dios no es sólo que Jesús es Su Hijo, sino también que El nos da vida eterna, la cual está en Su Hijo. Su Hijo es el medio por el cual El nos da Su vida eterna, lo cual es la meta que El tiene para nosotros.