Entonces Jehovah afligió al faraón y a su familia con grandes plagas por causa de Sarai, mujer de Abram.
Gén 20:18; 1Cr 16:21; 1Cr 21:22; Job 34:19; Sal 105:14, Sal 105:15; Heb 13:4.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
El Señor hirió al Faraón. El primer ejemplo de los elementos de maldición y bendición de la promesa de Dios (Gén 12:2, Gén 12:3).
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
Jehová hirió a Faraón … con grandes plagas. La separación de Abram y Sarai tenía la suficiente gravedad como para suscitar la dramática intervención personal de Jehová. Abram había ideado una artimaña para protegerse (v. Gén 12:13, «y viva mi alma»), aparentemente sin pensar demasiado en Sarai; pero la reacción de Dios se centró en la protección de Sarai («por causa de Sarai»).
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
REFERENCIAS CRUZADAS
x 485 1Sa 5:11
y 486 Gén 11:29; Gén 17:15; Gén 23:19
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
el S eñor hirió a Faraón. El aspecto irrevocable de la promesa de Dios a Abram puede verse en el hecho de que Dios intervino para librar a Sarai del peligro en que Abram la había puesto. La promesa de Dios no sería frustrada por la insensatez humana, aun cuando la insensatez hubiera sido cometida por el que había recibido la promesa.
Fuente: La Biblia de las Américas
con grandes plagas. No se dice qué eran, aunque podría pensarse que era alguna enfermedad que impidió el Faraón ultrajar a Sara. Ciertamente, Abraham no merecía tal misericordia de Dios.