dijo: “Maldito sea Canaán. Sea el siervo de los siervos de sus hermanos.”
Maldito sea Canaán. Gén 9:22; Gén 3:14; Gén 4:11; Gén 49:7; Deu 27:16; Deu 28:18; Mat 25:41; Jua 8:34.
siervo de siervos. Las naciones que Dios destruyó ante Israel, eran descendientes de Canaán; y de igual manera eran los fenicios y los cárgatenos, quienes por mucho tiempo fueron sojuzgados con destrucción temible por los griegos y los romanos. Jos 9:23, Jos 9:27; Jue 1:28-30; 1Re 9:20, 1Re 9:21; 2Cr 8:7, 2Cr 8:8; Jua 8:34.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
Los tres hijos habían sido bendecidos por su padre (v. Gén 9:1) pero después de lo sucedido, Noé maldice a Cam indirectamente cuando maldice a su hijo Canaán (Gén 10:6). Algunas personas creen que este versículo justifica la esclavitud de la gente de África (quienes, y esto fue debatido, fueron los descendientes de Canaán) pero estas personas malinterpretaron el versículo. Canaán estaba bajo la maldición de su padre. Cuando los hebreos estaban al lado del Jordán a punto de entrar a la tierra de Canaán (Deu 1:1) fueron animados por este versículo de la promesa de la victoria sobre los cananitas.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
MALDITO SEA CANAAN. Cuando Noé se enteró de la vergonzosa acción de Cam, pronunció una maldición sobre Canaán el hijo de Cam (aunque no sobre Cam mismo).
(1) Tal vez Canaán estuvo de alguna manera implicado en el pecado de Cam o tenía los mismos defectos de carácter de su padre. La maldición indicaba que los descendientes de Canaán (que no eran negros) serían oprimidos y estarían bajo el dominio de otras naciones. Por el contrario, los descendientes de Sem y Jafet serían bendecidos por Dios (vv. Gén 9:26-27).
(2) Esta profecía de Noé era condicional para todos los afectados. Cualquiera de los descendientes de Canaán que se volviera a Dios también recibiría la bendición de Sem (Jos 6:22-25; Heb 11:31), mientras que cualquiera de los descendientes de Sem y Jafet que se apartara de Dios sufriría la maldición de Canaán (cf. Jer 18:7-10).
Fuente: Biblia de Estudio Vida Plena
Maldito sea Canaán. El cambio de Cam a su hijo Canaán estableció la legitimidad histórica de la conquista posterior de Israel de los cananeos. Este era el pueblo con quien Israel iba a ir a la batalla poco después de haber oído por primera vez a Moisés leer este pasaje. Aquí, Dios dio a Isrrael el fundamento teológico para la conquista de Canaán. Los descendientes de Cam habían recibido una sentencia de juicio por los pecados de su progenitor. En Gén 10:15-20 se ve que los descendientes de Canaán son los antiguos habitantes de la tierra posteriormente prometida a Abraham.
Fuente: Biblia de Estudio MacArthur
— … el último de los esclavos: La situación histórica que pudo dar pie a este oráculo de maldición dirigido contra Canaán, podría tal vez situarse en los tiempos de David, cuando este rey derrotó y sometió totalmente a los cananeos, convirtiéndolos en siervos de Israel.
Fuente: Traducción Interconfesional HispanoAmericana
NOTAS
(1) Lit.: “el esclavo de esclavos”.
REFERENCIAS CRUZADAS
h 351 Lev 18:3; Deu 7:1; Deu 27:16; Rom 1:27
i 352 Jos 17:13
Fuente: Traducción del Nuevo Mundo
Maldito sea Canaán. No se sabe si Canaán estuvo personalmente involucrado en el pecado de su padre (pudo haber visto primero la condición de Noé y haber avisado a su padre). Pero Cam es castigado por la deshonra que causaba a su padre al tener un hijo que le produciría deshonra a él. La maldición no es sobre los camitas, sino sobre los cananeos, los habitantes de Palestina que fueron primeramente dominados por Josué y posteriormente por Salomón (cp. 1Re 9:20-21). Los cananeos desaparecieron hace mucho tiempo; la maldición, por lo tanto, no puede aplicarse a nadie hoy.