Y los que habían sido enviados eran de los fariseos.
eran de los fariseos. Jua 3:1, Jua 3:2; Jua 7:47-49; Mat 23:13-15, Mat 23:26; Luc 7:30; Luc 11:39-44, Luc 11:53; Luc 16:14; Hch 23:8; Hch 26:5; Flp 3:5, Flp 3:6.
Fuente: El Tesoro del Conocimiento Bíblico
los fariseos eran una secta influyente que contaba con unos seis mil partidarios. Como estrictos intérpretes de la Ley en Israel, eran extremadamente celosos por los rituales y las tradiciones. No todos los fariseos eran como los descritos por el apóstol (Mat 5:20), pero por regla general, estos líderes religiosos no aceptaron al Mesías.
Fuente: Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia Caribe
Este versículo ha sido transmitido en dos versiones, una corta y una larga. La lectura más aceptada es la corta, y traduce el texto como si fuera un solo grupo, el mismo del v. Jua 1:19, que sigue la interrogación. Lectura corta: «los mensajeros de los fariseos» (TLA). Lectura larga: los que habían sido enviados eran de los fariseos. La lectura larga parece inferir que los fariseos habían enviado a otras personas que no eran de su grupo: los levitas y sacerdotes. Sin embargo, esta posible lectura ha sido puesta en entredicho debido a que los levitas y sacerdotes pertenecían, con bastante seguridad, al grupo de los saduceos sobre quienes los fariseos no tenían ninguna autoridad.
El término «bautismo» es usado ya ampliamente en todas las culturas. El principio básico en la traducción es que no se use ninguna expresión que dirija específicamente el modo cómo se debe bautizar en una cultura en particular. Por eso se prefiere usar simplemente cierta forma de transliteración del término “bautismo” o “bautizar”. Dicha forma es obviamente neutral en su significado, sin embargo, en la mayoría de los idiomas el término ha sido utilizado por misioneros y otros, y aplicado de manera arbitraria sin corresponder a su significado original.
En algunos idiomas hay términos autóctonos para bautismo que pudieran corresponder muy bien con el de las culturas del Nuevo Testamento. Por ejemplo, en el idioma maya el término significa literalmente “entrar en el agua”. Esta forma de expresión fue usada en primer lugar por los misioneros católicos y después por los presbiterianos, y es aceptado plenamente también por los bautistas. Cuando todos los grupos aceptan un término local no hay por cierto necesidad de prestarse formas nuevas. La opción por un término para “bautismo” no debiera basarse en la etimología pues lo que más importa es el significado de un término en su uso cotidiano. Por ejemplo, en algunos idiomas “poner agua” ha llegado a significar una expresión ampliamente usada por varias iglesias que no practican la misma forma de bautismo. Lo que es importante en el sentido de un término para bautismo no es la cantidad de agua que se emplea, sino el hecho de que el bautismo sirve para indicar la ceremonia de iniciación por medio de la cual una persona afirma su fe en Jesucristo y viene a formar parte de la comunidad cristiana. Debiera ser un término que pudiera combinarse con frases como “con agua” y “con el Espíritu”.
Fuente: Comentario para Exégesis y Traducción
los fariseos. Véase coment. en Mt 3:7.
Fuente: La Biblia de las Américas
fariseos. Véase nota en Mat 3:7.
Fuente: Biblia de Estudio Anotada por Ryrie
§ “Sacerdotes y Levitas”: Esto está implícito en el versículo Jua 1:19.