Dios escogió a Israel por su fiel antepasado, Abraham. Hebreos 11:8,11 relata los dos ejemplos más destacados de la fe de Abraham en Dios. Dios le dijo a Abraham en Génesis 12:2 que haría una ‘gran nación’ de sus descendientes. “Y haré de ti una gran nación, y te bendeciré, y engrandeceré tu nombre; Y serás una bendición…”

Abraham sólo tenía un ‘hijo de la Promesa’. Romanos 9:9 (CSB), “Porque esta es la declaración de la promesa: En este tiempo vendré, y Sara tendrá un hijo.” Dios repitió Su pacto con Abraham en Génesis 17:19, “Tu mujer Sara te dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Isaac; y estableceré mi pacto con él como pacto perpetuo para su descendencia después de él.”

Isaac engendró jacob Y Dios le habló a Jacob en Génesis 35:10-12 y le dijo: “Tu nombre es Jacob; no te llamarás más Jacob, sino Israel (el que tiene poder con Dios) será tu nombre”. Dios también le dijo: “Yo soy el Dios Todopoderoso; Sed fecundos y multiplicaos; De ti saldrá una nación y multitud de naciones, y reyes de ti. ”

Jacob, ahora rebautizado como Israel, tuvo doce hijos. Esta familia se multiplicó mucho mientras eran esclavos en la tierra de Egipto. Su gran éxodo marcó el nacimiento de Israel como nación. Dios los sacó de Egipto, desarrolló Su relación con ellos durante sus 40 años en el desierto y, finalmente, los condujo a la tierra prometida.  

Samuel resumió la historia y el legado de Israel en 2 Samuel 7:22-24 (CSB), “Por eso eres grande, Señor DIOS. No hay nadie como tú, y no hay Dios fuera de ti, como lo confirma todo lo que hemos oído. ¿Y quién como tu pueblo Israel? Dios vino a una nación en la tierra para redimir a un pueblo para sí, para hacer nombre para sí mismo , y para hacer por ellos hechos grandes y terribles , expulsando naciones y sus dioses delante de tu pueblo que redimiste para ti de Egipto. Tú estableciste a tu pueblo Israel para que sea tu pueblo para siempre, y tú, SEÑOR, te has convertido en su Dios. ” (Véase también Amós 3:2.)

Israel fue, es y siempre será los representantes especiales de Dios en la Tierra.  La promesa de bendecir a la raza humana a través de Israel con el nacimiento y la redención traída a través del Mesías es el gran Evangelio (buenas nuevas) de Gálatas 3:8.  El glorioso reino por venir pronto logrará esta gran bendición a través de Jesús y la Iglesia fiel en el Cielo y los héroes de la fe y el justo Israel en la Tierra.

 

profecías del fin de los tiempos continúan interesando a muchos. En el centro de mucha controversia está la pequeña nación de Israel. Odiado por muchos, Israel enfrenta grandes obstáculos para su propia supervivencia. Este folleto describe la profecía de los Últimos Tiempos y cómo Dios un día peleará por Israel mientras establece Su reino terrenal.

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