Jonathan Edwards, de Misceláneas #139:
Estoy convencido de que hay muchas cosas en la religión y las Escrituras que se hacen difícil a propósito para probar a los hombres, y para ejercer su fe y escrutinio, y para obstaculizar a los orgullosos y autosuficientes.
John Piper aborda este mismo tema, hablando particularmente sobre las dificultades que encontramos en Las Escrituras, en su sermón, “Por qué Dios inspiró textos duros.” Él dice que Dios nos ha dado textos duros para incitar al menos cuatro cosas, que parecen coincidir bien con Edwards’ pensamientos anteriores:
- Desesperación – Un sentido de total dependencia de la habilitación de Dios.
- Súplica – Oración a Dios por ayuda.
- Cogitación – Pensar mucho en los textos bíblicos.
- Educación – Capacitar a jóvenes y adultos para orar fervientemente, leer bien y pensar mucho.
Lea el sermón completo.