Una vez, un médico le dijo a un paciente: “Si no tienes sentido del humor, tendrás que tomar medicamentos.” Frente a él había una Biblia abierta en Proverbios 17:22:
“El corazón alegre hace bien como medicina, pero el espíritu quebrantado seca los huesos. “
Cuando nos reímos, se bombea una gran cantidad de oxígeno a nuestros pulmones; se utilizan los músculos que necesitan
ejercicio; todo el cuerpo tiene una sensación de bienestar. En un estudio, se descubrió que la risa está relacionada con el funcionamiento saludable de los vasos sanguíneos.
Un médico especializado en úlceras animaba a sus pacientes a recortar chistes divertidos y leerlos a sus familias durante la cena. mesa, para que todos pudieran beneficiarse de la risa natural que se produciría.
Es un hecho conocido que las personas alegres resisten mejor las enfermedades que las que están tristes y serias todo el tiempo. El escritor de Proverbios está de acuerdo:
“Un corazón alegre alegra el semblante, pero por la tristeza del corazón se quebranta el espíritu” (Proverbios 15:13).
“Todos los días del afligido son malos, pero el de corazón alegre tiene un banquete continuo” (Proverbios 15:15).
Después de que Harry Truman se convirtió en presidente, se escuchó a un senador decir: «Me alegro de que el presidente no haya perdido su sentido del humor.” El presidente respondió: “Cualquier hombre que haya tenido el trabajo que yo tuve, y no tuviera sentido del humor, no seguiría aquí.”
Durante un momento crítico de su presidencia, Abraham Lincoln convocó una reunión de su gabinete y comenzó a leerles algunos extractos humorísticos de un libro. Algunos de los asistentes no apreciaron el humor. Lincoln les dijo: ‘Señores, ¿por qué no se ríen? Si no me reía con la tensión que tengo día y noche, me volvería loco. Y necesitan la medicina de la risa tanto como yo.”
Hermanos y amigos, la conclusión es esta: La risa es la medicina divina. No tengamos miedo de incorporar el humor en nuestro diario vivir. Los predicadores y maestros de la palabra de Dios que incorporan el humor en su predicación y enseñanza verán una respuesta más positiva de su audiencia que aquellos que no lo hacen.
La risa es la receta de Dios para hombre para manejar la tensión, aliviar el sufrimiento y traer paz al alma.
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